Parte única

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Tops! Luke 23
Bottoms! Michael 22

•♥•

MUKE.


Michael estaba sentado en el taburete, apoyando sus codos en la isla de mármol, mientras que en sus manos sostenía una taza de café medianamente llena, en un vago intento de calentarlas.

Hacía un frío de mierda.

Luke entró a la pequeña cocina del departamento, sonriendo al instante de ver a su novio con una de sus sudaderas (que le llegaba a medio muslo y cubría sus manos) sosteniendo una taza de café.

Se acercó silenciosamente por detrás, rodeando a su chico con sus largos brazos y provocando que se sobresaltara. Dejó un corto beso en su pálido cuello, que se encontraba lleno de marcas rojizas y púrpuras de la noche anterior.

—Mierda Luke, me asustaste.— habló Michael.

El rubio soltó una pequeña risita sobre su cuello, logrando que un escalofrío recorriera el cuerpo del más chico.

—Lo siento bebé — se disculpó. Michael sintió su sonrisa.

El teñido giró un poco su cabeza y estiró sus rojizos labios hacia Luke. El rubio sonrió y rozó apenas sus labios, alejándose con rapidez. Luke rió al ver el ceño levemente fruncido de Michael.

—No es gracioso Luke— espetó Michael, girándose nuevamente para dar un sorbo a su café.

—Oh, vamos Mikey, no te enojes— dijo en el oído del chico mientras sus manos se dirigían a los suaves muslos de su novio.

—Cállate idiota, no estoy enojado.— dijo con notable diversión en su voz.— Ahora dame mi verdadero beso de buenos días.— volteó, dejando la taza vacía en la isla.

Entonces Luke presionó suavemente sus labios contra los propios, aún con sus grandes manos en las piernas del chico.
Ambos abrieron sus bocas, ansiando el contacto entre sus lenguas y es que nunca tenían suficiente del otro. Se amaban más que a nada en el mundo.

Al separarse, juntaron sus frentes. Y aunque estaban en una posición incómoda, realmente no les importaba.

Volvieron a la posición inicial: con la espalda de Michael contra el pecho de Luke. El rubio abrazaba a su chico, intentando darle algo de calor, al sentir como el cuerpo de su bebé temblaba por el frío día.

Duraron algunos minutos así hasta que, apesar del contacto, el gélido clima se hizo insoportable.

—Vamos a la cama, amor. Estás congelándote.— pidió Luke, acariciando los brazos de su Mikey.

Michael no puso objeción, quería acurrucarse con su rubio, aunque sabía que no terminarían simplemente acurrucados.

Se levantó del taburete tomando la mano de Luke y justo se dio cuenta de que el rubio solo llevaba unos pantalones de pijama, dejando a la vista las marcas que él mismo se había encargado de hacer en su torso.

Jodido loco.

Juntos caminaron hasta su recámara y Luke cerró la blanca puerta de madera.

Mike esperó a su novio, observando cada movimiento que hacía: cómo esos pantalones le quedaban excelentes, o cómo su ancha espalda, con unos pequeños hoyuelos en la parte de abajo, se tensaba en cada movimiento.

Luke se giró, con una de sus medias sonrisas observó a su novio y caminó hasta él.
Colocó sus manos en las caderas del chico y se inclinó, atrapando los labios rojo cereza de Michael.
Michael por su parte, enredó sus brazos detrás del cuello de Luke.

Everything I Want; muke [OS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora