Celos

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—Thomas creó que está conversación no tiene ningún sentido—intente sacarme de sus comentarios, de todo lo que me hiciera dudar sobre la decisión que ya había tomado.

—Tal vez para ti no lo tenga pero para mí si, es la primera vez que le muestro mis sentimientos a una chica, que me muestro tal y como soy sin fingir nada.

—Pues no me los muestres más prefiero quedarme con tu imagen de chico malo—me levanté y avancé decidida a irme directamente a mi casa pero él me tomo del brazo y me lo impidió.

—Claro ahora entiendo todo— lo miré confundida—Yo fui quién hizo más fácil tu elección ¿Cierto?. Lo escogiste a él porque pensaste que yo era un desastre y ahora que te das cuenta que no soy tan malo cómo crees quieres evitar conocerme para no enamorarte de mi verdad.

Yo miré al suelo y después me safe de su mano.

—¡Y si fuera así quénunca te importo, nunca te importe yo, solo te fijaste en mi por el maldito disfraz!.

—Me vas a juzgar por eso tú nunca me dirigiste la palabra hasta me atrevo a decir que me evitabas esa fue la primeta vez que tuvimos una conversación y aunque para ti no haya Sido real para mí sí lo fue.

—¿Habría cambiado en algo que te hablará?.

—Tal vez me habría fijado en ti, las cosas pudieron haber sido diferente.

—Eso lo dices ahora pero antes te aseguro que te habrías reído en mi cara por favor Thomas te conozco desde hace mucho tiempo.

—Entonces no me conoces bien piensas que soy la peor persona que existe y crees que él es perfecto pero te diré algo,¡La perfección no existe él no es perfecto!.

—¡Él es perfecto para mí!—grite furiosa, él me miró un poco triste yo desvíe la mirada intentando relajarme—Thomas—suspire—Podemos ser amigos pero solo amigos yo amo a Alex lo elegí a él y lo elegiré siempre.

Él se acercó a mí y me miró directamente a los ojos.

—¿Es tu última oferta?Que solo seamos amigos—dijo con hombros abatidos y una mirada triste.

—Si la tomas o la dejas.

Se giró y se puso ambas manos en la cabeza.

—No puedo ser tú amigo—se giró y miró—No quiero ser tú amigo.

—Bien—avance.

—Espera—me giré para verlo.

—Pero no tengo de otra no puedo alejarme de ti así que supongo que amigos para empezar esta bien—sonrio pícaramente.

—No es para empezar es para siempre.

—Así que planeas durar toda la vida con tú "perfectísimo" novio—hizo comillas con las manos.

—Pues si yo lo quiero y él a mi puede llegar a ser un noviazgo largo.

—Sigue engañandote eso no existe.

—¿Y crees que contigo podría durar para siempre?.

—No yo no digo eso pero no puedes saberlo tal vez conmigo cerca—se acercó y me tocó lentamente el brazo—Las cosas cambien quizá sientas algo por mi.

Me aleje

—No me hagas arrepentirme.

—Tratare de no hacerlo—me guiño un ojo yo no pude evitar sonreír—¿Y hablando de tu príncipe valiente en dónde está?.

—Mmm—hice cara—Está en asesorías con Marlene—su nombre lo dije algo enojada.

—Mmm,¿Cómo es ella?.

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—Es monísima osea imagínatela—asintio— güerita de pelo negro con buen cuerpo y de muy bonitas facciones en su rostro.

—Tsss mmm,¿confías en él? Deberías decirle que me la presente.

—Si si confío en él en quién no confío es en ella y creo que eso estaría bien yo te la presentaré.

—Mmm—empezo a dar vueltas alrededor de mí y se colocó detrás con su boca muy cerca de mi oreja—Imaginate que lo duerma con cloroformo y después abuse de él primero quitándole el pantalón y bajandolo lentamente por sus piernas,después la camisa y acariciando su pecho.

—Ya cállatese supone que eres mi amigo y debes darme ánimos no quitarmelos.

—Mmm, en este caso soy el chico que está tratando de bajarle a su chica así que tengo que meter sisaña para que lo dejes.

—Mmm que amiguitos me cargó.

—Sabes bien que lo acepte porque no me quedó de otra así como sabes que me gustas.

—Puedes por favor no volver a mencionar eso.

Se encogió de hombros.

—Necesitas un trago, estás algo alterada ven—me agarro la mano.

—Es que yo nose tomar—dije tímidamente—nunca lo he echo y tengo miedo a emborracharme.

—No me voy a aprovechar de ti ebria si es lo que piensas ya muévete  vamos.

—No es que crea eso pero de verdad me da miedo.

—Yo te cuidare, no dejaré que nada malo te pase.

Asentí fuimos a su auto mis manos temblaban mucho y mi corazón latía con fuerza. El condujo hasta un bar, bajamos y nos sentamos en la barra lo bueno es que casi no había gente y las que habían estaban muy ocupados en sus tristezas que ni cuenta se daban de quién estaba a su alrededor.

—Dos tragos linda—dijo Thomas coqueteandole a la chica que atiende.

—Por supuesto Tommy—le sonrió seductoramente yo me senté nerviosa, la chica de enfrente era algo mayor para Thomas era de esperarse este chico no sabe de edades—Aqui estan dos tragos—los dejó delante de Thomas—Ella es la chica.

—Sí la que me tiene loco—me miró yo no pude evitar sonrojarme un poco y sentirme alagada.

—Es lindísima—me miro—linda por favor evita mandarlo aquí triste porque cuando lo hace se descontrola.

Yo sonreí sin decir nada Thomas dejó un vasito delante de mí yo dude en tomarmelo pero al final no dije nada y me lo tomé, hice un montón de gestos era una sensación horrible en la garganta, Thomas se estaba divirtiendo al verme así.

—¿Quién es ella?—dije con voz ronca.

—Mmm siempre ha atendido aquí está buenísima y es a la única otra mujer que le cuento mis problemas y con la que me desahogo cuando traigo ganas de ya sabes.

—Sí, déjalo así.

Me lleno de nuevo el vasito y yo lo bebí de solo pensar que Alex estaba cerca de esa tipeja se me calienta la sangre, tengo ganas de ir a buscarlo pero no sabría ni dónde iniciar.

—Algo me dice que los celos te están carcomiendo por dentro.

—Si y que—fije sin modestia— fue tu culpa.

—No es mi culpa es culpa de tu novio.

Apoye mi cabeza en la mesa agotada ¿Si le llamó me veré muy mal?, Si le llamaré no me importa nada.

Mi CrushDonde viven las historias. Descúbrelo ahora