Habían revelado por fin los resultados de matemáticas de las primeras evaluaciones obligatorias del año y muchos estudiantes se agolpaban lo más cerca posible del tablón dónde estaban los resultados por grado. Jaeri comía tranquilamente una paleta mientras se daba cuenta que había sido el primer lugar del primer grado. Ella se presionó contra mí.
- Ojalá pidan tutores para los que les fue mal, ¿Cierto, unnie? - yo me puse a reír.
- Seguramente yo lo necesite, ¿Sabes? Mi profesor de matemáticas de Busan era la muerte en persona y me iba pésimo con él...- Y cuando por fin fui capaz de ver el brillo entre malvado y lleno de ilusiones de Jaeri me puse a reír. - Ay, niña, ¿Cuál es tu plan maléfico?
Ella señaló un nombre en el papel. Era uno de los últimos y tenía un puntaje bajísimo Leí el nombre con poquísimo interés y la miré. Ella bufó, claramente molesta porque no había entendido la indirecta, y luego se acercó más a mí.
- Ese es el chico que me gusta, imbécil, te lo dije hacía dos semanas... - Arrugué mi cara, ¿Por qué él? La obligué casi a salir del tablón y caminamos por los pasillos del edificio.
- Ya te lo dije hace dos semanas, ese chico no es para ti, Jaerinnie
- ¿Me encuentras poca cosa para Jeon Jeongguk? - Genial. Ahora éramos dos los que pretendíamos estar molestos. - ¿O acaso me quieres sólo para ti? Porque eso es muy cavernícola de tu parte
- ¿Se te zafó un tornillo? Eres demasiado para ese idiota, créeme, habla sólo idioteces. - El chico a menudo se acercaba a Taehyung y hacía bromas sarcásticas o pesadas que incomodaban a las personas, o hablaba de con cuántas mujeres mayores que él había estado el fin de semana. Jeongguk sobresalía en distintas materias porque se le daban bien, en deportes también, y también aceleraba corazones por todas partes. Pero para mí él sobresalía sobre todo por ser el idiota más grande que he conocido. - Además, ¿Qué haría yo sin mi mejor amiga? - dije lo último con un puchero, tratando de parecer lindo y volver más ligero el ambiente. Jaeri sonrió y aplastó mis mejillas.
- ¡Tan adorable mi unnie! - seguimos caminando de nuevo hacia los tablones. - De todos modos, podré comprobarlo yo misma cuando me ofrezca a hacerle las tutorías...
Bufé molesto. Otra vez, y ella empezó a pegarme codazos para que fuera a ver mis resultados. Yo no me tengo mucha fe en nada que tenga números, ni siquiera recuerdo el número de teléfono de mi mamá, y era peor si mezclaban números con letras. Ahí me voy a la mierda. Empecé a buscar mi nombre entre los últimos, y no lo encontraba. Sí estaba el de Ong Nabi entre los últimos.
- Jiminnie, estás en el tercero - me soltó Jaeri a mi lado.
- Nah, debe ser alguna Park Jimin
- No seas burro, eres el único Park Jimin de la clase del profesor Jo - Miré donde Jaeri me señalaba y creí que se me caería la mandíbula. Era verdad. Era yo el que estaba en el tercer puesto con noventa puntos de cien. - Sabía que valía la pena hacerte estudiar con dos semanas de anticipación...
- ¿Y eso qué importa? ¡No reprobé el primer examen! - me puse a saltar y bailar mientras que Jaeri se reía y pretendía no conocerme. - Pero no vale la pena el perderme la cita con Kim Yerim, enana...
- Esa perra no me cae bien - me soltó molesta. - Se hace la linda cuando es más bien falsa, y lleva kilos de maquillaje para parecer natural, no tiene nalgas y su cerebro es el de una ardilla
- Guau, ¿Qué pasó con la solidaridad de género?
