Caminábamos por los largos pasillos de este lugar. Thomas iba caminando enfrente mío, chocando algunas cosas en el camino. Minho simplemente iba caminando hacia el frente, sin molestarse por mirar si algo servía o no.
Por fin llegamos a un cuarto que tenía más interrumpirse y máquinas. Cables en el piso y también en el techo, también había muchas otras fuentes de energía como en el otro cuarto .
Pise algo que hizo que mi pie doliera como el demonio. Solté un quejido que al parecer nadie escuchó y miré mi pie. La verdad no se podía apreciar mucho pero por lo que veía. Creo que algo había atravesado el zapato.
Me senté en algo que parecía ser un sillón y con cuidado levanté mi pie. Puse la lámpara en mis labios para que pudiera alumbrar mientras veía que pasaba con mi pie. Un vidrio se encontraba atravesando mi pie. Bueno la suela, porque todavía no se había enterrado bien. Intenté sacarlo pero fue inútil, en cambio me lo enterré más. Solté un grito y pude ver sangre saliendo de mi suela. Decidí sacarme el zapato, creo que sería lo mejor. Retiré el zapato con cuidado y pude ver mi gran herida. No se podía apreciar bien porque estaba llena de sangre, pero pude notar que era una gran cortada y era profunda. Busqué en mi mochila algo con lo que me pudiera curar. Encontré una botella de agua y una venda que había encontrado por ahí. Vertí un poco de agua a mi herida, lo cual provocó que gritara. Luego coloqué la venda alrededor de la herida y busqué por otro tipo de calzado, por que definitivamente, el que llevaba,tenía un gran hoyo enel medio. Busqué pero no podía ver nada. Mi mirada se posó en unas botas negras que se encontraban tumbadas en otro sillón. Con cuidado me acerqué a ellas y las tomé. Me saqué el otro zapato y coloqué las botas.
Ya cómoda, me paré del sillón con todas mis fuerzas, intentando no apoyar mi pie y me di cuenta que los chicos ya no estaban. Estaba totalmente a oscuras, bueno solo podía ver la luz que salía de mi linterna. Me habían dejado.
Puede que actúe como si fuera la persona más valiente, pero la verdad nunca he sido una persona a la que le guste la oscuridad y menos estar sola rodeada de esta.
-¡Thomas! ¡Minho!- susurré/grité sus nombres. Ya que la verdad no quería llamar la atención de alguien más. Si es que alguien más se encontraba en aquí.
Con cuidado caminé sobre algunas cosas. Mis manos temblaban y mi respiración estaba entre cortada. De repente escuché un ruido detrás de mí, rápidamente me volteé y alumbre al lugar donde creí haber escuchado el sonido. Pero no vi nada. Típico de las películas de terror, de seguro iba a ser la primera en morir.
Otro sonido se escuchó del otro lado del cuarto. Lo que hizo que girará, pero nuevamente no pude ver nada. De repente las luces se prendieron y un grito desgarrador se escuchó detrás de mi, y luego se empezaron a escuchar más. No lo pensé dos veces y salí corriendo de ahí. Aunque mi pie doliera a muerte. En esos momentos no me importaba el dolor.
Corrí y corrí, a lo lejos podía escuchar los gritos de alguien, también escuchaba como alguien me seguía. De repente una cosa saltó sobre mi. Era horrible, no tenía ojos y sus venas se veían totalmente negras y moradas. De su boca salía algo negro y simplemente era aterrador.
Le di un puñetazo en la cara, pero la cosa casi ni si movió. Podía escuchar como otras de esas cosas venían, así que tenía que actuar rápido. Agarré un tubo de metal que se encontraba por ahí, y golpeé a la cosa en la cara y esta vez si se quitó sobre mi. Me paré sin perder ningún segundo más y empecé a correr.
Ya no podía escuchar los gritos de los que creí eran de mis amigos, ahora solo escuchaba los quejidos de los monstruos que me seguían. Podía jurar que todo se volvió en cámara lenta. Sólo podía escuchar mis pisadas y mi respiración agitada. A lo lejos pude ver una puerta roja. Corrí y la abrí de una patada.
Ahora todo estaba oscuro. Ya no podía ver nada. Peor aún seguía corriendo y no pensaba detenerme. Me estaba alejando de las cosas así que seguí corriendo. Había como una roca y salte sobre ella.
Solté un grito al ver unas caras y las otras personas también gritaron. Me alumbraron con una linterna y se escucharon suspiros y luego sentí unos brazos alrededor mío. Levanté la vista y vi a Thomas con los ojos cerrados mientras me abrazaba. No lo dude ningún segundo más y lo abrace de vuelta. Nos quedamos así por unos segundo hasta que por fin me separe.
-Me asustaron- dije mientras intentaba recobrar la respiración.- me abandonaron- dije mientras golpeaba a Thomas me el brazo.
-Tú te fuiste. Minho y yo te estuvimos buscando- me susurró Thomas mientras señalaba a Minho, que este asintió.
-¿Me fui? Algo se me había enterrado así que tuve que hacer algunas cosas y para cuando terminé ya no estaban- le susurré más fuerte. Thomas simplemente soltó un suspiro y me dijo que debería dormir un poco.
Agarré mi mochila y la puse junto a la de Thomas. La verdad me sentía más segura junto a él. Puede que no sea una persona real. Pero en estos momento lo es para mí.
Thomas se acostó junto a mi y yo intenté acurrucarme a su pecho. Thomas abrió los brazos y así me pude acurrucar bien junto a él. Escuché como Teresa soltaba un bufido y gruñía. Thomas cerró su brazos y me apego más a él.
Después de unos minutos podía sentir como el pecho de Thomas subía y bajaba. Su respiración era tranquila y tenía la boca levemente abierta. Se veía tan tranquilo. Sus pelos se le pegaban a la frente. Y sus lunares se podían distinguir con la luz de la luna. En verdad era muy guapo.
No podía dormir. El sonido de pasos y los quejidos de los monstruos que supongo esos eran los cranks de los que Janson había hablado. En verdad eran feos y aterradores.
Por fin mis ojos se empezaron a cerrar. El sueño empezaba a apoderarse de mi. Miré a Thomas por última y luego cerré los ojos. Cayendo profundamente dormida.
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The Maze Runner •DREAM• [Thomas]
Fanfiction"Te voy a amar y a apoyar por el tiempo que esté aquí, porque sé que cuando despierte de este loco sueño, tú ya no serás Thomas y no tendrás ni la menor idea de quién soy" ESTA HISTORIA ESTA SIENDO EDITADA TODOS LOS DERECHOS VAN A James Dashner y s...