Hasta que te conocí

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Mi alarma comenzaba a sonar, era viernes...

Me desperté y me quede sentado un rato en mi cama a modo que se me quitara el sueño, fui a tomarme una ducha, me cambié y baje a la cocina, prácticamente vivo solo, mis padres se la pasan trabajando todo el día casi nunca los veo...

Me serví una un plato de cereal, es lo único bueno que podía hacer en la mañana me da flojera hacer un desayuno, mi celular sonaba era mi mejor amigo llamandome, ya estaba afuera, siempre pasaba por mi para ir al instituto, salí de la casa y me subí al auto como siempre el bien sonriente.

-Buenos días Bella Durmiente, siempre suele llamarme asi, rode los ojos 

-Buenos días Alex

-Como siempre de mal humor, ¿Cómo puedes ser amigo de alguien guapo?, lo había dicho en forma sarcastica 

-Entre risas le respondí ¿Cómo puedes ser amigo de un homosexual? a menos que sea por mi belleza y quieras resaltar en el instituto

-Touche... comenzo carcajearse 

Comenzo a celerar y habiamos llegado al instituto, como siempre las chicas se nos acercaban a saludar para Alex, era un honor, para mi era un fastidio en las mañanas, entre todas las chicas había una chica que resaltaba hasta destaca hasta decir ya no, esta locamente enamorada de mí, creó que ha llegado el punto que se imagina que tiene sexo conmigo, es asqueroso. 

-Hola Francis, como siempre lo decía "sensual", y me daba el abrazo de los "buenos días"

-Hola Becca, siempre le respondó de mala gana

-Oye... Becca estoy aquí no piensas saludarme, Alex cruzó sus brazos y hizo un gesto

-No como crees, hizo un gesto y lo abrazo 

-Chicos irán a mi fiesta esta noche, obvio están invitados

-Yo me apunto, con una gran sonrisa lo había dicho Alex

Simplemente me dí la vuelta y seguí caminando, Becca comenzó a seguirme...

-Hey, ¿dije algo malo? 

-Sabes que odio tus fiestas ridículas, donde te emborrachas y quieres acostarme conmigo y luego vienes a contar que tuve sexo contigo, que creó ni por un millón de dolares lo haría, eres la pasiva de todos aquí. Becca simplemente se quedó parada y su sonrisa había desaparecido, la verdad me satifacía hacerla sentir mal a ella, aunque era la única la que trataba mal pero la única manera que podía pasar un día en el instituto sin que ella andara detrás de mi como perrito.

Entre a mi primera clase, Biología, me senté a la par de mi compañera, ella creó que la toleraba era inteligente y clara para decirte las cosas.

-Hola Mariana, y le dedique una gran sonrisa

-Hola Fran, como siempre de risueña

Casi no habla con ella, después fui a la demás clases hasta el toque de receso, con Alex no tenía clases que ibamos juntos, solo nos mirabamos en receso y claro siempre rodeado de chicas, yo me ponía escuchas música con mis auriculares para no escuchar a ellos, a veces fingían estar escuchando música. El director había llamado por el microfono *Alexis Stone reportese en mi oficina*

-¿Qué carajos hiciste ahora? le hice un gesto de molesto...

El solo me hizo un carita de inocente y fue a la oficina del director, en todo el día no lo había visto, hasta el toque de irnos, lo fui a buscar y estaba recostado en su camioneta

-El director me dijo que dejará de utilizar a la chicas de juguete, con un gran sonrisa

Le sonreí y me di la vuelta, seguí con mi camino, sabía que no iría a esa fiesta ridícula. Llegue a mi casa y subí a mi habitación, tiré mi bolson a un lado y me acoste en mi cama hasta quedarme dormido...