B R O K E .

Cap. 2

Verlo o simplemente saber de él, me destruía. 
Creo que lo amé como se ama en la películas o en los mejores libros, es estúpido tratar de recordarle cuando ya ni siquiera me reconozco, no soy quién fui, creo que él marcó un antes y un después, con el fui soñadora, a cada situación le veía su lado tierno y romántico, ahora... Solo pienso si me hizo bien, ayer, hablando con Abi, mi mejor amiga, le confesé que ya no siento nada por nadie, y creo que ya ni por mi... ¿será posible o tendrá algún sentido sentirte completamente vacío?
He tenido que silenciar sus estados en whatssap para no desesperarme cada vez que lo actualizaba. 

El inicio del inicio
Era el mejor amigo de mi ex novio, empezamos a hablar cuando yo ya no estaba con nadie y estaba realmente destrozada. En un inicio sólo hablabamos por chat y eramos amigos, cada vez que él podía me hacía reir y olvidar los problemas con el otro tarado.  Si, mi ex en ese entonces era un chico de mi mismo colegio, por lo cual debia aceptar verle e incluso hablarle y eso me ponía de muy mal manera. Era ahí cuando le hablaba a Nic y me calmaba, me contaba chistes o simplemente me cambiaba el tema a un más agradable, un día dijo que yo sobraba para cualquier chico, y me hizo sentir de nuevo en las nubes.
El conocernos lo planeamos, lógicamente. El la nocje anterior a ir a verlo, le pedí que por favor no nos confundieramos... Lo cómico de todo es quien acabó más confundida fui yo.

Cuando me detengo a pensar, que fue lo que mas me gustó de su personalidad. Me doy cuenta que me gustaba que fuera tan alegre y risueño, me encantaba cuando se reía por mi mala suerte... Me gustaba verlo feliz y yo ser la causa. Me gustaba ser yo su felicidad, aunque suene egoísta.

Lo conocí cuando aún había sol, luego de romper... Todo se nubló. Nosotros éramos dos climas diferentes, yo era la lluvia y el cielo tapado de ellas, él por el contrario era el sol y su brillo constante, por eso cuando estabamos juntos, en el pequeño pueblo donde vivíamos, aparecía un arcoíris gigante y colorido. Todo el mundo podía verlo y no me importaba en lo más mínimo, porque él era todo lo que me interesaba. No me afectaba el clima ni los demás, solo quería estar bien con él, solo quería estar bien con "nosotros". Hay un poeta que menciona a su amada como la niña de sus ojos y por primera vez en la vida entiendo esa metáfora.