El chico nuevo

Capítulo 4

Aaron POV

Estábamos entrando al instituto ya, yo entré detrás de Celeste, casi llegamos tarde pero nos hicimos un spring y conseguimos llegar antes de que nos cerraran las puertas para apuntarnos en una lista.

-¿Escuchas eso? -Dice Celeste mientras que subimos las escaleras y suena el timbre. -Es el sonido de la victoria.

-Es solo un timbre. -Reí y al ver que me miraba mal solté una carcajada mucho más fuerte.

-No te rías de mí... -Dijo haciendo pucheros.

-No me río de ti, me río contigo. -Dije mientras pasábamos por la puerta de clase, en ese momento me fijé que David nos estaba mirando, cuando le miré apartó la mirada, me senté al lado de ella al igual que ayer y me puse a pensar en cosas y preparar los materiales para clase.

En realidad no sabía por qué se comportaba así pero supuse que sus motivos tendría para ponerse celoso, lo que se es que yo no hice nada antes pero portándose como lo estaba haciendo solo me daba ventaja a mi, digo en el contexto para estar con Celeste y ganarme su amistad y si llegaba a algo... pues ¿por qué no? era una chica maja y guapa, tenía pinta de ser una chica que valía la pena estar con ella pero... tenía que hablar con él, quería saber si está enamorado de ella o no,  habían pasado muchos momentos juntos y tenían mucho apego y cariño.

-Buenos días chicos, empecemos la clase. -Cuando la profesora de biología entró el silencio en la clase se hizo presente, ella empezó a explicar cosas con ayuda de pequeños dibujos del libro y la pizarra, en clase había todo prototipo de estudiantes, en lo que la vagancia respectaba, a una cuarta parte de la clase esa asignatura le parecía aburrida, en esa parte estaba Celeste incluida, los demás estaban tomando apuntes de lo más importante que iba diciendo, yo me sumé a ellos pero poco a poco mi cabeza fue cayendo. Dejé el bolígrafo en la mesa y me fijé en lo que estaba haciendo mi compañera. Estaba dibujando un personaje de un anime o un manga, dios sabe cual y si en realidad era un personaje o era algo que creó su imaginación.

-Dibujas bien... -Dije en un susurro.

-Gracias. -Ella solamente dijo eso y siguió concentrada en su dibujo.

Esperé a que terminara la clase y seguí pensando en mis asuntos, ahora más bien en mi mejor amiga del otro instituto, Laura, los chicos que me hicieron tanto daño nos separaron. Que ellos me insultaran no me dolía tanto como para irme de allí pero cuando escuché el primer insulto venir de sus labios todo dentro de mi se derrumbó, yo confíe en ella y me falló. 

El timbre comenzó a sonar y todos se levantaron de su sitio para hablar con sus amigos, David no se levantó y Celeste fue al baño así que decidí ir a hablar con él aunque sabía que podría salir mal.

-Hola David. -Al escuchar su nombre él levantó su cabeza despacio.

-Hola. -Dijo en un tono seco. -¿Qué quieres?

-Bueno, quería preguntarte algo...

-Suéltalo ya. -Dice alzando las cejas. -A ver si es interesante.

-Bueno...

-Al grano chico.

-¿A ti te gusta Celeste? Lo preg...

-¿Por qué me tendría que gustar? -Antes de terminar de explicarle me corto y me respondió con otra pregunta.

-Primero va mi pregunta.

-No. -Tragó en seco y miro hacia abajo.- No me gusta. ¿A qué viene esto, te gusta a ti?

-Pues a ver, la primera impresión s...

-Vamos, que te gusta, ya está tampoco es tan difícil decirlo. Repite conmigo: Me gusta Celeste.

-Pero no he dicho que me guste solo dig...- me hizo una señal con su dedo índice para que me callara y repitiera lo que dije.- agg... me gusta Celeste.

-Así me gusta, eres sumiso, en esta clase vas mal chaval, te van a comer. -Se empezó a reír y yo me fui a mi sitio donde Celeste ya estaba, seguía dibujando, cuando miré hacia atrás en dirección a David el tenía la cabeza agachada al igual que cuando me acerqué a él.

Las horas pasaban y Celeste podía ver mi preocupación en la cara, no hablé en lo que quedó de día y ella solo hacía preguntarme que me pasaba pero yo no la contestaba y sí, se que es algo duro y cruel por mi parte, ella solo se preocupa por mí pero yo no quiero que se preocupe por mi, no quiero darle problemas. Nos fuimos juntos a casa y cuando llegué comí, me puse mis auriculares y me tumbé en la cama, escuchando música me dormí pensando en lo que dijo David y como me habló, más bien lo segundo que lo primero pero sobretodo me dolió bastante una de sus frases: "Eres sumiso, en esta clase vas mal, te van a comer. "