VIII.

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—Y eso fue lo qué pasó —dijo Jason, acomodando unas cuantas prendas en los ganchos—. Laurie no me ha hablado desde entonces. Ni un mensaje ni nada.

—Su relación es más complicada que la historia de Pretty Little Liars —dijo Marianne, mientras vestía a un maniquí—. No es por sonar dura, Jason, pero no creo que Laurie vuelva contigo.

Jason bajó la mirada.

—¿Eso crees?

—Eso creemos todos —dijo Madeleine desde el mostrador—. Jason, a Laurie solo le importa el dinero. Si no fue capaz de aceptarte con tu forma de vida y tus decisiones, entonces no te amó lo suficiente.

—Eso o tal vez nunca te amó —dijo Anthony y ahogó un grito cuando recibió un golpe en las costillas de parte de Marianne.

—Lo que Anthony quiere decir... —dijo Marianne mirando de reojo a Anthony—. Es qué tal vez ella no era la correcta para ti. Es duro, Jay, lo sabemos. A veces hay una persona en nuestras vidas y creemos que es el amor de nuestras vidas aunque al final nos damos cuenta que no fue así. Y no pasa nada, es parte de vivir. Ya sabes; naces, creces, te rompen el corazón, después de varias penas encuentras a tu verdadero amor y mueres. Nunca cambies tu esencia por alguien. Eres un chico asombroso, único, valioso y amado. Muchas chicas se morirían por salir contigo.

Anthony fingió toser:

—Madeleine. —Y volvió a toser. Madeleine se sonrojó hasta los párpados.

—¿Qué? ¡Claro que no!

Todos rieron, menos Jason. Lágrimas se asomaban por sus ojos y las limpió rápidamente.

Él enserio quería creer las palabras de Marianne. Enserio quería creer que alguien lo amaba. Enserio quería creer que era asombroso, único, valioso y todos los demás adjetivos calificativos lindos que le había dicho.

Enserio quería sentirse como cuando Laurie estaba con él. Aunque todo en su vida estuviera mal, allí estaba Laurie. Al verla, Jason pensaba "Bueno, al fin y al cabo la tengo a ella. No todo está tan mal". Ahora que ella se había ido, no había nada, no le quedaba nada.

—Bueno, hablemos de cosas más enérgicas —dijo Anthony—. Como el festival Blue House.

—¡Oh, sí, Disfonía los va a vencer a todos! —dijo Madeleine, muy emocionada.

—Vi la lista de las bandas que participan ayer en la página de Facebook de el festival —dijo Marianne—. Ninguna es gran competencia, la verdad.

—¿Cuáles son? —preguntó Madeleine.

—Juicy Scandal, Psychedelic Sunshine, Walmart Gang, Andromeda's Habits, Wallflower Peaks, Burning Lips, Smile Of A Mother y Forgotten Lullaby —dijo Marianne.

Anthony abrió los ojos a toda su expresión al escuchar el nombre de la última banda.

—¡¿Forgotten Lullaby?!

—Pues sí —respondió Marianne alzando los hombros, restándole importancia—. ¿Te parecen buenos? Vi algunas de sus canciones en YouTube, no son tan buenos.

—¿Que si no? ¡Su música es asombrosa, Mar! Es como un viaje por el psique de la mente humana, ¡otro nivel!

Un frío le corrió por toda la espalda a Jason. Vaya, eso sí era competencia.

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