Capítulo 13

10.7K 275 20
                                    

"PETER LANZANI Y NATALIE PÉREZ, LOCOS DE AMOR"

"Él fue a verla al estreno de su obra "Locuras de amor" acompañado de algunos de sus amigos de Aliados. Aplaudió con efusividad y no paró de sonreír. Tanta fue la admiración por Natalie, que no pudo controlar sus ganas de besarla en plena alfombra roja, al terminar la obra.
¿Que pensarán las Laliter's?
Mientras esperamos la respuesta, felicitamos a la nueva pareja, Nataliter. ¡Que viva el amor!"

***

Narra Lali.

Me levanté y preparé el desayuno para Benja y para mi.

—Benja, tenés que despertarte —le dije con voz dulce.
—¿Que pasa Lali? —preguntó dormido.
—En una hora tenemos cita con un médico, para ver que podemos hacer con este cáncer de mierda.
—No pienso ir a otro médico que no sea el mío —contestó con brusquedad.
—Es amigo de la familia de Candela, me hizo el favor de conseguirnos una cita ¿Por qué no vamos a ir?
—¡Porque no quiero y punto!
—¡No seas un bebé caprichoso! —le pedí con rabia. —¡Sólo intento hacer algo porque no quiero verte morir! —empecé a llorar.
—¡SOY YO EL QUE ESTÁ ENFERMO! —me gritó —¡YO ELIJO QUE HACER CON MI VIDA! —gritó más fuerte y se levantó de la cama.
—¡SOS UN EGOÍSTA DE MIERDA! —le contesté furiosa. —¡VOS ESTAS ENFERMO, SI... PERO YO TAMBIÉN ESTOY SUFRIENDO. TODA LA GENTE QUE TE QUIERE SUFRE POR ESTO!
—¡No te metas en mi vida Lali! —me dijo mientras agarraba sus cosas.
—¡Yo soy parte de tu vida! —le recordé bajando la voz —Déjame ayudarte...
—¡Vos no estás conmigo por amor estas por pena! ¡Amás a Peter! ¿Te pensás que soy imbécil?
—Benja, yo estoy acá con vos.
—Y vas a seguir estando porque no pienso dejarte ir —me avisó en tono posesivo y salió de la habitación pegando un portazo.
—¡No me hables así! —le pedí cuando salí detrás de él —Estar enfermo no te da derecho a tratarme de esa manera.
—No te quiero cerca de Peter, porque te juro que soy capaz de matarlo —Me  advirtió.
—¿Que estas diciendo? ¡Te volviste loco! —pregunté con miedo y empecé a retroceder, él se acercó más, yo estaba apoyada contra la pared y me agarró con fuerza el brazo.
—¿Ya te olvidaste que contraté a unos chicos para que le den una paliza? —me recordó —La próxima podría no contarla —Me soltó y salió de mi casa.

Caí al suelo, por la fuerza con la que me había soltado.

Narra Peter.

Un nuevo día de grabación con una importante escena con Lali.

