La Última Libreta (Editando)

1 de diciembre. Tristeza.

"Fuera elitismo, viva la igualdad"

La medicina se me vuelve a acabar y no encuentro más.

Empecé mi "tour" dentro de la caverna de la camiones. Cientos de documentos de vieeejos documentos de guerra y cosas militares aburridas. Encontré una cosa Interesante; las clases sociales en las que estamos divididos y otras categorías.

Clase alta o Élite: Millonarios y burgueses, políticos, militares y derechohabientes. Aquí tenemos (porque estoy dentro de ésta clase)no sólo el poder económico y la autoridad mayor, sino también más derechos y privilegios. Algunos Profesionistas privados están aquí.

Clase media alta: Profesionistas, médicos, ingenieros, etc. Tienen más poder económico, pero menos que la élite. No tienen poder político. Aquí hay artistas famosos y pueden expresarse pero no pueden comprar marcas de élite a menos de tener unos documentos especiales.

Clase media: Tienen diversos oficios, poco poder económico y menos libertad de expresión y no pueden comprar productos de clases altas. Son los más estables y ayudan mucho a los de clase baja.

Clase baja: Apenas se pueden expresar, trabajan muy duro. A muchos no se les deja salir de sus comunidades. Son controlados por el gobierno, si se rebelan pueden morir. Viven en las peores condiciones de vida.

También hay una categoría más: Los marcados.
Son las personas con condiciones mentales "anormales" y en ésa categoría estoy yo. Nos consideran de lo peor, un peligro, inútiles, locos y de más cosas. Los que son diagnosticados son marcados con un tatuaje luminoso en la muñeca. Yo no tengo tatuaje porque escapé.
C2 se puso furioso cuando le expliqué las categorías.

En la caverna hace calor y yo no me había bañado en días.

Me quedé con una ropa bien cool. Luego, en un rincón hallé un piano. C2 tenía siglos sin oír a alguien tocando y a mí que me encanta, toqué por HORAS la música que escucho y que nadie más puede oír.

Luego de comer C2 me dijo algo.
-Creciste mucho, Sole. De nuevo he viajado al futuro, pero es un viaje sin retorno. Eras una chiquilla de seis años cuando te conocí. Te ves aún con la misma mirada fija y perdida.

-A veces quisiera volver al pasado también, arreglar errores, tomar mejores decisiones. Pero, el hubiera no existe y, si nunca me equivocara, no aprendería valiosas lecciones de la vida.
-Eres muy madura para tu edad. Son los efectos de vivir en luchas y una vida fea. Al menos tienes unos padres juntos, los míos se separaron a tu edad.

-Mis padres están separados también y mi mamá está marcada. La vida tendrá momentos malos, pero siempre hay que avanzar.

-Es gracias a ese pensamiento que pude continuar estudiando y vivir más.

Salí de ésa cueva, crucé el cerro y caminé, con mi amigo en mi mano y Linda tras de mí. Pasando las horas, el sol empezó a caer temprano, típico de diciembre.

Me llegó un olor a canela y especias, un mar de aromas y luego sentí que el piso no era irregular. Había encontrado un camino, lleno de hojas secas pero era algo ¡Dentro del área prohibida! Y luego de un rato caminando entre altos árboles, hallé una casa ¡Una CASA! Con el jardín cubierto de maleza y todos sus arbustos crecidos.

Metro me empezó a decir "Se ve cómoda, para quedarse por siempre. Deberías llamar."

Y grite: "¡Buenaaaas!" y no me respondieron. "¡Bonan Verspenon! y nada. "Good afternoom!" nada. "Ma'alob K'iin!" " Guten Tag!" "Ní hâo!" "Konichiwa!" y otros por el estilo. Nadie respondió.

-Sole,- Me dijo C2- es más que obvio que no hay nadie.
Entonces​ quise entrar.

Abrí la puerta con la llave maestra y empujé. Sombras se ocultaron por todos lados. C2 no las vió.

Sola, sucia, como de una mudanza sin acabar, da un ambiente triste. Se ve mejor cuando se barre, queda más... agradable.

-Qué mal que no pueda ayudarte, no deberías hacer todo eso tú sola y yo mirando.
-No importa, estoy acostumbrada.
Las cortinas estaban polvosas, la cama cubierta con plástico y, guardados en el closet, ropa y cobijas.

-Éste lugar está re' sad- Dijo mi amigo. y al desviar la vista encontré una cosa redonda, una caja de metal y porcelana con un espejo dentro, una "caja de música", se abre y toca alguna canción.

La abrí y sonó una melodía rara, algo melancólica y muy suave, tocando con lentitud.

-Me da miedo esa música-Me dijo C2.
-A mí me gusta, es linda. Es justo una que hubiera querido... escuchar.

Me dí cuenta que toca la canción que quieras. Es la tecnología que hubo durante la guerra, objetos que quedaron aquí, en las áreas prohibidas. Me encantan esas cosas, pero ya no hacen aparatos así. Aquí hay muchas cosas que ya no se fabrican.

En la cocina, hay mucho té, de todo tipo de planta del jardín, la mayoría hecho polvo y sin su olor. Ni la canela pudo aguantar tanto. Sólo un frasco de miel de abeja, esos animalitos que se extinguieron (o están casi extintos) y, ante la crisis de y comida, fueron reemplazadas por otros insectos diseñados genéticamente.

Creo que tengo de las últimas reservas de miel en el mundo. Si lo vendo, me pagarían una fortuna, y cómo no, nunca había probado un sabor tan dulce y delicioso. C2 se sorprendió al saber que nunca había probado la miel.

-¿¿¿Nunca la has probado???
-Las abejas están extintas.
-Hijos de...(Censura)

En la cocina también hay un juego de utensilios, entre ellos cuchillos. Me decían que los use, pero mejor me fuí.
Libros, ropa, juguetes y algo genial: Unos Papuf. Fuí bien emocionada yo a decirle a C2 cuando...

-¡Oye C, hallé unos Papuf!-Le dije mostrando mis nuevos zapatos.
-Y éso ¿Qué es?

Le tuve que explicar que los Papuf son unos zapatos cerrados de hace un siglo, son muy cómodos, ligeros y fuertes.

Lo usaban los soldados para correr más, porque te hacen más ligero, casi perdiendo gravedad a voluntad.

-¡¡¡Wooooow!!! ¡Eso es genial! Yo soñé con algo así de niño.
Con impulso suficiente corría por las paredes pero es difícil.

Hoy me hice una pregunta: ¿Por qué nadie entra aquí, si es lo más tranquilo y limpio? No es ilegal entrar, pero nadie lo hace. Supongo que tendré que averiguarlo cuando llegue a la capital.

Cené con asco, cuando abrí el paquete de fideos, la bolsa estaba llena de gusanos que se movían y retorcían. En vez de fideos había gusanos y termitas, aunque la bolsa estuviera en perfecto estado. Les eché agua hirviendo y un rato después había una sopa de fideos normales. Otra vez veo cosas que no son.

Ya quiero ver a mi familia, a alguien conocido. Tzen me dice que debería quedarme aquí y quiero, sería un gran refugio, pero ahora voy a dormir. Hasta mañana Nokto.