Capitulo 37

3.9K 490 4
                                    

Natasha.

Los últimos en irse son Mushka y Duncan.

Eric me da un abrazo con sus manitos antes de susurrarme al oído- no llores, mi papa le dice a mi mamá que cuando llora se le rompe el corazón y yo no quiero que se lo rompas a mi tito Simón.

Lo miro enternecida y le susurro- entonces no llorare más.

El me regala una sonrisa torcida, igual a la de su padre y me da un beso en la mejilla.

Cuando cruzan la puerta, un silencio sepulcral se apodera de la casa y largo todo el aire que venía conteniendo desde esta mañana.

Siento su mirada clavada en mi espalda.

Sé que está nervioso. Soy muy buena leyendo el lenguaje corporal de las personas y el de Simón me dice que él no sabe cómo actuar en este momento.

Me giro lentamente y él me mira de brazos cruzados, apoyado en la pared.

Me acercó bajo su atenta mirada y solo cuando mi nariz roza la suya me detengo y lo abrazo, apoyando mi cabeza en su pecho.

Su corazón late desbocado. Sus grandes manos se apoderan de mi cintura y me atrae más hacia él.

Luego deja un beso en mi cabeza y dice- perdóname.

Levanto la mirada confundida -¿Por qué?

-Por cómo se comporta mi madre contigo y por haberte incomodado con la presencia de Melody.

-Ni me la nombres-siseo por lo bajo.

El sonríe y acaricia mi mejilla- me gusta cuando te pones posesiva...

-Aunque ello signifique que termine matando a alguien-digo divertida.

El se ríe y dice- sí, me encantas. Pero tratemos de no matar a nadie ¿Vale?

-Vale. Ahora bésame.

-Siempre tan mandona.

Trato de alejarme, pero él es rápido y me atrapa levantándome por los aires.

Luego me baja y atrapa mi labio inferior entre sus dientes.

Mis piernas se enroscan en su cintura y mis manos se apoderan de su cabello.

El beso se torna intenso. El camina conmigo en brazos torpemente, hasta que chocamos con algo y siento que caemos, hasta que mi espalda da contra algo mullido y suave.

El sigue besándome, mientras yo trato de deshacerme de su ropa.

Sus manos y su boca están por todos lados. El se adueña de mi cuerpo y lo hace suyo una y otra vez.

Me conoce y yo lo conozco.

Es como si en ese momento nos conectáramos y el mundo exterior desapareciese.

Solo somos nosotros dos. Cuerpo con cuerpo, piel con piel.

Cuando todo acaba, terminamos abrazados en el sillón.

Simón nos tapa con una manta y sentimos el fuego del hogar inundarnos con su calor, mientras la leña se va deteriorando a su paso.

Acarició con mi mano su pecho, mientras el acaricia mi cabello.

-Simón. No me importa si tu madre o el mismo rey de España no me acepta o me quiere como soy, mientras tú me ames para mi es suficiente.

El me hace mirarlo. Sus ojos brillan con un fuego abrasador- a mí tampoco me importa, si tú estás aquí a mi lado.

-Melody me da mala espina. Tiene algo... No sé que es... Pero mi intuición nunca falla y ahora mismo me dice que es no es de fiar, que es peligrosa.

La expresión en su cara se transforma y lo delata. Algo paso.

-Escúpelo.

-¿Qué cosa?-se hace el desentendido.

-Tú sabes algo que yo no. Quiero saber qué es.

-Mariposa...

-Dijimos que sin mentiras Simón.

-Bien- dice resignado-pero debes prometerme que no enloquecerás y te mandaras una de las tuyas.

Enarco una ceja y me siento en el sillón.

-No puedo prometértelo sino se sobre que lo hago.

-Solo prométeme que no enloqueceros.

-¡Bien!

- Melody sabe sobre nuestro mundo. Ella es una asesina a sueldo. Cuando la conocí ella me dijo que quería dejarlo, pero necesitaba ayuda. Yo le creí y la ayude, pero algo me dice que cometí un grave error.

Lo miro confundida -¿A qué te refieres?

-Ella trabajo un tiempo conmigo. Luego fue trasladada a los Ángeles. Pensé que ella había cambiado, pero hoy dijo algo que me hizo pensar que me estuvo engañando todo este tiempo.

-¿A qué te refieres?

-Antes de irse, ella me dijo que tú eras su objetivo.

-¿Y?

-¿Y? Ella vino a matarte Nat.

-No le veo el problema.

Me levanto y me pongo su remera. Luego me sirvo una medida de whisky.

-Tú no la conoces. Melody no es una asesina normal, ella es peligrosa.

-Yo también lo soy cariño. Con todo esto me estás diciendo que no tienes fe en mis capacidades.

El se levanta y me vista no puede evitar desviarse hacia abajo, sus abdominales bien marcadas y la V que se va formando hacia sus partes bajas.

-¿Puedes taparte? No puedo concentrarme así.

Mi garganta se seca y mi voz sale ronca.

El se cruza de brazos, resaltando sus músculos en el proceso.

-Hablo enserio mariposa.

-¿Y tú crees que yo no?

-Sí y eso es lo que me asusta. Que todo esto se transforme en una masacre entre las dos.

-Tú deberías preocuparte por mí, no por ella.

-¡Tú me preocupas joder! ¡Ella es la mismísima hija de Alcapone! Esto no es un chiste, ella es una jodida asesina a sangre fría y no es por qué no tenga fe en ti, pero créeme ella da más miedo que tú cuando pierde el control.

Thorned Heart. (3 Libro La Saga "Un Escoces Enamorado")Donde viven las historias. Descúbrelo ahora