—¿Te importa si me quedo todo el día durmiendo acá? —me preguntó Natalie que seguía dando vueltas en la cama.
—Es tu casa, lo que quieras —le contesté mientras me acerqué a ella y luego le dí un beso en la frente.
— Tengo que contarte algo —le dije mientras me vestía —Lali me dijo algo muy raro ayer.
— ¿Que cosa? —preguntó sentándose en la cama.
— La besé y después me dijo que no lo haga, porque eso complicaba su intento de volver a amar a Benjamín. —le conté mientras me sentaba en la cama para ponerme las zapatillas.
— ¿¡En serio!? —preguntó con sorpresa y se puso detrás de mi para darme un masaje. —¡Esto es mejor que mi novela de las cuatro de la tarde!
— Hablo en serio Nati.
— ¡Y yo también! Estaré encantada de ver como termina esta historia de amor.
— Yo veo todo como un fracaso.
— Algún motivo hay para que Lali no deje a Benjamín, algo importante. Cuando lo sepas, sabrás que hacer.
Me fui para el canal, dispuesto a averiguar que estaba pasando.
— Justo a vos te estaba buscando —le dije a Candela cuando la vi en el aparcamiento.
— Buenos días eh —me dijo después de poner la alarma a su coche.
— Perdón, perdón. Buenos días —le dí un beso en la mejilla. —Necesito saber que pasa con Lali y Benjamín.
— No pasa nada ¿por qué iba a pasar algo? —preguntó intentado fingir, pero era muy mala mintiendo.
— Cande, nos conocemos todos demasiado. Sé que algo pasa y que vos lo sabés. —le dije poniéndome delante de ella para cortarle el paso.
— No puedo hablar.
— ¿Se puso otra vez violento? ¡Lo mato si es así!
— No Peter, no es eso. Mirá, yo los amo a ustedes dos, son parte de mi familia y me encantaría que estén juntos. Pero no puede ser, dejá a Lali tranquila —me pidió con pena y entró al canal.
Me fui directo al camarin de la China, estaba comiéndose la boca con Nico cuando abrí sin llamar.
— Volvemos a los viejos tiempos —dije apoyado en el marco de la puerta, recordando Casi Ángeles. Cuando todas las parejitas buscábamos cualquier sitio para darnos un poco de amor.
— Hola bigote —me dijo Euge.
— Estaba a punto de meter rock —me dijo Nico molesto.
— Necesito hablar con ella.
— Bueno, bueno. Sólo porque sos vos —me contestó él, le dio un beso y salió del camarin.
— ¿Que pasa con Lali y Benjamín?
— ¿Candela no abrió la boca y te crees que yo si? —me preguntó casi riendo.
— ¿Como sabés que hablé primero con ella?
— Ella es más fácil que yo, era obvio que le ibas a preguntar primero.
— ¿Vos tampoco me vas a decir nada?
— Sólo te diré una cosa, luchá por ella.
— ¡Me van a volver loco! Candela me dijo que me olvide.
— Es demasiado buena ella. —me dijo con una sonrisa.
— ¡No sé que mierda pasa, necesito saberlo para darme cuenta de que tengo que hacer!
— Peter, no puedo ayudarte y créeme que me gustaría hacerlo.
— Parece que nadie puede decirme nada. —dije molesto y me fui.

          

Narra Lali.

Llegué al canal con mi peor cara, después de haber salido a correr.
— Tuvimos una mañana muy movida —me dijo la China, que acababa de entrar en mi camarin.
— Yo también la tuve, Benjamín no quiso ir a ver al médico. —dije cuando vi a Candela detrás de Euge.
— "Felicitamos a la nueva pareja, Nataliter" —leyó Candela, ignorando mi comentario.
— ¿Nataliter? ¿¡NATALITER!? ¡Eso no existe! —dijo la China con efusividad. —¡Aguante Laliter! —terminó de decir con los brazos cruzados.
— ¡Cállate tarada! —le pedí.
— De tarada nada, pienso hacer campaña con todas las Laliter's del mundo para que ustedes dos se casen y tengan diez hijos —dijo en tono exagerado.
— La besó en plena alfombra roja —dijo Candela —¡Está loco!
— ¿A nadie le importa lo que me está pasando con Benjamín? —pregunté molesta y ellas se miraron, para después mirarme a mi y suspirar.
— Tenés razón, perdón —dijo Candela enseguida.
— Llévalo al médico de los pelos. —me ordenó la China. —No puede negarse a tu ayuda.
— No sé que hacer —les dije preocupada —No puedo pensar ahora mismo en "Nataliter" —dije haciendo fuerza en la última palabra.
— Voy a grabar —dijo la China y salió del camarin.

Narra Peter.

