Mate Del Alpha.

CAPÍTULO 33|✔️

||ALYSA||

Después de esa presentación dejamos que Kane y Leslie ordenaran su nueva habitación, una más grande con suficiente espacio para los dos.

— Tú y yo tenemos algo pendiente —escucho a mis espaldas.

»Oh no«

— Ahora no Evan, estamos preparando una fiesta para Leslie, será en otro momento —respondo y soy tomada por los hombros haciéndome girar.

— Princesa sé que te encantan las fiestas pero ya es tarde y ellos necesitan descansar o aparentar que lo hacen —dice haciéndome reír.

— Está bien —suspiro resignada— pero aún así planearé esa fiesta.

— Lo sé, ahora también debemos descansar y hablar —asiento y lo sigo dejando algo de espacio entre nosotros.

Mis manos ya están sudando y ni siquiera hemos llegado tan lejos, creo que voy a desmayarme.

—Tranquila, comprendo que aún no estás lista y no te forzaré a hacerlo —dice y toma de mi mano— será cuando el tiempo lo decida.

— Gracias —murmuro y seguimos nuestro camino.
Al llegar a la habitación entramos y nos sentamos en la cama.

—Sé que me diste una semana para enamorarte y cada vez que estamos bien algo lo arruina pero quiero pedirte un gran favor —noto el nerviosismo en su voz y mi corazón late con más fuerza.

— ¿Qué puedo hacer por ti? —pregunto ocultando mis nervios, está situación esta matándome.

— Quiero que te cases conmigo —responde y no puedo evitar abrir mis ojos de la impresión— como acostumbramos en la manada, sé que esto suena extraño pero si el consejo se entera de que aún no estamos unidos vendrá y no quiero que ellos te hagan daño.

— ¿Por qué lo harían? —pregunto ignorando su "propuesta".

— La humana que pone resistencia ante el Alpha es una amenaza para nuestra especie —dice y me mira esperando por una respuesta— a ellos no les gusta para nada que una Luna no se someta ante el Alpha porque así está demostrando a la manada que no lo respeta y no pueden aceptar que una manada caiga ante los rebeldes solo por eso.

— Evan temo que no puedo darte una respuesta ahora —suspira— es que tú eres tan... tú y yo soy... lo que quiero decir es que somos opuestos en algunos aspectos e iguales en otros y eso nos hace pelear cada cinco minutos, creo que primero deberíamos aprender a manejar eso.

— Alysa por favor, cásate conmigo y juro que seré tu sumiso, aprenderé a controlarme y todo lo que quieras, pero por favor ayúdame con eso —suplica haciendo que mi corazón sienta algo de compasión— tengo suficiente presión con el cargo de la manada, mi padre y el consejo.

— ¿Qué opciones tenemos? Siempre hay otra manera de solucionar las cosas —pregunto y no puedo evitar el morder una de mis uñas.

— O nos casamos o el consejo viene por ti a matarte y me obligan a casarme con otra mujer —dice y un frío recorre mi espina dorsal— no quiero que te dañen ni te alejen de mí, tú eres mi vida Alysa.

— Está bien —espero estar haciendo lo correcto— acepto casarme contigo, pero que quede claro que esto lo hago por mi vida.

Una sonrisa perversa curva por sus labios y cuando intento retroceder me sujeta con fuerza.

— Que tonta eres Alysa —dice y me toma de las muñecas— ahora has aceptado casarte conmigo y tendré que marcarte antes de que lo hagamos —veo como sus dientes crecen y de un momento a otro siento un pinchazo en mi cuello y suelto un grito que siento desgarra mis cuerdas vocales, duele como el infierno.