Con mi teléfono nuevo por cortesía de Dereck, estuvimos más cerca, conversábamos por mensaje o llamadas todos los días y cuando comencé a asistir de nuevo a clases Dereck me esperaba afuera del colegio para acompañarme a casa, a veces íbamos en su auto y en otras ocasiones caminábamos hasta mi casa. Juan decía que no le daba buena impresión Dereck y algo de él no le gustaba. De cierta manera había algo que también me daba desconfianza de él pero le estaba tratando de dar una oportunidad. Yo no era quien para juzgar a alguien, aunque sintiera que me escondía algo.
Cada vez que hablábamos de su familia o salía un algo así, decía que no le gustaba ese tema y prefería hablar de algo más y no quería forzarlo a hablar de algo que no quisiera.
Durante los recreos seguía en mi mundo, con mis libros o en la biblioteca pero cuando salía de clases Juan ya no quería acompañarme de camino a casa. Aunque Dereck trataba de ser simpático con Juan, él no quería saber nada de Dereck.
Llevábamos un mes de estar casi todas las tardes juntos y me encantaba, creía que Dereck era mi hombre ideal, el hombre de mis sueños y cada día sentía que mi cariño por él crecía más.
Cuando ya me sacaron el yeso mi brazo estaba como nuevo, aunque me molestaba a veces pero ya podía utilizar mis dos manos y estaba agradecida de ya deshacerme de él.
Mis padres debieron viajar al otro lado de la cuidad a ver a mi abuela que se encontraba mal de salud. Yo no podía ir porque debía estudiar por lo que estaría todo el fin de semana sola y eso para mí era lo mejor. Poder leer sin interrupciones, lo mejor de la vida.
Cuando venía de regreso a casa el día viernes le comenté a Dereck que estaría sola el fin de semana, no lo mal entiendan, sólo lo comenté, no era porque quería que él me vaya a hacer compañía en mi cama.
Ese día tome once sola en el sillón mientras leía Pídeme lo que quieras de Megan Maxwell, no era mi tipo de lectura pero estaba dispuesta a leer todo tipo de libros por amor a ellos. Me hubiese gustado tener la personalidad de Judith, pero lamentablemente no tenía la confianza en mí misma para ser así.
De pronto sonó el timbre, pensé que podría ser Juan, siempre venía a hacerme compañía cuando estaba sola para ver maratones de películas.
-Hola Sofía, vine a hacerte compañía y traje películas- Dijo mostrando los cd's que tenía en su mano.
-Hola Dereck no te esperaba, pero pasa.-
-Solo pensé que te sentirías sola.
Nos sentamos en el sillón, mientras esperábamos que comenzara la película, de pronto volvió a sonar el timbre.
-¿Quién podrá ser?
-No lo sé, pero iré a abrir.
-Déjalo, yo abro- dijo Dereck al momento que se paraba del sillón.
Los dos se quedaron mirando cuando la puerta se abrió. Juan estaba parado afuera con unas películas en las manos. Y con una cara de sorpresa al ver que no era yo quien abría la puerta.
-Hola Juan, creo que pensamos en lo mismo, lo digo por las películas. Pasa, podemos ver las películas los tres juntos.
-No gracias, veo que Sofi ya tiene la compañía necesaria- dicho esto se dió la vuelta y se fue.
Dereck cerró la puerta y volvió a sentarse a mi lado y yo aún estaba congelada por lo que acababa de pasar.
Comenzamos a ver Tres Metros Sobre el Cielo y yo lloraba cuando murió el amigo de H. no lo podía soportar, de pronto sentí que Dereck me abrazaba tratando de consolarme.
-Ya calma Sofi, es solo una película.
-Lo sé, pero me da mucha penita.
Y de pronto sentí como las manos de Dereck bajaban hasta quedar en mi cintura, nos quedamos mirando uno al otro fijamente, sentía como mis piernas tiritaban pero no era miedo, no sé bien que era lo que sentía en ese momento. Pero lo vi acercarse a mí hasta que nuestras narices se topaban.
Poco a poco comenzó a besarme, no lo tomen a mal pero mi primer beso fue un piquito cuando tenía 5 años y un beso así con lengua y todo era nuevo para mí.
De a poco comencé a tomar el ritmo de sus besos y me volvía una experta. Los besos llevaron a las caricias y como saben una cosa llevo a la otra.
Cuando desperté en la mañana lo ví durmiendo a mi lado aún desnudo, me levanté lo más despacio que pude para no despertarlo y me fui a la ducha.
Mis sentimientos estaban encontrados, me dolía el cuerpo pero no tanto pero sentía que había perdido algo, claro perdí mi virginidad pero no era solo eso, sentía que algo me faltaba, me sentía contenta por haberme entregado a la persona de la cual creía que estaba enamorada pero triste por no saber qué iba a pasar desde hoy en adelante. Solo podía confiar en que las cosas irían bien.
Cuando termine de bañarme salí del baño con una toalla cubriéndome el cuerpo y cuando volví a mi habitación descubrí que Dereck aún estaba durmiendo. Me vestí lo más rápido que pude, sentía vergüenza de que me viera desnuda aunque era una estupidez de mi parte pero bueno, así era.
Cuando Dereck despertó yo me encontraba en la cocina preparando el desayuno, estuvimos todo el fin de semana juntos y sentíamos que cada hora que pasaba nos amábamos más.
Cuando llegó el domingo, el día que llegarían mis padres, Dereck se levantó más temprano para irse antes de que llegaran.
DE AQUÍ EN ADELANTE, TENGAN UNA CAJA DE PAÑUELOS CERCA DE USTEDES CUANDO LEAN.
ESTÁS LEYENDO
Juegos Del Destino [TERMINADA] (Sin editar)
SpiritualPRIMER LUGAR CATEGORÍA ESPIRITUAL EN MENTES BRILANTES 2017 Sofía nos demuestra que en el amor todo esta destinado a vivir o fracasar en nombre de él. Basada en una historia real. A veces, solo a veces la esperanza es capaz de lograr lo imposible. "E...