Capítulo 1

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Las cosas pasan, no sabes cómo ni porqué, pero ocurren y cambian todo.

Me encontraba postrada en mi cama, no podía salir de esta, era como si mi mente se hubiese dado por vencida, no veía un futuro, simplemente ya no quería estar más aquí. Hace unos meses se podría decir que tenía la vida perfecta y ahora todo era distinto, no le encontraba ningún sentido a la vida y mucho menos un motivo para seguir viviéndola.

Les contaré cómo todo comenzó.

6 meses atrás.

Mi nombre es Mia Hudson, mi padre Chad es un militar que en estos momentos se encuentra en el ejercito, mi madre Alice es una mujer que verdaderamente admiro mucho, mi hermano Jacob tiene diecisiete año, él ama tocar la guitarra y cantar por lo que ahora se encuentra en un curso y no esta en casa, y mi pequeña hermana Olivia, ella tiene apenas siete años de edad.

Me encontraba en mi habitación acostada en la cama cuando alguien toco mi puerta.

-Pase- grite aún recostada en mi cama y la puerta se abrió dejando entrar a mi madre quien tenía una gran sonrisa en su rostro, ella se sentó en el borde de mi cama.

-Hola cariño- dijo sonriente.

-Hola mamá- dije sentándome a su lado.

-Tengo una gran noticia, tu hermano Jacob vuelve- dijo sin quitar la sonrisa de su cara y enseguida una se formo en mi rostro- Volverá esta noche para la cena- volvió a hablar y salió de mi habitación.

Estaba muy emocionada, extrañaba demasiado a Jacob, la mayoría de la gente piensa que los hermanos se odian o algo por el estilo pero mi relación con Jacob es diferente, se podría decir que es como mi mejor amigo. Entre al baño y me di una ducha corta, al salir me vestí con un pantalón de mezclilla y una blusa blanca y baje las escaleras para encontrarme con la mesa ya puesta y a Olivia en la sala viendo la televisión.

-Hola pequeña- dije sentándome a su lado- ¿Estas emocionada porque Jacob vuelve?.

Ella solo asintió.
Al poco tiempo mi madre bajo.

-Cariño, Jacob esta apunto de llegar, ¿porque no lo esperas desde afuera?

-Esta bien- respondí.

Me dirigí a la puerta para salir al patio y esperar a Jacob ahí, me senté en una de las pequeñas sillas de la terraza y observe el cielo oscuro y estrellado.
Ya habían pasado veinte minutos y no había ningún rastro de Jacob, espere otros de diez minutos más y él aún no llegaba.

Cuando estaba por entrar a casa, dándome por vencida y convencida de que él no llegaría esa noche escuche una voz a mis espaldas.

-¿Esperabas a alguien?- escuche que esa persona que se encontraba a mis espaldas diga, enseguida reconocí la voz de mi hermano, me gire y corrí a abrazarlo.

-Te he extrañado mucho- dije mientras aun lo abrazaba.

-Igual yo pequeña- dijo cuando termino el abrazo.

Juntos entramos a casa y tanto mi madre como Olivia corrieron a abrazar a Jacob, todos nos sentamos en la mesa y él comenzó a contarnos sobre el curso que ha estado tomando mientras cenábamos.
Al terminar ayudamos a mi madre a lavar los platos y subí a mi habitación, me coloque la pijama, me recosté en mi cama y cerré los ojos, y sin darme cuenta caí en un profundo sueño.

Desperté gracias a la alarma, como todas las mañanas me levante de la cama y me dirigí al baño para cepillarme el cabello, cambiarme la ropa y lavarme los dientes, al estar lista baje a desayunar. Al terminar salí de casa para dirigirme a la escuela y en el camino me encontré con Zoe, se podría decir que mi única y verdadera amiga.

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-Hola Zoe- dije a sus espaldas llamando su atención.

-Hola Mia- me respondió y juntas seguimos caminando hasta llegar a la escuela.

