¡Hey, fanboy! » dojae / jaedo

Capítulo 13: Doyoung

Al despertar me dolía mucho la cabeza, incluso la simple acción de abrir los ojos significaba un gran esfuerzo; los párpados me pesaban y la luz era como un rayo que me atravesaba el cerebro. Conocía muy bien esta sensación, no solo el dolor de cabeza, sino también la pesadez corporal y la boca seca; era la resaca. Hacía un tiempo que no me sentía así, ya que no tenía motivos para beber, así que luego de sentarme con algo de esfuerzo en la cama intenté recordar la razón que me llevó a estar así.

Jaehyun.

Él fue lo primero que me vino a la mente y pronto varios flashes de recuerdos volaron por mi mente. Ten invitandome al club, yo bebiendo junto a un desconocido del cuál no recuerdo el nombre, yo diciendole a Jaehyun que lo odiaba, Jaehyun yéndome a buscar, Jaehyun bailando conmigo, Jaehyun mirándome mientras manejaba creyendo que no me daba cuenta, Jaehyun, Jaehyun, Jaehyun.

Todos los recuerdos me llevaban a él, pero parecían detenerse en un momento específico. Jaehyun estacionándose frente a mi casa y abriendo la puerta para mí, yo no quise salir y le pregunté si estaba celoso.

—Doyoung —dijo acercando su rostro al mío—, creo que si estoy celoso... y demasiado.

No había nada, mi mente estaba vacía luego de eso, ¿qué respondí a eso? ¿Por qué estaba tan cerca? ¿Y si me besó? ¡¿Por qué no puedo recordar?! Gruñí frustrado y tomé mi almohada para golpearla, aunque eso provocó que me doliera más la cabeza y dejé de hacerlo. «Jung Jaehyun estaba celoso... demasiado celoso» pensé y abracé la almohada ahogando un grito en ella. Si estaba celoso debía ser por algo, quizá no es bueno que me haga ilusiones, pero no puedo evitarlo.

—Doyoung ¿Estás despierto? —Gong Myung entró a la habitación de repente, y lo miré mal por dicho acto—, baja a desayunar, la comida está lista.

—¿Cocinaste? ¿Y no se vino abajo la cocina? —inquirí dudoso.

—Solo baja a comer.

Rodé los ojos, arrepintiendome porque fue como si me dieran un batazo en la cabeza, y le hice un gesto para que se fuera. Él bufó y cerró la puerta yéndose, yo me tomé unos minutos para mentalizar que tenía que salir de cama y luego fui al baño para lavarme y ponerme otra ropa ya que seguía con la ropa de anoche. Ya aseado y con ropa limpia bajé hasta el comedor para tomar el dichoso desayuno —había que aprovechar ya que Gong Myung y cocina no iban de la mano—, y me quedé congelado al ver al mismísimo Jung Jaehyun sentado en el comedor, untando mermelada a un pan tostado.

—¿Qué haces aquí? —pregunté acercándome lentamente a la mesa sin dejar de ver a Jaehyun como un ser extraño.

—Buenos días, conejito, ¿dormiste bien? —saludó él tranquilamente y volteó a mirarme mientras sonreía.

—Jaehyun hizo el desayuno, yo lo invité a quedarse luego de que te trajera medio muerto.

Volteé a ver a mi hermano con el ceño fruncido—. No estaba tan mal.

—Te dormiste en el auto y no pude despertarte después —explicó Jaehyun y me extendió una de las tostadas con mermelada.

—Como dije, medio muerto —siguió Gong Myung y se levantó de la mesa luego de apurar un vaso de leche—, tengo que ir al supermercado, vuelvo en un rato.

Y sin más se fue, Gong Myung me dejó solo con el guapo de Jung Jaehyun, que había hecho el desayuno, en el comedor. Me quedé un rato perdido en las nubes al parecer, porque de repente Jaehyun estaba poniendo un plato de huevos revueltos y salchichas frente a mí.

—Come, luego puedes tomarte una pastilla para el dolor de cabeza, ¿te duele mucho?

—Más o menos... —respondí y me relamí los labios—, Jaehyun... ¿Qué pasó anoche? Yo recuerdo algunas cosas...