- A la mierda la solidaridad de género en este caso - gruñó mientras me miraba, haciendo que sus ojos se parezcan a los de su prima. - Eres mi amigo y no dejaré que una chica así te rompa el corazón o te aburra
Yo me puse a reír. Hacía poco tiempo había empezado a tener citas con Yerim, y me parecía una chica de lo más tierna.
- Ahora eres uno de los chicos más codiciados de la escuela, Jiminnie, ¿Por qué no buscas a alguien como Jennifer de segundo? Tiene bonitos sentimientos y es dulce de forma natural
- Creo que prefiero a alguien coreana, Jaerinnie
- ¿Y Youngyoo? Ella es más divertida y refrescante que el verano en las Bahamas, y...
- Creo que puedo buscarme una chica yo solo, Jaeri - la corté antes de que siguiera su lista de las chicas que se me habían confesado en el primer mes de clases. - Además eres tú la que es bonita y aun así corre el riesgo de morir soltera y rodeada por cuarenta gatos, ¿Por qué no aceptas ir al karaoke con nosotros y ya?
- Ya te dije, no me gustan mucho las multitudes - me dijo mientras caminamos a la sala 45 para nuestras clases de baile. - De hecho a Nabi tampoco le gustan
- Deja ya de hablar de ella, ¿Sí? - hice una mueca, si bien ahora conocía un poco más de Nabi, como que amaba el baseball y era la estrella del equipo de softball de la preparatoria, que los animales le seguían y la buscaban y que estaba en el equipo de debate, seguía siendo algo molesto el verla.- Esta mañana le vació a Lim Hanbyul una malteada completa en la cabeza, fue horrible... Pobre chica
- La pobre chica quería hacerle una encerrona a Nabi, JiMin... - dijo mientras abría la puerta de la sala. - La pobre chica había juntado un grupo lo suficientemente grande como para dejar a mi prima en el hospital por lo menos un mes
- Tu prima está buscándose un montón de enemigos, Jaerinnie, ¿Lo sabías? Tarde o temprano todo se le devolverá, y espero que no sea demasiado fuerte
- ¿Disculpe? - miré incrédulo a mi profesora guía que me miraba desde su silla en la sala de profesores. Me había mandado a llamar y aún no lo creía. - Debe haber un error, ¿No?
- Pues no lo es, señor Park, el profesor Jo lo ha recomendado personalmente como tutor para su compañera
- ¿Pero por qué de Ong Nabi?
- Sé que es una chica un poco... - Se tomó su tiempo en buscar algo que describiera personalmente a Nabi, y a mí se me vinieron miles a la cabeza: conflictiva, agresiva, violenta, matona, intimidante, bullier, entre otros tantos. - Difícil, ella ha pasado por algunas cosas algo complicadas, señor Park, pero en el fondo es una buena chica...
- Pero...
- Si logras que supere los sesenta puntos en la prueba recuperativa, señor Park, yo misma conseguiré las cartas de recomendación que necesite para que siga una carrera de danza, ¿Está bien?
Me lo planteé. Era difícil entrar a buenas academias profesionales y universidades buenas que impartieran danza sin una buena carta de recomendación por parte de buenos estudios, o de coreógrafos destacados. Y nuestro profesor de danza había trabajado con varios grupos Idol reconocidos. No era algo sencillo.
- Acepto.
La profesora me dio unos cuantos papeles y guías que podrían servir para enseñarle a Nabi, y yo me fui de ahí dejándole una sonrisa a la profesora. Pero, ¿Cómo mierda lo haría?
Era la hora de almuerzo, y había logrado que Jaeri se sentara conmigo y Taehyung en la misma mesa. De paso les contaba mi nuevo reto. Jaeri se rió en mi cara.
- Estás loco si crees que Nabi aceptará de buena gana tu ayuda - soltó mi mejor amiga mientras me señalaba con su tenedor. Yo le miré feo y le tiré un guisante que rebotó en sus anteojos. - Anda, dile algo Taehyung, también conoces la fama de mi prima