Al llegar nos dirigimos hacia nuestros casilleros y apenas el timbre sonó nos fuimos hacia el salón de clases. La primera clase era de Física, me tocaba con el profesor Jefferson, el mejor maestro de toda la escuela, entre al salón de clases y vi a Jefferson con una gran sonrisa, amaba esa clase, me dirigí a mi asiento junto a Alex, él y Andy su hermano gemelo, eran mis mejores amigos en la escuela.

-Hola Alex- dije con una gran sonrisa en la cara a uno de los gemelos.

-Hola Mia- dijo entre risas- ¿Por qué estas tan feliz?- volvió a hablar el chico rubio.

- Jacob volvió a casa- dije en un pequeño grito y con la sonrisa aun más grande.

- Que bueno, lo extrañabas mucho- respondió con una pequeña sonrisa y solamente asentí.

La clase comenzó con un nuevo tema, la clasificación de las ciencias, este tema ya lo había escuchado de mi padre. La clase continúo con la explicación del maestro, a la mayoría de mis compañeros de salón les aburría esta clase, lo notaba por sus rostro y por como la mayoría no hacia caso a las explicaciones, sin embargo yo estaba súper atenta y tomaba nota de todo, la verdad no se como podían aburrirles las clases de Jefferson, todos los temas eran súper interesantes para mi, y la manera en la que él explicaba las cosas me volvía loca, me daban ganas de aprender más y más, no se si era porque en serio me gustaban los temas o por que él era exageradamente guapo.
Al acabar aquella clase me dirigí hacia mi siguiente salón, matemáticas, esta era una de las clases que más odiaba, a pesar de que me tocaba con Zoe, y los gemelos Alex y Andy, mis únicos amigos en la escuela, la maestra Aby es insoportable y la materia tampoco es de mi agrado. Esa clase siempre parecía una eternidad, Aby nos ponía a resolver casi cien problemas en una sola hora. Cuando al fin acabo la clase cada quien se dirigió a su siguiente salón.

Durante el almuerzo me senté en una mesa con Zoe, y los gemelos Andy y Alex, les conté que Jacob había vuelto y platicamos sobre otras cosas.

Las clases pasaron rápido y ahora me encontraba en camino a casa, seguí caminando un poco más y llegue.

Esa tarde Jacob me preguntó si quería acompañarlo al centro comercial y accedí, primero fuimos a una tienda de guitarras y ese tipo de cosas, tengo que admitir que mi hermano tiene un gran talento con su voz. En aquella tienda compro una guitarra acústica, al salir de ella nos subimos al coche y empezó a manejar, puse un poco de música, ambos comenzamos a cantar, claro que yo parecía una cabra muriendo o algo similar y él tenia una espectacular voz. Nos detuvimos en el estacionamiento del centro comercial, nos bajamos del coche y comenzamos a caminar hacia la entrada.

Esa tarde me la pase sensacional con mi hermano, visitamos varias tiendas de ropa y después fuimos por un Starbucks. Al regresar a casa ayude a mi madre a poner la mesa para la cena y nos sentamos todos juntos a comer.

-¿Cómo les ha ido hoy?- preguntó mi madre con toda la dulzura del mundo.

- Mia y yo nos la hemos pasado de maravilla juntos- respondió Jacob y comenzó a dar detalles de aquella tarde.

- ¿Por qué a mí nunca me llevan a ningún lado?- preguntó Oliva haciendo un puchero y poniéndonos mala cara a Jacob y a mi.

- Lo siento pequeña, te prometo que te llevaremos a la próxima- le respondió Jacob riendo y ella hizo lo mismo.

Al terminar de cenar todos ayudamos a lavar los platos y después subí a mi habitación para cambiarme la ropa y ponerme mi cómoda pijama, cepillarme los dientes y dirigirme a mi cama para dormir.

Nunca me olvidesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora