Bajé al salón, tenía un examen. Casi al instante Tom bajó por las escaleras a toda prisa con su mochila.
- Adiós Sam, disfruta de tu examen - Odio este tipo de comentarios sarcásticos, no los soporto. Aún así intenté ser simpática.
- Hasta luego Tom. - Y se fue
Me senté en la silla en la que llevo sentándome cada mañana desde hace 2 años, y abrí el libro de matemáticas para intentar estudiar un poco antes de que llegará Martha, mi profesora particular. Martha viene aquí cada mañana desde que empecé a estudiar en casa, me enseñó a hacer raíces cuadradas, múltiplos y divisores... y cientos de cosas que le debería agradecer más amenudo; Si no fuera por que mis padres le pagan una cantidad lo suficiente alta de dinero como para aguantarme 2 años, y todos los que me hagan falta. Vivo en una familia bastante acomodada, de clase alta; Y tenemos los típicos privilegios de los que una familia de clase alta puede presumir, una casa grande, limpiadores y profesoras amargadas que estudiaron en Harvard. No os confundáis, aprecio a Martha, es buena persona, pero no es el perfecto ejemplo de la amabilidad y de la simpatía. Sin embargo, prefiero aguantarla estos 2 años que me quedan de educación secundaria en casa, aguantándola a ella, que pasarlos aguantando a los 5 inbéciles que me arruinaron la vida hace, justamente, 2 años. Ya os contaré esa historia algún día, hoy no estoy de humor.
Suena el timbre y me sobresalto, quizá por que no tenía nada sobre geometría en la cabeza. Mi padre abre la puerta y entra Martha; Siempre tan impecable, con una sonrisa de oreja a oreja y unos tacones como la palma de mi mano. Es muy alta y con esos zapatos parecía un gigante, pero sus hoyuelos totalmente simétricos y su pelo dorado la hacían alguien atractiva. Ahora tendrá unos 45 años, pero en su juventud debía de ser muy guapa. Aparte de todo esto, no sé nada más de ella, no es muy abierta conmigo.
Habla durante unos segundos con mi padre y viene a la mesa.
- ¿ Preparada para el examen ? - También odio estas preguntas, nunca llevan a nada. ¿quién coño está preparado para un examen? Intenté ser amable.
- Creo que sí.
Me dio un folio lleno de preguntas que no podía contestar, ya que mis conocimientos de ese tema eran completamente nulos. No estudié nada, la verdad; Al igual que en este último trimestre en el que no he hecho nada. Así que el examen me salió realmente mal.
- Ya he terminado - dije.
- ¿Ya? ¿Tan pronto? - Me dijo con ese tono suyo que tanto odio.
- Sí, no me ha salido demasiado bien - Dije con un poco de incomodidad, ya que llevaba diciéndole eso durante los 10 anteriores exámenes.
Empezó a corregirlo, ya que sobraba más de la mitad de la clase.
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Mi perfecta soledad
Teen Fiction¿Crees que la soledad es lo peor que te puede pasar? Para Harper no, de hecho para ella no hay nada mejor: vivir sin que nadie te moleste, leer libros a montones (cosa que le encanta), estar todo el dia con un reproductor de música cerca....... Par...