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Dedicado a tatianajacky10
Pp96
Louis pagó el taxi con su VISA. Era genial tener su cartera, dinero, teléfono, de nuevo.
Subió corriendo las escaleras que daban a la puerta de Harry y buscó en su bolsillo. Él y Liam tenían una llave de emergencia de casa de los Storan y eso era con total claridad una emergencia.
Cerró la puerta y subió las escaleras. Escuchó la voz de Liam.
Niall se apretaba entre los ojos con la esperanza de que el dolor de cabeza que estaba empezando a estallarle parase.
Cuando Louis colgó la llamada, Liam se vino abajo definitivamente.
Llevaba llorando sin parar desde entonces, y Harry le tenía abrazado mientras lloraba con él.
-De verdad le echo demasiado de menos. No paro de pensar en todos los años que desperdiciamos. Podíamos haber estado juntos antes pero no lo hicimos. Y ahora está enfadado.
-¿Y si dormimos? –intentó Niall.
-¿Qué hago si se enfada y me deja?
-No lo hará –dijo Harry.
Louis abrió la puerta del cuarto.
-No, no lo haré, idiota.
Los tres ocupantes de la cama le miraron con la boca abierta. Louis movió la mano buscando cigarrillos y luego recordó el embarazo de Harry.
-La verdad, siempre que escuchaba eso de tríos creía que eran más divertidos –dijo tratando de no llorar. –las niñas de dieciséis escriben cosas con más pasión...
-¡Louis! –Liam saltó de la cama y corrió hacia él.
Louis abrió los brazos pero Louis se arrojó sobre él con demasiada fuerza y mucha torpeza.
Se golpeó la cabeza contra el suelo y Liam se incorporó sobre las manos, encima de él.
-¿Te he hecho daño?
-Un poco.
-Perdóname... estoy un poco borracho.
-No me digas.
-Te eché tanto de menos... –Liam empezó a besar a Louis, allí en el suelo.
-¡PERO NO FOLLÉIS EN MI SUELO! –gritó Niall.
-Niall, amor, eres un amargado. –Harry se limpió las lágrimas de emoción –pero si es precioso...
-Liam... Liam, mi amor... –dijo Louis sujetándole.
-Dime, Lou.
-Me está doliendo la espalda. ¿Y si te levantas y nos vamos a casa?
-Perdón... –Liam se apartó y usó las manos para incorporarse, pero trastabilló hacia atrás. Louis se levantó y le sujetó.
-Liam...
-Id al vuestro cuarto de siempre, es tarde. –dijo Harry.
-Sí, mañana hablamos –dijo Louis sosteniendo a Liam con mucho esfuerzo. –vamos a dormir, amor...
Caminó con él a la habitación que solían usar, dos cuartos más allá.
-¿Savvy está aquí con Kyle o con tu madre?
-Con mi madre.
Louis asintió. Liam se tropezó y le empujó contra la pared.
-¡Liam!
-Perdón...
-Liam, ¿has estado comiendo más de lo normal?
Liam se detuvo y se apoyó contra la pared, dejando a Louis empotrado entre ésta y su cuerpo.
-Un poco. Y no he ido al gimnasio.
-Me parecía...
-Tú has perdido peso.
-Bueno, tres kilos...
-Yo un poco más... ¿tanto se nota?
-Es que me está costando sostenerte. –Louis le sujetó de la cintura. –vamos a la cama, venga.
-Louis.
-¿Qué?
-¿No has conocido a nadie que te guste más que yo, verdad?
-Liam, por favor... vamos a la cama.
Harry miró de reojo a Niall, que se estaba acomodando en su lado de la cama. Protestando mientras golpeaba la almohada para ajustarla.
-¿Por qué estás tan molesto?
-Sólo estoy estresado.
-Me gusta más cuando el alcohol te pone caliente y no estúpido.
-¿Ahora el estúpido soy yo?
-Sí, y como parece que así es como vas a seguir, mejor duermo antes de que Eileen despierte.
-Pues para eso pago dos putos niñeros, si despierta y estamos ocupados...
-Llevas una hora diciendo que quieres dormir.
-Porque estaba Liam.
-No te aclaras, Niall.
-Harry...
-¿Qué? –dijo éste poniéndose de lado de espaldas a él.
-Desnúdate, voy a follarte.
Liam se acostó de espaldas en la cama con Louis sobre él.
-Al fin –dijo con una risa malvada.
-¿Al fin? –Louis se levantó como pudo y se acostó a su lado.
