TN soltó un gruñido poco femenino antes comenzar una percusión alrededor de la piscina. Se resbaló una vez, y fue un golpe demasiado duro para su trasero, Nick le tuvo lastima y acudió a ella para ayudarla a ponerse de pie.
-bueno, supongo que estamos a mano ¿Verdad, pechitos? –dijo ofreciéndole una mano. Hasta tenía esa sonrisita que lo único que provocó en TN fue el devorarlo a besos… pero podía hacer algo mejor….
-sí, claro –contestó, tendiéndole la mano. Esbozó una sonrisa maliciosa justo en el momento en que tomó su mano. Nick no pudo reparar a tiempo. TN reunió la fuerza justa para lanzarlo a la piscina.
-¡Ahora sí estamos a mano trasero estrecho!
Cuando Nick salió a la superficie, no pudo evitar doblarse de la risa. Todos los rulos los tenía en la cara, tuvo que sacudirse para poder ver.
-¡Esto me la pagarás!
TN se alejó a tiempo cuando Nicholas quiso tomarle el pie.
-¡Ajajá! ¡Muy mal hecho, Nickito!
-¡Éste traje me costó dos mil quinientos dólares!
-ay, ¿es de oro o qué? ¡Además sólo tienes el pantalón y la camisa!
-¿Y los zapatos, y el cinturón?
-¿también te costaron dos mil quinientos dólares? ¡Tú sí que tienes dinero para tirar!
Nick soltó un gruñido mientras braceaba hacia el borde de la piscina.
-eres desesperante… y esto me la pagarás.
Sonaba bastante amenazador, pero se veía tan sexy a la vez con la tela de la camisa pegada al torso…
Hasta que se dio de que iba a cumplir con la amenaza. TN trató de correr por el piso de cerámica sin tropezarse, Nick salió con pesadez del agua y comenzó a perseguirla. Nuevamente la persecución terminó en que TN se resbaló en un charco lleno de barro por la lluvia del día anterior. Otro golpazo del que tardó en recuperarse.
-el que la hace la paga, ¿No, pechitos?
-si, por supuesto… -replicó con calma, mientras se reincorporaba. Nick soltó una risita ronca al verla embarrada de barro hasta el torso. Nick no reparó en que ella había preparado una munición antes de levantarse. Y fue muy tarde cuando esa munición le dio directamente en el pecho.
-ahí quedaron tus dos mil quinientos dólares.
La mirada de Nick se encendió como una llama. TN no se inmutó, se mantuvo firme y decidida ante esa mirada. Pero parecía que Nicholas estaba dispuesto a descuartizarla…
-esto ya es demasiado, ahora sí que me la pagarás.
Y la persecución se convirtió en una guerra de barro. Nick se abalanzó sobre ella y ella a su vez sobre él. Terminaron con barro hasta las orejas.
-¿Y? ¿Qué dices, pechitos? ¿Me pedirás disculpas?
Nick se sentó sobre su vientre, con ambas rodillas a sus costados, y le sujetó las muñecas por encima de la cabeza. TN soltó un gruñido al verse totalmente imposibilitada de cualquier movimiento.
-¿Por qué yo?
-¡porque fuiste la que originó todo esto!
-¿¡Yo!? –exclamó TN con total inocente- ¡Tengo barro hasta en las orejas, Nicholas!
-yo en el trasero, y no me estoy quejando. ¡Anda, es hora de que te disculpes!
-¡Eso nunca!
-¿Por qué tanta terquedad, pechitos?
-¡Quítate de encima!
-no. Si me pides disculpas, entonces lo haré.
TN soltó un gruñido y trató de moverse, pero las piernas de Nick eran muy fuertes y le impedían cualquier movimiento. Resignada, soltó otro gruñido de exasperación.
-ya, está bien. Perdón. No volveré a hacerlo. ¿Ahora te puedes quitar de encima? ¡Me estás aplastando!
-cómo si no te gustara…
Ignoró ese comentario por completo. Nick no tenía que saber que le encantaba cuando demostraba su fuerza. Finalmente se quitó de encima y la ayudó a ponerse de pie.
-Dios… estás hecha un desastre.
-y tú no estás mejor que yo, compañero.
-no pienso entrar a la casa así. Y tú tampoco.
-en eso concuerdo contigo. Sólo por esta vez.
-ya, ¿Y tienes alguna idea, pechitos?
A los pocos minutos, ambos estaban en el césped, Nick con manguera a chorro a mano.
-¡Chuiiiii! –chilló TN cuando comenzó a rociarla por arriba de la cabeza.
- no exageres.
-¡Está helada!
-¿Y qué esperabas? Tú fuiste la que comenzó la guerra de barro.
-y tú la seguiste ¿No? dame eso.