Benjamín entró con un ramo de rosas ¿Que hacia ese idiota ahí? Entré detrás de él y vi como la China, al verlo, lo agarró de la camiseta con fuerza y tiró de él para meterlo en su camarin. ¿Que carajo hace? Preocupado e intrigado, me acerqué para escuchar detrás de la puerta. Me sentía una mina ¿por qué tenía que ponerme a escuchar detrás de una puerta? Ah si, por Lali, todo siempre es por Lali.
— ¿A que estas jugando? —le preguntó la China molesta —No podés ser tan egoísta, Lali sufre por vos y si te dice que tenés que ir al médico, vos vas.
—¿Que carajo te metés? —le preguntó en mal tono. —Yo hago lo que quiero y no pienso ir a otro médico que no sea el mío.
— Andá, pero llévala con vos, que hable con el médico, déjala que entienda que está pasando.
—Mira nena —contestó enojado —No me gustas un carajo, dejá de llenarle la cabeza a Lali —dijo amenazante.
— ¡¿Nena?! ¿Vos me estas jodiendo? ¡Mira, no sé que mierda tenés en la cabeza pero empiezo a pensar que no tenés un carajo cáncer! —le dijo ella más enojada todavía.
¿CÁNCER? ¿Como que cáncer?. Ahí estaba el motivo por el cuál Lali no quería tenerme cerca, pero... ¿y si la China estaba en lo cierto y ese hijo de puta estaba mintiendo?
— ¡Te voy a joder la vida pendeja metida! —le contestó él y ahí decidí entrar. —No le llenes la cabeza de mierda a mi novia.
— ¿Que pasa? —pregunté cuando abrí la puerta y lo vi agarrando el brazo de Eugenia con fuerza.
— Este imbécil ya se iba —me dijo la China soltándose de él.
— No te metas en dónde no te llaman Lanzani —me dijo mirándome fijamente y salió del camarin dándome un empujón.
— Dejá de hacerte el vivo y no seas tan poco hombre de ponerle una mano encima a una mujer —le dije yendo detrás de él.
— A la única mujer a la que le pongo la mano encima es a Lali y soy muy hombre cuando lo hago. No sabés como disfruta conmigo en la cama —me dijo con una sonrisa y me lancé encima de él para partirle la cara.
— ¡Pará Peter, pará! —me pidió la China agarrándome del brazo.
— ¡Si me entero de que le estas mintiendo a Lali, te juro que te mato! —le dije cuando me aparté de él.
— ¿Te gusta escuchar detrás de las puertas? —me preguntó cuando se levantó del suelo y se secó la sangre de la nariz.
— ¿Que está pasando acá? —preguntó Lali que se acercó con rapidez hacia nosotros. —¡¿Que mierda pasa?! —volvió a preguntar cuando vio que nadie contestaba.
— Nada mi amor —le dijo Benjamín y le dio un beso —Saludos a Natalie —me dijo mientras se iba.
— Ya está Peter —me dijo la China.
— Vamos a hablar seriamente —le ordené y nos metimos en el camarin.

Narra Lali.

— No necesito flores — le dije con rabia y me senté en el sofá que había en mi camarin.
— Te vine a pedir perdón.
— ¿Por eso te ponés a pelear con mis amigos?
— No voy a hablar de eso —dijo cortante —Sólo quiero que sepas que voy a llevarte conmigo a mi médico y voy a empezar a hacer la quimioterapia. Por vos, porque te amo.
— Quiero ir cuanto antes.
— Lo prometo —me dijo y se acercó para besarme.
Después de que Benjamín se fuera, fui a ver a la China, estaba con Peter.
— No le creo nada —dijo la China. —Sólo quiere tenerla en sus redes, sabe que Lali no va a dejarlo si está enfermo, bueno, si se hace el enfermo.
— ¿No es demasiado? No puede ser tan hijo de puta —dijo Peter.
— ¿No les da vergüenza hablar de una persona enferma? —pregunté enojada cuando abrí la puerta. —¡Que lindo tener amigos así! —aplaudí —¡Voy a ir al médico con Benjamín y voy a traer sus estudios para que vean que está enfermo y tengan que pedir perdón por verlo capaz de algo tan horrible!
— Lali, perdóname. No tenía que decir nada, pero vos no sabés todo lo que me dijo Benjamín —me dijo la China.
— Le quiso hasta pegar —contó Peter.
— A mi también me trata mal a veces ¡Porque está enfermo! —dije llorando —¡Tiene muchas posibilidades de morir! No quiero que me hablen más —les dije mirándolos a los ojos y me fui pegando un portazo.

Amor Eterno ||Laliter||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora