Welcome to my life. (Larry Stylinson)

With the radio on turned up so loud.

Sin darme cuenta estaba andando, con una mano al rededor de mi cintura.

Miré hacia un lado y vi unos ojos azules que miraban al suelo y un chico que llevaba una bolsa de deporte. Me paré en seco y Louis tardó en reaccionar. 

-¿Qué... qué ha pasado...?- 

Louis se paró en seco y se giró. Él no supo que decir en él momento, todo había ocurrido muy rápido.

-Estabas durmiendo... en el césped, y no puedes dormir ahí, porque enfermaras y necesitas descansar...- contestó nerviosamente y bajé la mirada a la bolsa que llevaba.

Era mi mochila.

Recordé su mano levantándome del suelo.

Se ha molestado en mi...

Bajé más la mirada hasta el suelo, y la fijé hay, seguramente la opinión que había formado de mí ha cambiado después de verme durmiendo en el suelo. Me sentí mal. No quería que él cambiara conmigo, era mi primer amigo y de verdad sentía una relación especial. Sentí como se acercaba poco a poco- perdón por entrometerme, no quería ser un metomentodo... lo siento- Llevó una mano a su cabeza, y retiró su beanie, su pelo se veía tan bien despeinado, como si hubiera sido hecho por dioses cabello a cabello.

-Toma, hace frío- lo tendió muy amablemente.

Levanté la mirada hasta lo que me estaba ofreciendo.

-N-no hace falta, gracias- dije, agitando las manos nervioso y lleve las manos a mi cara. Creo que notó como el color de mis mejillas se torno ligeramente rosado.
Louis llevó el beanie hasta mí, y lo colocó suavemente sobre mi pelo. Apartó dulcemente los rizos que tapaban mi rostro.

-adorable- dijo en un susurro- ven conmigo.

Sus palabras tardaron en ser interpretadas por mi, pero finalmente decidí seguirlo.
Todavía me sentía perdido por el campus y más con la escasa luz de la noche. Aligeré el paso para andar cerca suya y no perderme.
Las instalaciones del instituto eran muy grandes, pero no me dí cuenta hasta ese momento de lo gigante que era. Divisé nuevos sitios, los cuales no parecían haber estado hay la primera vez.

-Aquí es donde juego-

No me dí cuenta de donde habíamos llevado a parar hasta que él comenzó a hablar.

 Él comenzó a hablar. 

Eso era algo que de verdad odiaba de mí: no se mantener conversaciones. Es algo que siempre me ha pasado, pero últimamente más, y lo odiaba, con todo mi ser. Y tener a Louis cerca no ayudaba, solo quería hablarle pero me ponía más nervioso y temo sonar idiota...

-¿juegas?

-Sí- contestó - no llevo mucho tiempo, pero soy el amo.

Estábamos en medio de una pista de voleyball,  era bastante amplia, aunque con la escasa luz no se podía apreciar bien.

-Esta es la pista de entrenamiento, para los partido se suele utilizar la que hay en el interior del gimnasio.

-Eres la primera persona que conozco que le guste el volleyball.

-Ya... el baloncesto y el fútbol son los más populares.

-Entonces son deportes hechos a tu medida, Tomlinson.

Soltó aire por la nariz en forma de risa y formó una ligera sonrisa.

-Sí, soy el Superman de los populares.

-¿Crees que me aceptarían en el equipo?- pregunté.

-Pues no conozco tus dotes deportivas, pero supongo que sí - dijo- no sabía que estabas interesado en el volley.