Enséñame a ser feliz

D I E C I N U E V E

Yo había cambiado por muchas cosas, si miraba atrás ya no era el mismo de hace un año, la muerte de mis padres, terminar con Holly y conocer a Katie han sido cosas que han cambiado mi vida completamente, es difícil sobrellevar una situación en la que dejas de ser el niño consentido de papá y mamá por el hecho de que ya no están y empezar a ser un adulto responsable de tu hermana menor. Pero me atrevo a decir que he logrado mejorar, al comienzo temía ser el peor, pero ahora que veo a Emma me doy cuenta que no lo he sido y que debo mantenerme fuerte para que ella también lo sea.

—Nick ¿Qué haces?— Emma entro a la habitación y me saco de mis pensamientos inmediatamente

—oh Emma— sonreí— estoy pensando

—¿en Katie?— odio mentir, pero también odio que Emma recuerde a mis padres y sus ojos se tornen tristes recordándolos

—sí, en Katie— sonreí

—¿sabes algo?— se sentó en mi cama— Zac te va a matar cuando se entere— dijo bromeando y salio a correr riéndose a carcajadas

—¿tu le dijiste?— ella no dejaba de reírse y de correr por la casa

De repente el sonido de un golpe en la puerta me detuvo y fui a abrir encontrándome a una señora demasiado elegante junto a un policía, esto no significa nada bueno

—Buenos días— la mujer miró un papel— ¿Nick Bauer?

—sí, soy yo— respondí con la voz temblorosa

—mi nombre es Angelina Hodgins vengo de parte del gobierno— se veía firme y eso me asustaba aún más— soy de protección a menores y estuvimos revisando el caso de Emma Bauer, su hermana. Es cierto que usted es mayor de edad, pero en este momento no tiene como sustentar la manera en que está dándole una vida digna a la niña

—todo lo costeo con ahorros que mis padres nos dejaron—respondí

—sí, pero ante el gobierno no hay un trabajo como tal y lamentablemente Emma debe acompañarnos hasta que usted resuelva esa situación

—¿Qué pasa Nick?— la voz de mi hermana me tenso

—hola, nena— la mujer se acercó a Emma y empezó a explicarle

—yo no me quiero ir Nick— ella se aferro a mi y aquí es donde debo actuar como un jodido adulto y no como un adolescente

—tampoco quiero que te vayas— bese su frente— señora Hodgins ¿que puedo hacer? No puedo dejar que se la lleve

—bueno, primero debe dejar de oponerse a las autoridades— respondió en un tono más serio— segundo buscar un trabajo estable y después si puede ir a buscar a su hermana

En cuestión de segundos y como si me hubieran congelado vi como se llevaban a Emma y yo no podía hacer nada, solo la veía llorar y suplicar, verla así era lo que más me dolía, yo debía cuidarla y no había sido capaz de hacerlo.