Esta vez me estaba divirtiendo mucho con Vic. Recorríamos las calles disfrutando de la esencia que transmitían los niños correteando de una calle a otra, cometiendo el famoso dulce o truco, cada uno desfilando sus extravagantes e ingeniosos disfraces.
Por un momento olvidé por completo que estaba algo mayor para ciertas cosas; comenzando a dar pequeños saltos al rededor de Vic, cantando melodías infantiles simples con el propósito de animarlo.
Con un paso en falso y consecuencia de haber empezado a correr al rededor, tuve un pequeño tropiezo con mis propios pies, cayendo al suelo y llevándome a Vic conmigo. Su molestia era notoria antes, y posteriormente se levantó con una ira expresada en cada una de sus facciones.
Minutos después, estaba corriendo lo más rápido que mis pies me permitían, huyendo de un Vic furioso con un sentido de impulsividad que no me atrevía a probar.
Cuando mi cuerpo comenzó a cansarse, y al rebajar mi velocidad, sentí un fuerte golpe en mi espalda que me impulsó con fuerza hacia adelante, en el lugar en el que caminaban con tranquilidad unas chicas utilizando sus coquetos disfraces. Terminé en el suelo con algunas de ellas.
Un grupo de chicas muy furiosas se dedicaron coordinadamente a empujarme con fuerza fuera de su camino, lanzándome como una bolsa de basura que estorba al rededor. Al momento en el que tenían planeado irse, tomé a una de ellas del brazo, sintiéndome apenado por el suceso ocurrido.
-Hola.- Saludé cortésmente.- Siento lo ocurrido, es que algunos juegos con mi amigo Vic se salieron de control.- reí con incomodidad, señalando a Vic posterior a regalarles una sonrisa cálida, amistosa.
Pero lo único que obtuve de su parte fue una mirada de completo desprecio, y su próxima ausencia después de que abandonaran con pasos de desdén el lugar en el que nos encontrábamos Vic y yo. Me sentía avergonzado, pero suponía que me lo merecía.
Vic, por su parte, se veía realmente afectado por el trato recibido de esas chicas. Una expresión de rabia adornaba su hermoso rostro y vi por un momento, en sus ojos, la necesidad de darles su merecido. Me limité a seguir mi camino, obligándolo a acompañarme.
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m i s s i n g - h a l l o w e e n {kellic}
Short Storykellin quinn x vic fuentes Basada en el conmovedor cortometraje 'Missing Halloween'