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El ángel 5501, había aprobado la última fase, fue enviado a la tierra.

El destino estaba a su favor, asignado a Elisa Felsman, la nueva integrante e hija de Lillia Baranovscaya y Yakov Felsman, quienes adoptaron a sus dos hijos mayores luego de circunstancias difíciles. Jóvenes que habían quedado sin padres luego de un fatídico accidente y que ahora compartían un cálido hogar.

Viktor Nikiforov, recibía a la pequeña en sus brazos, su sonrisa tenía cautivados a todos los presentes, incluyendo al invisible ángel que acompañaba a la familia y a sus guardianes.

Leo, el ángel 4732, era el jefe, cuidar al patriarca no era tarea fácil y estar comandando a ahora cuatro ángeles le mantenía presionado, Yuuri, sin embargo, no apartaba su mirada del peliplateado, estaba embelesado y esto no pasó desapercibido por el cabecilla. Quien omitió imponer castigo, ya conocía su antecedente.

El tiempo parecía volar, cinco años contaba ahora la pequeña Elisa, y todos celebraban amenamente, por su parte, el ángel 5501, tenía su semblante cabizbajo, sus ojos estaban cristalizados, su llanto estaba siendo contenido. Su corazón dolía, y con los años aprendió que ese sentimiento sería su perdición.

El ruso, tenía a su lado una hermosa compañera, una pelirroja, de piel porcelana y pecas que adornaban su piel, su figura era prominente, y sus ojos azules hipnotizarían a cualquiera que se acercase a ella.

Sus pies se encontraban jugando sobre el agua, imposible que esto pudiera formar algún movimiento, pero allí estaba a la orilla del lago, donde todos compartían amenamente en familia.

Su corazón, con el tiempo dejo de brillar como el primer día que regresó, el crecido y adulto Viktor, se había convertido en un hombre frío, su sonrisa se había vuelto calculadora, era un robot, sin sentimientos. Y esto estaba llevándolo al borde.

Trato de mil y una maneras, llamar su atención era titánico, conocía que aquella chica, Mila Babicheva, su compañera en la pista y novia, le era infiel, Viktor lo sabía, y el pelinegro se condolía, todo era injusto.

Comprendía el porqué a ellos se les sellaban sus recuerdos, la razón por el cual no les es permitido sentir, y por sobre todo, porque estaban inhibidos de voluntad. Ellos no podían sufrir, no estaban creados para eso, o dentro de lo que cabía, no tomar el control de la vida.

Su inmortalidad era un pecado humano, y allí se encontraba, apretando sus puños, conteniendo su más oculto deseo, mismo que se había desarrollado antes de que sus recuerdos fueran encerrados.

Emergieron, y ahora despertaron al ángel que el destino enlazó al humano frente a sus ojos, su reencuentro desató lo inevitable. 

REBELIÓN. 

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Holis!!

Como les va? casi no actualizo hoy pues el internet está de la patada, pero luego de varios ruegos el susodicho funciona de maravilla, (¬.¬ culpa del vecino, es mío, joder yo soy quien lo paga!) ... XD

Pero bueno luego de este drama existencial, espero que les haya gustado, dejen sus votos y comentarios... se les quieres, BESITOS!!

(^3^)//♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥


Felonía CelestialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora