The Amazing Spiderman: Tiempos de oscuridad.

~ 5 ~

El Doctor Octopus entró en escena. Daredevil observó al tipo, agarrando a Spiderman del cuello con sus tentáculos de metal. Peter se resistía, pero era casi imposible librarse de esos brazos. Casi.

Spidey abrió poco a poco el tentáculo, tratando de poder respirar un poco. Fisk salió del despacho, dejando a los cuatro combatientes allí. Una vez estaba en el pasillo, tocó una alarma escondida tras una planta.

Daredevil corrió a ayudar a su compañero, pero Smythe le paró los pies. Ambos empezaron a golpearse. Octopus miró al héroe.

- Debes... Morir...- susurró.

Tras esto, Octopus lanzó al vacío al héroe, quién caía a toda velocidad.

«Muy bien, Parker. No pasa nada, puedes con ello. Sólo espera a lanzar la red en el momento adecuado. En el momento adecua-¡Agh!»

Octopus había saltado y le había golpeado con sus brazos. Esto hizo que el héroe atravesara una ventana de un edificio cercano a Industrias Fisk. El traje estaba con rasguños por varias zonas. Peter levantó su máscara hasta la nariz, escupió, y se levantó del suelo.

Una vez se aclaró la mente, bajó su máscara, y buscó el cadáver de Octopus en las aceras dea calle.

«Es imposible que haya sobrevivido a esa caída. Estúpido... Su obsesión por matarme le ha llevado a la... No. ¡No está! ¡¿Dónde ha ido a...?!»

Su sentido arácnido se volvió loco. Recibió un gran golpe desde detrás que le lanzó al vacío. Durante la caída quedó inconsciente. Estaba perdido. Su cuerpo caía a gran velocidad. Sin embargo, una silueta lo agarró en el aire a tiempo. Esa silueta cayó con él en una azotea cercana. Su salvador había sido Daredevil.

- ¡Eh! ¡Spiderman! ¡No es hora de dormir! Levanta... ¡Vamos, levántate!- gritó.

El diablo recibió un golpe en la mandíbula. Era Smythe. Le agarró del cuello, y lo golpeó varias veces más. Luego, lo tiró contra el suelo. Las gotas de sangre mancharon las manos del Mata-arañas.

- Patético. Octavius, ven aquí.- dijo pulsando un comunicador.- Es hora de que acabemos con Spiderman.

- No... No le toques...- pronunció levemente el herido diablo.

- ¿Por qué no? ¿Me lo vas a impedir, héroe de pacotilla? Dame las gracias, te estoy dando la oportunidad de volver a esa asquerosa Cocina del Infierno para que juegues a pegarle a mafiosos y pandilleros.- exclamó Smythe.

- Porque no pienso permitir que le mates... No mientras yo siga en pie...- dijo levantándose costosamente.

Smythe lanzó una carcajada al aire. Octopus llegó y se colocó tras él.

- Si insistes. Hazlo.- dijo Smythe sonriendo.

Octopus golpeó la espalda de Daredevil. Acto seguido, apoyó uno de sus brazos mecánicos en una pierna del héroe, quién gritaba de dolor. Smythe sacó una de sus garras, se acercó a Daredevil y la colocó justo en su cuello. Cuando iba a rajarselo, una red oscura le paró. La red tiró de Smythe con fuerza, lanzándole contra una pared. De ella callejón varios cachitos de ladrillo.

Spiderman estaba de pie. La sustancia negra le cubría el cuerpo, transformando su colorido traje en uno totalmente negro. La araña de su pecho y espalda pasó a ser una aún más gruesa y de color blanco.

- Se acabó, Smythe.- dijo el héroe cerrando el puño.

Alistaire, furioso, escupió a un lado un poco de sangre y gritó:

- ¡Octopus! ¡Olvídate de ese idiota y mata a Spiderman!

Octopus obedeció. Comenzó a atacar al héroe, quién esquivaba sin problemas los golpes. Cuando Octopus le dió la espalda en un intento de golpearle, lanzó varias redes y se impulsó. Después, pateó la espalda del villano, dió una voltereta aérea, y golpeó el rostro de su enemigo con una fuerte patada, dejándole completamente inconsciente.

Alistaire se lanzó a por él con sus aterradoras garras. Spidey contraatacó, agarrando una de esas afiladas garras y clavándosela en la pierna al Mata-arañas, quién gritó de dolor.

- Estás acabado, Alistaire. Vas a pudrirte en la cárcel.- dijo el héroe.

- N-no... ¡No hasta que acabe contigo!- gritó Alistaire abalanzándose de nuevo a por la araña.

Spidey le golpeó en la cara, pateó su costado derecho, y lo tiró al suelo. Luego, enredó a los dos villanos con su nueva y oscura telaraña. Ayudó a Daredevil a levantarse, quién estaba sin palabras ante lo que había visto.

De la nada, apareció un helicóptero de la policía, quién bajó a varios agentes. Estos apuntaron a los dos héroes.

- Gracias por ayudarme, Spidey, pero ahora te has metido en un lío por mi culpa.- dijo Daredevil.

- No, no lo creo. ¡Bajad las armas! ¡Estamos de vuestro lado!- gritó Spidey.

- ¿De nuestro lado? Y una mierda. Acabas de atacar a Wilson Fisk, hijo de perra. ¡Poneos de rodillas, con las manos en la cabeza, o abriremos fuego!- gritó un policía.

El grupo de SWAT apuntaban a los dos héroes. Ellos se miraron por unos segundos. Asintieron, y cada uno corrió por un lado distinto al del otro. Los disparos surcaban el cielo. Spidey y Daredevil consiguieron huir.