Cronicas Artianas

EL SUEÑO DE SABRINA

Despues un par horas reparando el desastre que Thomas habia hecho, gracias a la batuta de Lola y Leonard. Lola y Sabrina se volvieron a sentar en los lugares en los que estaban antes de que esta escena pasada.
-¿Ves a lo que me refiero? -preguntó Lola refiriéndose al desastre causado por Thomas.
Sabrina parecia no emtender a lo que se referia porque tenia una cara de confución.
-Recuerdas que estábamos hablando de la inyección de sangre ñucéruc -dijo Lola, tratando de esclarecer la memoria de Sabrin- que deben aplicarse los reyes, y que yo estaba hablando de que era algo imprudente volver a los seres más poderosos del universo en seres más violentes, ¿ya recuerdas? -volvió a preguntar Lola.
Y parecía que esta explicación habia funcionado porque Sabrina dijo:
-Sí, ya recuerdo, es que no lo recordaba por lo que pasó hace dos horas.
-Me alegra que lo tengas en cuenta, porque de eso te iba a hablar, ¿no sabes lo que te pasó? ¿verdad?
-Siendo sincera, solo recuerdo hasta que la explosión de Thomas me tiró al suelo, en ese momento creo que me desmayé porque parecía que estuvieras soñando.
-¿Cómo? ¿Por qué dices que parecías soñar?
-Verás, cuando llegó a mi la explosión, ni siquiera la sentí, lo que me hizo caer fue una brisa algo caliente, creo que ahí fue donde comencé a soñar porque después de eso aparecí en un prado muy raro, había flores rojas gigantes y otras flores turquesa dentro de esas flores rojas, en fin, muy lejos de ese prado se encontraba un anciano, estaba vestido con una camisa blanca y pantalones negros, recuerdo que me acerqué con desesperación por preguntarle donde estaba, pero mientras mas grande se hacia, cuando estaba los suficientemente cerca noté que era gigantesco, ¡ah! y que no llevaba zapatos, quedé completamente aturdida con solo verlo, lo malo es que era tan alto que no podía verle la cara, pero sí pude oírle la voz, era bastante gruesa, decía cosas de la madre de alguien, y sobre un trato, ¿Tú entiendes algo sobre eso?
-Sí, después te lo explicaré, ¿Qué pasó después?
-No mucho, dijo prometer no sé qué y comenzó a brillar cada vez más, lo ultimo que recuerdo de eso es que parecía deshacerse en dos esferas de luz he irse, luego de eso volvi a perder el sentido y volví a la normalidad ¿Puedes explicarme lo que pasó? Cada momento que paso aqui es una novedad más, y cada vez esa novedad es más fuerte, no sé... no sé si pueda soportarlo más
Lola al oírlo se levantó inmediatamente de su sillón, y con la cabeza de Sabrina en su pecho la abrazó y le dijo:
-Tranquila cariño, a todos nos ha pasado, solo... trata de respirar y vivir el momento, cuando te acostumbres y encariñes a las locuras de Arta creeme, no te querrás irte nunca

Sabrina no supo qué decir, solo podía llorar, no se sabe a ciencia cierta si era un llanto de felicidad, tristeza o tranquilidad, lo único que se puede confirmar es que era un llanto.

-Bueno cariño, mañana será un día aún más largo, creo que debemos dormir -dijo Lola.
Sabrina asintió y ambas amigas fueron a acostarse en la cama que se encontraba viendo directamente al cuarto de la comida, podrían pasar horas en silencio, pero ellas lo sentirian como minutos y de hecho eso pasó. Pero Sabrina rompió ese silencio después de varias horas/minutos preguntándole a Lola:
-Lola, tú me dijiste que me explicarias todo
-Sí, eso es exactamente lo que dije
-Bueno, podrias decirme...
-¿Quien fue el hombre a quien viste en medio de tu desmayo?
-¿Como lo supiste?
-Estoy comenzando a conocerte
Sabrina sonrió levemente y dijo:
-¿En verdad puedes?
-Creo que sí, pero no estoy segura de lo que voy a decirte
-¿Porque no estoy lista?
-No, no, es... porque no estoy completamente segura de lo que sucedió, veras, estaba algo inconsciente durante todos estos hechos.
-Pero... ¿Sí podrías?
-Lo intentare, pero antes, te tengo que contar una historia tan vieja como el tiempo mismo, dicen que es tan antigua que su creación ocurrió antes que el nacimiento de Arta.
Con estas palabras Sabrina y Lola se sentaron, una al lado de la otra, descansado sus espaldas con la cabecera de la cama, después de meditarlo un poco, Lola, comenzó a recitar un poema...