-Al fin serán ellos quienes nos escuchen a nosotros –Liam se rió.
Louis se apoyó contra su pecho y le abrió el pijama.
-¿Quieres que te escuchen?
-Más que nada.
-Mmmmm llego y mira lo que me encuentro. Mi marido está increíblemente borracho y demasiado caliente. Se supone que deberías cuidarme tú a mí, vengo de una clínica.
-No puedo creer que estés aquí –dijo Liam al fin.
-Ni yo que esté contigo... –le besó y empezó a bajarle el pantalón del pijama. -¿te vas a desmayar a medio polvo? Estás muy pedo, Payno.
-Sigue.
Louis le quitó el resto de la ropa y se quitó la suya.
-Supongo que es mi momento –Louis se lamió los labios. Metió la mano en la boca y se la chupó dejándola completamente empapada. La sacó y metió tres dedos en el culo de Liam – mi momento de triunfar...
Liam gritó pero entonces se escuchó algo.
Gemidos.
-¡No jodas! –Liam abrió la boca – yo voy a gritar más fuerte.
Harry chilló feliz. Niall estaba molesto con el mundo, ebrio y descontrolado y por lo tanto no tan delicado con el tema del embarazo.
Harry estaba posicionado en cuatro sobre la cama, con Niall metiendo y sacando su polla con fuerza y jadeando.
Le encantaba esa postura pero Niall no la solía considerar adecuada cuando estaba en estado porque decía que se esforzaba demasiado.
Pero no parecía recordar eso en ese instante.
Harry tenía los músculos de los brazos tensos y gemía mientras su culo se veía llenado de Niall una y otra vez.
Niall se detuvo un segundo y sonrió.
-Vaya, no somos los únicos que estamos follando – dijo entonces.
Harry trató de respirar. Estaba a segundos del orgasmo y Niall se detenía.
-Niall...
-Ponte más cómodo, esa postura...
-¡Mierda!
Niall le colocó boca arriba y le sonrió, acariciando su propia polla hinchada, dura y mojada con líquido preseminal.
-Tranquilo... voy a acabar con lo que estaba haciendo....
Harry movió el trasero, inquieto.
Louis tenía la cara hundida entre las piernas de Liam. Había empezado por lamer su erección. Quería comerse entero todo lo que su marido ofrecía.
Y saber que Liam quería que los Storan escuchasen le inspiraba más para lograr hacerle gritar, jadear y gemir más alto y más fuerte.
Así que primero chupó el glande, sacándosela luego para proceder a meterse la verga entera, hasta el fondo. Con los dedos mojados empezó a meterlos y sacarlos rápido del culo de Liam, acompañando los movimientos de su cabeza metiendo y sacando esa polla dura, hinchada, y deliciosa.
Liam gritó. Louis metió cuatro dedos en su culo y siguió con sus entradas y salidas, rápido, mientras al mismo ritmo movía el cuello, tragando y sacando el pene entero cada vez, llenándolo con su saliva. Cada vez que se lo sacaba hacía un ruido húmedo delicioso, y se sacudía frente a su cara. Con la mano derecha apretó con delicadeza las bolas duras de su esposo y con la izquierda siguió follando su culo, tan necesitado de él. Y con la boca siguió comiendo esa verga que tanto había añorado.
Dejó su boca libre un momento para mirar a su marido.
-Gime como una puta, grita como una zorra y sigo.
-¡SIGUE!
Louis se rió y mordió muy suave la punta de su polla. Su boca notó el sabor salado del primer semen y justo en ese momento se metió el miembro hasta el fondo e hizo presión con la mandíbula y la garganta.
Los chorros de semen se deslizaron por su garganta, llenándole. Siempre le decía a Liam que se apartase, pero se lo tragó todo, absolutamente todo, mientras el pene vibraba contra su interior y sus dedos intensificaban el orgasmo de Liam.
Salió de debajo de las piernas de Liam. Ese grito había resonado por toda la casa y Louis juraría que toda la maldita manzana.
-He vuelto, bebé.
Liam sonrió, cerró los ojos y se quedó inconsciente.
Harry miró a Niall con los ojos abiertos.
-¿Has escuchado eso?
-Bien, sigamos con lo nuestro...
Harry asintió, abriendo mucho las piernas.
-Está bien... vamos...
Niall se posicionó pero entonces se detuvo.
-¿Pasa algo, Niall?
-Tengo ganas de vomitar.
-¿Ahora?
Niall saltó de la cama y Harry se le quedó mirando.
No se lo podía creer.
