Whispers

Perfect//Ed Sheeran

Narra Jennifer

Yo no debí haber le hecho caso, el lleva eso puesto todavía, yo no debí ver más lejos que las cámaras, yo no debí sentir que era real cada beso, el "amor" me cegó como dirían las personas normales pero yo sé que eso no era amor nadie nunca dijo nada, el nunca me impidió salir con otros, el nunca me dijo que se divorciaría, el nunca me dijo que lo sentía por mi, yo era la única que hablaba y hablaba, mi boca no paraba excepto una vez, esa vez fue perfecta o por lo menos eso decía el.

Narrador

Era domingo y tenían el día libre para poder disfrutar del capítulo nuevo de la serie, Jennifer y Colin se iban a reunir en un pequeño departamento que rentaban para esas ocasiones donde quieran estar solos y sin la presión de que alguien los vea juntos.

-Te ves hermosa.- dijo Colin atontado por como ella lucía ese más arriba de la rodilla vestido rojo, ese maquillaje delicado con unos hermosos labios rojos, unos tacones blancos que la hacían lucir casi de la misma altura que el, su cabello rubio perfectamente acomodado y sin olvidar el collar que le dio en su cumpleaños.- Entra.- ella asintió gentilmente sin decir nada y se acercó y le dio un ligero beso en los labios.- Supongo que también te extrañé.- ella no decía nada, se quedaba callaba viendo todo el lugar que tanto amaba por ser el único rincón en el mundo donde ella no tenía que moderar sus movimientos con el.- ¿Quieres agua, vino, otra cosa?.- le ofreció el gentilmente pero no podía esconder esa angustia por saber el por qué ella no hablaba.

-No, estoy bien gracias.- ese tono frío no le agradó nada a Colin, el solo quería hacerla feliz por un rato.- Ya va a empezar el capítulo.- ella por más que quiera esconder el hecho de que no estaba bien como para estar con él, sabia que el la conocía lo suficiente como para saber que ella no está bien.

-Si, prende la televisión, voy por algo de vino.- Jennifer prendió la televisión y busco el canal para cuando lo encontró el ya volvía con dos copas y una botella de vino.

-Siéntate por favor.- ambos se sentaron y ella recargo su cabeza en el hombro de el sin decir nada y así siguieron todo el capítulo hasta la parte donde el Capitan Garfio le pide matrimonio a Emma.

-Amo esa parte.- dijo ella intentando que no se notara que estaba celosa de que su personaje consiguiera lo que nunca podrá tener, esa era su maldición oscura, vivir el sueño de su vida siendo escrito por otras personas, odiaba vivir así pero que hacía, ella lo amaba.

-¿Por qué no me dices lo que te ocurre?.- ya era tarde, su teatro de hacerse la fuerte no funcionó.

-Tu sabes lo que me ocurre.- dijo ella enojada, estaba harta de una vida en las sombras.

-Mírame a los ojos.- ella lo ignoro.- Jen mírame.

-No.- se estaba ahogando con los sollozos que estaba guardando.

-Jen, ¿qué ocurre?.- la tomó de la barbilla y lentamente hizo que sus ojos conectarán, pasó su pulgar por las lágrimas traviesas que salían lentamente.

-¿Por qué después de dos años no te has divorciado?.- listo, lo dijo y ahora o lo perdía todo u obtenía lo que quería.

-Tu sabes que no puedo.- ella rodó los ojos y los dirigió a la televisión de nuevo, esa respuesta no ha cambiado desde el primer mes de relación.

-Lo sé, siempre dices lo mismo.- estaba arriesgando todo lo que tenía pero solo quería saber si en verdad valía la pena todo lo que ponía en juego solo por verlo a los ojos.

-Jen, mis padres nunca me perdonarían divorciarme ya con un hijo y lo peor es que nunca te aceptarán si saben que la razón del divorcio fuiste tú, créeme intenté hablar con mi mamá y con Helen pero nada salió bien, y me falta agregar el hecho de lo que diría la prensa sobre ti, el error lo cometí yo al casarme sabiendo que yo te amo desde el momento en que te vi.- se notaba la decepción en su voz, la presión de parecer perfecto los estaba consumiendo por dentro, arrancándoles las ganas de estar juntos y haciéndoles olvidar ese puro sentimiento que tenían el uno al otro. Ni uno decía nada, ¿qué podían decir?, un te amo y nada pasó no era lo que necesitaban, necesitaban que su vida de fantasía pasará a ser realidad, necesitaban al Autor porque a pesar de ser héroes el final feliz nunca les llegaba.

-Soy un desastre, lo siento.- el la abrazo más como amigo que como amante, eso era lo que necesitaba ella, un amigo.

-Tu eres perfecta.- dijo lentamente, saboreando cada letra, cada sílaba y diciéndolo de una manera tan sincera, ese era el amor que merecían, el amor que te dice la verdad, el amor sincero, el amor libre, el amor de la otra persona pero que nunca obtendrían, otra vez la realidad le gano a las historias.- Y recuerda pase lo que pase te tengo que ver en vestido de novia y en teoría te estarías casando conmigo.

-Nadie imagina su boda con un novio con un Garfio.- dijo irónicamente aunque el se lo tomo más en risa.

-Nadie se imagina su boda con la hija de Blanca Nieves.- ella soltó una pequeña risa pero esta rápidamente se tornó melancólica.- Un día tomaré el coraje que necesito, un día diré la verdad, un día enfrentaré a mi familia, un día tendré el valor que necesito para que podamos estar juntos y a la mañana siguiente tú y yo estaremos juntos recordando cómo fue todo lo que tuvimos que pasar para llegar a eso.