Capítulo 1: Dudas

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Era el año 2084, domingo 30 de enero, 0500 horas. El agente Steven "Wolf" Folley de las fuerzas estadounidenses se encontraba en una misión de alta prioridad, la cual cumplía por órdenes directas del pentágono. Su misión consistía en la infiltración en una base subterránea secreta perteneciente a la unión centro americana para el desarrollo económico (UCADE), ubicada en un punto limítrofe entre las naciones de México y Guatemala.

El Avión Fantasma lo llevó hasta donde se suponía estaba dicha base. Aterrizó a unos kilómetros al sur del pueblo de Pavencul. Bordeó el río Coatán donde logró rastrear la señal que indicaba su entrada. Esta se encontraba disimulada entre unos escombros de unas casas abandonadas al borde del río, a los pies de una colina. Pudo identificar en la oscuridad de la noche cinco guardias armados con las MG55 MK, una versión moderna de la ya clásica MG42, más compacta y portátil. La experiencia previa en medio oriente le había enseñado a actuar con la mayor eficacia posible y generando pocas o ninguna baja si era necesario. A pesar de sus años de servicio nunca había disfrutado el asesinato. Fue entrenado para no dudarlo; por lo que si esto era parte de su misión no habría ningún tipo de error.

-Wolf-, no hay tiempo para retrasos-. La voz en su oído era suave pero firme. Steven no conocía a la dueña de aquellas palabras aunque estaba claro que venían directamente del centro de mando. -Roger-, recitó al segundo como una suerte de cábala. Tomó una pequeña bocanada de aire y echó colina abajo silenciosamente. Contaba con un nuevo traje experimental, dos cuchillos de combate y una vieja sig sauer restaurada con el nuevo "Zero Sound" con solo quince tiros de nueve milímetros.

Los guardias estaban apostados en un radio de quinientos metros desde la entrada a la base y uno de ellos a solo unos pasos de esta, suficiente espacio para que Steven pudiese moverse con tranquilidad. Aceleró el paso a medida que se acercaba a su primer objetivo al norte de la entrada, de espaldas a la colina, cuando se detuvo en seco.

-Wolf-, un dron de vigilancia detectado, activando camuflaje óptico-. Dijo la voz a su oído. Pasarían tres segundos hasta que el protocolo de camuflaje se activara. Steven sabía cómo funcionaba; aun así pensó que no servía de nada si solo eran capaces de engañar cámaras de calidad limitada como lo eran las de ese dron; en realidad no le importaba hacer su trabajo a la antigua.

-El gobierno y sus miedos-, reflexionó mientras acortaba rápida y silenciosamente la distancia entre él y su objetivo. Ya en su espalda, con un movimiento rápido, puso su mano izquierda en su boca y empujó fuertemente uno de sus cuchillos a su pulmón.

Procurando no hacer ruido, arrastró el cuerpo sin vida del guardia hasta unos matorrales y lo dejó con cuidado. Se puso en movimiento hacia su siguiente objetivo y se detuvo a unos 300 metros del lugar, en una pequeña arboleda.

-Central, tengo dos sujetos, ¿información errónea? – Preguntó con cierta desconfianza. No terminaba de gustarle el nuevo traje y sus "sensores", como él les llamaba.

-Sucedió mientras cubrías tus huellas y te dirigías al sector. Puedo darle el siguiente movimiento si así lo desea - respondió la voz casi al segundo.

-Negativo, central - susurró.

Acortó distancia, se apoyó de espalda contra un árbol y observó que los dos guardias conversaban frente a frente con cigarrillos en la mano. Esta era su oportunidad. Atenuó su respiración, sabía que debía ser veloz en su siguiente movimiento. Ocurrió en solo 5 segundos: cogió una piedra pequeña con su mano izquierda y sujetó su cuchillo en la derecha. A gran velocidad, asomó por el lado derecho del árbol. Solo una mirada le bastó para apuntar de manera correcta a los pies de los guardias. Sorprendidos por el ruido, dieron la vuelta para ver qué ocurría, mientras Steven, con su derecha, lanzaba un cuchillo a la cabeza del guardia más alejado. En solo un segundo, acortó la distancia que lo separaba del segundo vigilante y, con pistola ya en mano, disparó a quemarropa en su frente.

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Ya estaba hecho, su cuarto objetivo no presento mayores problemas, este no fue capaz de detectarlo hasta que ya era demasiado tarde, Steven lo estranguló hasta la muerte.

Se encontraba a solo unos metros de su última víctima, listo para correr y dejarlo incapacitado de un golpe en la cabeza. Lo miró atentamente y no vio nada sospechoso. Saltó desde los matorrales donde se ocultaba y, de pronto, unas aves volaron desde la copa de los árboles. El último vigilante dio repentinamente la vuelta hacia donde estaba Steven, encontrándose cara a cara con él. Con la mente fría, Steven corrió hacia su objetivo.

- ¡Alto, deténgase justo donde está! - Vociferó el guardia, apuntando al pecho de Steven.

- Deje su arma en el suelo lentamente y ponga sus manos en su cabeza. - Finalizó.

Steven dejó caer el arma y subió lentamente las manos sobre su cabeza, tratando de pensar en la mejor manera de salir de esto. Solo estaba a 5 metros del vigilante, pero no era capaz de evadir la cadencia de tiro de una ametralladora como esa.

Pudo ver que el vigilante portaba en su oído un transmisor de audio, los últimos modelos se activaban con palabras clave para evitar robos y suplantación de identidad. Mientras aún estaba siendo apuntado, escuchó - Altepetl. - No fue capaz de reconocer el idioma, pero notó que esa era la clave de acceso al transmisor. Ya no podía dudar, debía hacer algo o la misión fallaría.

- Capitán, aún me debes una cerveza desde Nueva Bagdad. – Escuchó extrañado. Este no era el momento para bromas, ya que suponía que le habían asignado esta tarea en solitario. - Un momento. - Pensó. Habían pasado largos años desde la última vez que había oído aquella voz. En un parpadeo, vio cómo el cuerpo de aquel hombre que hasta hacía un momento le apuntaba, caía de espaldas tras un disparo en su cabeza. Miró a su alrededor, claramente el disparo había venido desde muy lejos. El dueño de aquella voz era capaz de asesinar a su objetivo a tres kilómetros de distancia, sin que su pulso se agitara en lo más mínimo.

- Cubre el perímetro, voy a entrar. - Respondió, habiendo recuperado la compostura. Se encaminó hacia la entrada y mientras el sistema integrado en su traje para inhabilitar las cámaras de seguridad se activaba, pudo escuchar la suave voz de aquella mujer del centro de operaciones.

- Wolf, conteste Wolf, ¿Qué fue lo que sucedió? Por un momento, nuestro radar no fue capaz de rastrearlo. ¿Con quién hablaba?- Steven comprendió al instante lo ocurrido. Escuchar la voz de "Frost" lo hizo confiarse y olvidar los hechos ocurridos en el pasado. Él ya no formaba parte de "Task Force" y "Frost" ya no era el fiel compañero que siempre pensó que era.

Tardó unos segundos en recomponerse. A su mente volvieron acontecimientos que desearía olvidar. Imágenes sobre Nueva Bagdad en llamas pasaban por su cabeza. Sus antiguos compañeros de equipo abandonando el frente. Aún así, no todo era motivo de olvido, también llegó a forjar lazos que más tarde serían destruidos. No, no debía olvidar aquello.

- Central, cubra el perímetro. Entraré a la base. Pensé que estabas pendiente de todos mis movimientos. - Cortó Steven y apuró el paso hacia el interior, una vez que su traje estaba listo.

Se abrió paso a través de lo que una vez fue una casa pequeña, se podía notar que los pisos fueron en antaño de tierra, el polvo se levantaba con solo caminar por la vieja sala, el acceso estaba en la única habitación a la derecha, se diferenciaba porque la puerta era metálica, cromada, a su lado derecho a poco más de un metro tenía solo un botón el cual indicaba bajar.
- Central, necesito activación de "Hidden Body". - Pidió mientras presionaba el botón con su mano derecha.
- Wolf, 3 segundos para activación de "Hidden Body" según el escaneo del cuarto objetivo. - Una de las funciones del traje que Steven agradecía era esta, era capaz de analizar el rostro y el cuerpo de un objetivo y replicarlo de manera exacta a los sistemas de vigilancia.
Los sistemas de seguridad actuales iban desde lo más básico como el escaneo de retina, hasta una comprobación facial completa y comandos de voz unidos, como era de esperar la decisión más acertada era utilizar el "Hidden Body" ya que debía pasar desapercibido una vez bajara.

Traitors: 9mmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora