PVO LAURA:
Dani: laura.
Yo: ¿que?
Dani: ¿me estás escuchando?
Yo: Dani, tenemos una maldita exposición ahora y quiero asegurarme de que me lo sé todo.
Dani: Dios mío, laura, esta exposición la ha atrasado más de dos veces y siempre te lo has sabido, llevas evitándome el tema 2 semanas, ¿por qué no contestas?
Yo: Dani, a ver, ¿que quieres que te explique? A ver si así me dejas en paz.
Dani: ¿por qué me pediste que te besara y después te fuiste como si no hubiera un mañana?
Yo: ¿podemos hablarlo por la tarde?
Dani: podemos, pero yo sé el motivo, te gusta alguien, ¿y sabes? Me duele que no me lo cuentes a mi que se supone que soy tu mejor amigo.
Se levanta de la mesa y minutos después entra el profesor por la puerta.
Genial, creía que los nervios no volverían a mi, pero si lo hacen.
Cristian: está bien chicos, hoy sí que si será la exposición, recordad que cuenta un punto para la nota final, contaré tanto la nota grupal como individual, así que por el bien de su grupo espero que hayan estudiado.
Bajo la cabeza y rezo para no ser el primer grupo, que por suerte no lo somos, ni tampoco El Segundo, pero el tercero si, y los nervios han vuelto a mi, y más cuando me levanto y el me mira.
Hace más de dos semanas que evitaba que nuestras miradas chocaran, pero claro, tenía que ser hoy.
Nos levantamos todos de las sillas y vamos hacia su lado, y como si la suerte no fuera conmigo me dejan a mi a su lado.
Empieza a hablar pablo, después Cristina y Dani y ahora me toca a mí y después claudia, pero no soy capaz de decir nada, balbuceo como si no hubiera un mañana, intento calmarme poniendo una mano en la mesa y suspirando, vuelvo a intentar hablar, pero no puedo ¿había comentado alguna vez que tengo pánico a hablar delante de gente? Noto como una mano se pone sobre la mía, y eso hace que me ponga peor porque sé que es la suya.
Andrea: venga joder, que no tengo todo el día, no se lo sabe, suspéndela y ya está.
Cristian: ¿puedes callarte?
Algunos de los alumnos repiten la frase de Andrea y siento que voy a explotar, que no puedo seguir, así que salgo corriendo de clase y me meto en el baño, ya no queda nada para que termine la clase, pero no podía seguir ahí, no podía, sentía que me quedaba sin respiración, es más, aún lo noto.
Escucho la puerta abrirse y alguien hechando el pestillo, levanto la cabeza y veo que es el, pero al verme así enseguida se agacha.
Cristian: respira por favor, hazme caso, mírame, y respira lentamente, estoy contigo ¿vale? No te voy a dejar sola, respira por favor mi niña.
Ese "mi niña" hace que le mire y que haga lo que me ha dicho, una vez que me calmo un poco más bajo la mirada, pero nuevamente el me la levanta y vuelve a hacer lo mismo que hizo dos semanas atrás.
Si, besarme, pero esta vez de verdad, y bien.
Sus labios y los míos se movían juntos, y mejor que dos semanas atrás.
Unos golpes en la puerta hace que nos separemos y miremos.
Cristian: no le hagas caso a esa niña, ni a ella ni a los demás. - ¿de qué está hablando? Creo que ve que estoy perdida- olvida lo que ha pasado.
ESTÁS LEYENDO
Amor.... ¿imposible? Profesor- Alumna.
Teen Fiction¿realmente se puede ser feliz cuando te enamoras inesperadamente de tu profesor? Esta es la historia de Laura, una chica de 17 años con una vida normal, con unos padres normales, con unos amigos normales hasta que un día su profesor de filosofía se...