cero

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el pequeño finn corría hacia él arenero del parque.
corría porque quería tener él mayor tiempo posible para jugar, y su madre solo le deja una hora y media.

a finn le gusta jugar allí, no hay muchos niños y puede jugar perfectamente a que es un príncipe que salvaba a una princesa, ya que hay un castillo muy chuli con tobogán.

al llegar al arenero, sonrió inmensamente acercándose al castillo.
pero algo se lo impidió, había un niño.

se puso detrás del balancín escondiéndose para poder observarlo.

estaba llorando y tenía las rodillas raspadas, parecía que se había caído, o le habían hecho daño.

»es muy mono«

pensó finn para después agitar su cabeza y volver al mundo real.
tragó saliva y decidido ir hacía él chico.

—ho-hola me llamo fi-finn—dijo nervioso, él niño levanto la cabeza y finn pudo ver como llevaba una falda rosa muy bonita.

él niño al ver a finn se asustó y tapó su cara rápido, para encogerse después, intentando esconderse.

—no... no quiero hacer nada malo—dijo avergonzado, se agacho a la altura—¿te hicieron daño?—preguntó sin respuesta.

sonrió pequeñito empezando a quitar las manos de la cara del pequeño. cuando enfoco la mirada en finn este le sonrió muy amigablemente, a lo que él pequeño respondió con un puchero.

—si...—se seco una lágrima—papá... no le gusta que sea una princesa.

él pequeño empezó a llorar y finn sin saber muy bien que hacer empezó a buscar algo a su alrededor.

encontró una margarita y se la tendió con un poco de nervios. dejo de llorar mirando extrañado a finn.

—¿co-como te llamas?—dijo finn apartando la flor justo cuando él castaño la iba a coger.

—jack...—dijo bajito.

finn respiro profundamente y con una sonrisa nerviosa extendió la flor otra vez.

—jack...—respiró—¿quieres ser mi princesa?

jack se sonrojo a no mas poder. un chico guapo le había pedido que fuese su princesa.

se levanto con un poco de dificultad, y finn vio que era muchísimo mas bajo que él.

jack cogió la flor delicadamente, sonriendo, una sonrisa muymuymuymuy bonita al parecer de finn.

—si—le sonrió de nuevo y se acerco para darle un beso en la mejilla.

—oh...—finn se sonrojo otra vez—esto... te llamaré jackie, ¿si?—jack fruncio él ceño—tu mote de princesa—sonrio pequeño.

—entonces...—jack se quedo pensando—¡te llamare finnie!

—¡no! ¡yo tengo que tener algo varonil! ¡soy tu príncipe!—dijo con un puchero.

—pero a mi finnie me resulta muy adorable—sonrió—¡y pues como me gusta te llamas así!

finn se iba a quejar pero jack subió a la torre del castillo que daba a una torre y empezó a dramatizar sus gestos.

—ven mi príncipe, ven a salvarme—dijo, lo que hizo sonrojar a finn. de nuevo.

—ya voy mi princesa—con su imaginación hizo como si tuviese una espada, tenía que salvar s jack del temido dragón gordo y feo.

tenía que salvarlo.

child love ; fackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora