Estamos en la habitación, en la que siempre me quedo es como si fuera mía, tiene algunas pertenencias propias y otras que Sarah y George me han obsequiado.
Joanne dormirá conmigo, la cama es suficientemente grande y cabemos las dos.
Le preste a Joanne una pijama y estamos acostadas escuchando los truenos.
-Esta cama es una maravilla, me encanta.
-Se duerme bien.
-Y ni que hablar del aire, esto es la gloria.
Joanne no ha parado de decir la maravilla que es la casa.
-Ya duérmete, mañana hay que ir temprano al Instituto. Tengo algunos outfit aquí, te puedo prestar algo y no vamos de aquí. ¿Te parece?
-Perfecto, no hay problema. No puedo creer que el mismo día que conocería a mi idola de la moda, también dormiría en su casa. -Susurra para si misma.
(...)
Abro mis ojos lentamente, ya amaneció, hay un hermoso sol allá afuera.
Puedo escuchar el motor de un auto.
Me levanto de la cama y observo por la ventana, a ver quien es.
Son dos autos.
Mis ojos se abren y una enorme O se transforma en mi boca.
Uno de ellos es el auto de Santiago, no puede ser.
Me tiro en la cama y comienzo a despertar a Joanne.
Está demasiado dormida.
-JOANNE DESPIERTA YA.
-¡¿Qué pasa?! Me estas asustando.
La tomo de la mano y la llevo a la ventana.
-Llego, ¿Qué hago?
-Primero respira y segundo ¿quiénes son esos?
Respiro profundo y suelto.
-¿Mejor?
-No, ellos son Sean y Danielle sus mejores amigos.
Santiago y sus amigos entraron en la casa.
Joanne se sentó en la cama y yo me adentre al baño.
Lave mis dientes y mi cara, me hice una coleta alta y salí de allí.
-Será que puedes bajar y traerme algo de comer, muero de hambre.
La miró con una ceja arqueada. Al caso se volvió loca.
Yo de aquí no salgo.
-Lo siento pero no podemos quedarnos aquí todo el día y si él no se va, ¿qué hacemos?
Cuando estaba por responderle a Joanne, la puerta se abre.
Nuestros rostros de susto, fueron desapareciendo cuando vimos a Juanita entrar.
-Buenos días señoritas.
-Buenos días señoritas, esto me gusta aún más. Dios, ¿Así se siente ser una princesita millonaria? -Murmuro Joanne pero pude escucharla.
-Buenos días, no sabes el susto que me acabas de dar. -Le digo abrazandola.
-Te conozco tanto niña Sam, sabía que no ibas a bajar. Además Sarah me lo advirtió antes de salir ¿Qué desean para desayunar?
-¡Sarah no se encuentra! -Digo alarmada.
-Está en el aeropuerto.
Lo había olvidado, mi padre llega hoy junto a George.
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Mundos Opuestos
Teen FictionSamantha Evans y Santiago Williams, crecieron siendo amigos desde pequeños han sido como hermanos, su amistad poco a poco se va convirtiendo en amor pero son muy distintos en clase social. Santiago Williams lo tiene todo y Samantha Evans es sólo una...