Cupido se equívoco (Team Nathaniel CDM)

Los celos de Castiel (Parte 2)

(Nathaniel)
Me sorprendió la actitud de Castiel, jamás se habia comportado de esa forma por una chica a menos que sintiera algo por ella.

Me enojó ver como Castiel se llevaba a la fuerza a Ghiesich y no sabia que hacer para evitarlo.

Decidí seguirlos de lejos y oía las quejas de Ghiesich.

Quise intervenir hasta que oí lo que decian.

C-Vamos a casa, tienes que estar lo más alejada de él.

G-Ahhh... Que viva contigo no significa que tengo que hacer todo lo que dices.

C-Si vives bajo mi techo, vives bajo mis reglas.

¿Cómo que viven juntos?

Hasta donde yo recuerdo Castiel vivía solo, ¿desde hace cuanto Ghiesich vive con Castiel?

Seguí caminando viéndolos a lo lejos, y vi que Castiel la cargo en sus hombros, fue lo mas que pude aguantar.

Me quedé parado y decidí regresar a casa, si llegaba tarde sin ninguna explicación mi padre me daría una tunda.

(Ghiesich)
No se puede con Castiel, es un idiota.

No puedo creer que se atreviera a alejarme de Nath, estaba apunto de besarme y la verdad quería que lo hiciera, pero el imbécil tuvo que estar cerca para arruinarlo.

Y lo que es peor, se atrevió a cargarme hasta llegar a la casa, la gente nos miraba como si fuéramos una pareja jugando.

Me las va a pagar esa cabeza de kétchup.

De repente apareció en la puerta de mi cuarto.

C-¿Vas a bajar a cenar?

G-No.

C-¿Sigues molesta conmigo tabla?

G-Callate pelo de menstruación.

C-Creo que estas en tus días. Hay unas pastillitas que te ayudarían...

G-Ahhh, idiota... Sal de mi cuarto.

Solo se me queda viendo con su cara de idiota.

G-Que salgas de mi cuarto imbécil.

C-Eres tan infantil.

G-Yo te enseñaré lo que es ser infantil.

Me prepare para darle una patada pero el cobarde salió casi corriendo de mi cuarto.

G-Aparte de idiota, gallina.

Tengo que hacer algo, no pienso pasarla encerrada, solo porque este imbécil vive aquí.

(Castiel)
Era muy divertido hacerla enojar.

Al principio no la quería cerca pero su padre me insistió mucho de que se quedará a vivir conmigo.

Y la verdad no me arrepiento de que vivíamos bajo el mismo techo porque con su humor tan cambiante me he divertido mucho.

Estuve esperando a que bajara pero la desgraciada no bajo a cenar, y tampoco escuche ningun ruido en su habitación.

Subí las escaleras y me acerque a su puerta para saber si no se ha matado con una de sus rabietas.

Abro la puerta y no veo a nadie, veo su ventana abierta.

C-Mierda, se me pelo la muy hija de su...

Ya me habían advertido que era muy rebelde, algo que tenemos en común, pero no pensé que fuera tan escurridiza.

Tengo que buscarla, si algo malo le pasa me van a matar.

(Ghiesich)
Agarre mi mochila y abri la ventana, era el segundo piso pero es pan comido, sé parcur.