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Lo siguiente que ocurrió fue que seguimos con aquello que dejamos en el comienzo. Minhyuk estaba debajo de mi cuerpo con tres dedos dentro de su cavidad. Yo bombeaba, yendo cada vez más profundo mientras él se retorcía y jadeaba bajito. Cuando pasaron tan solo unos minutos, me puse de pie para sacar la única prenda que llevaba: mi bóxer.  Minhyuk, al sentir su interior vacío soltó un sonido lleno de frustración.

—Espera.—dijo haciendo que apartara mis manos de mi ropa interior. Lo miré confundido mientras él gateaba hacia a mí. 

Llevó sus manos al elástico del bóxer y jaló hacia abajo, revelando mi erección. Minhyuk se lamió los labios sin hacer contacto visual conmigo en ningún momento y metió mi miembro en su boca, entero. Yo solté un gemido cuando sentí su húmeda y caliente lengua en la piel. Esperó unos segundos cuando comenzó a mover su cabeza, metiendo y sacando el pene de su boca una y otra vez, sin parar, mientras yo soltaba suaves gemidos y jadeos por mis labios. 

Sacó mi miembro de su boca para comenzar a lamerlo, pasar toda su lengua por toda mi piel, mientras que con una mano sostenía y masturbaba mi miembro, y con la otra masajeaba mis testículos. Era el puto cielo.

Sentía a la perfección su lengua pasar por toda la extensión, como humedecía cada vez más mi virilidad. Volvió a meterlo completo en su boca, moviendo su cabeza unos segundos más, hasta que se separó, dejando un hilo de saliva que nos unía, y entonces volvió a recostarse sobre la cama, abriendo sus piernas para darme lugar a mí y colocarme entre ellas. Hice eso, poniendo la punta de mi masculinidad en su entrada y llevé mis labios hacia los suyos, uniéndonos en un beso lento y lleno de lujuria mientras iba metiéndome poco a poco dentro de él.

Minhyuk envolvió sus brazos al rededor de mi cuello para profundizar más el beso. Mis manos fueron bajando poco a poco por el costado de su cuerpo, acariciando cada centímetro, hasta que llegué a su cintura, donde acaricié suavemente esa zona. Sus paredes envolvían a mi pene y sentía como se iba abriendo a medida que iba entrando más en su cuerpo, volviéndose más apretado.

Me quedé quieto un momento, mientras no dejaba de besarlo, tocarlo. Pasando mi lengua por la piel de su cuello, su pecho, acariciando su suave piel, para luego volver a sus rojizos e hinchados labios.

—Puedes moverte.—susurró el pelinegro rompiendo el beso.

Lentamente comencé a mover mis caderas en un vaivén. La sensación que me invadía era extraña, pero para nada desagradable. Era mi primera vez siendo el activo en una relación y se sentía bastante placentero. Me estaba gustando.

Minhyuk jadeaba, soltando suaves gemidos de vez en cuando a con cada corta embestida que daba. Yo atacaba su cuello, lamiendo, mordiendo, marcando la zona mientras lo sostenía de las caderas con ambas manos, para ir más profundo. Fue en el segundo pedido de mi compañero que dijo que fuera más rápido donde nuevamente volví a obedecer, yendo con más rapidez y brusquedad, creando que los dos cuerpos se movieran al unísono, empujando cada vez más adentro de Min.

—Mhm...—gimió el pelinegro echando la cabeza hacia atrás mientras arqueaba la espalda.—Ahí... dios mío, ahí... sigue...

Estaba tocando su punto, haciéndole ver las estrellas. Los gemidos de Minhyuk fueron cada vez más audibles, más fuerte, suplicándome que continuara o que fuera un poco más fuerte. Obedecía a cada una de sus órdenes, porque de cierta manera, me sentía como si tuviera teniendo mi primera vez y no tengo ni la más puta idea de qué carajo hacer, ni siquiera en dónde debía meterla.

Dejé que un gruñido escapara de mis labios debido a lo apretado que estaba mi compañero. Luego, volví a besar a Minhyuk, solo que esta vez de una forma más desesperada. Lo quería, lo quería demasiado. Lo quería únicamente para mí, y que yo también sea suyo. Que nos entreguemos en cuerpo y alma cada vez que queramos. Tan solo espero, que él aunque sea tenga un mínimo sentimiento dirigido hacia mí y que no haya querido tener sexo conmigo por simple necesidad. No sabría decir si estaba completamente enamorado de Minhyuk, porque de eso no estoy para nada seguro. Pero de que me gusta demasiado, eso sí es un hecho. Solamente me hacía falta que luego de esto él me borre de su vida como para que mi vida entera de vaya cuesta abajo. No estaba listo para que mi próxima apuñalada sea de alguien que quiero tanto como lo quiero al fastidioso de Minhyuk.

Fighter [KiMin] [Monsta X] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora