—No, quedé en que mañana luego de ir a revisión con... Piper —Un escalofrío, se hizo en su estómago al mencionar el nombre de la mujer que le estaba ocasionando desvelos inesperados— Pasaré al estudio para charlar con ella un rato.
—Uhm —Gruñó Nicky, mordiendo si mejilla internamente y evaluando el rostro de Alex, pues notó el cambió en su voz, cuando mencionó aquel nombre. Diane también se percató, conocía a su hija mejor que nadie.
—Vamos a la terraza, comencemos con lo que está pendiente ¿Sí? —Alex, cambió drásticamente el tema levantándose y llevando con ella una taza de té— Madre gracias por el desayuno estuvo delicioso.
—De nada cariño, para mí es un gusto consentirte.
—¡Ay yaaa que me va a dar diabetes de tanto dulce entre ustedes! —protestó Nicky, lo que hizo sonreír a las otras mujeres.
Se dirigieron a la terraza, en la estaba dispuesta una mesita con dos cómodas sillas de jardín. Al frente, se encontraban unas pequeñas plantas que adornaban sutilmente el lugar. Desde allí se podía ver parte de la ciudad.
Comenzaron a dialogar sobre puntos relacionados con el contrato que, recientemente, habían firmado bajo la figura del estudio de fotografía. Eso conllevaba responsabilidades y compromisos, por lo que debían revisar que se estuvieran cumpliendo. Acordaron que, a pesar de que las actividades del contrato las llevaba Polly, debían informar a Alex de todo, pues ella era la cabeza, el cerebro principal, del estudio.
—Nichols, hay algo más de lo que te quiero hablar. No tiene que ver con nada de lo que hemos estado conversando —Hizo una pausa y se quedó seria.
—Dime ¿Qué es? ¿Es sobre lo que te ha tenido pensativa?
—Sí, se trata de... Piper.
—¡Lo sabía! Sospeché que tenías un cable cruzado con la doctorcita. Claro no es para menos, está muy guapaaa —Nicky, alzó un poco el tono de voz y no paraba de hablar.
—¡Ey! ¿Qué te pasa? baja la voz. No quiero que mi madre se entere.
—Pero ¿Por qué? se nota que a ella, le cae muy bien la doctora. Además, Diane es un amor contigo no se opondrá. No veo nada malo en que lo sepa.
—Sí, pero es muy pronto. Ayer fuimos a comer y estuvimos diciéndonos algunas cosas.
—Cuéntame —Nicky estaba emocionada.
—Sólo te diré que quedamos en conocernos y dejar que las cosas fluyan —Alex sonrió, estaba provocando a Nicky.
—¿Que? ¡Ah no, me dices todo ya mismo! No quiero nada a medias ¿Cómo es posible?! No te pases —Alex reía por la reacción de su amiga, había logrado lo que quería.
—Relájate Nichols —dijo riendo aun— Sucede que desde que la conocí, sentí un no sé qué hacía ella. No te había contado, pero antes de lo de ayer, ya habíamos salido.
—¡Alexandra Vause! ¿Cómo es posible que no me hayas contado? —Se hizo la dolida.
—No Nicky, todo ha pasado muy rápido a penas lo estoy asimilando. Es más, aún tengo dudas. Ella me gusta, no te imaginas cuánto, me gusta cómo me hace sentir, oír su voz, estar en su presencia. Me gusta el sabor de sus labios, sus besos... —Nicky la miraba con una expresión de asombro.
—¿Sus besos?! Si que me perdí de mucho. Y todo eso pasó en ¿Una salida? eres rápida Vause, sabía que tenías habilidades, pero me quedé corta —dijo riendo.
—No ¿Cómo crees? la primera vez que coincidimos fuera de la clínica, fue un fin de semana en el parque. Le pedí a Diane que me dejara sola un rato y por casualidad nos encontramos. Luego me trajo a casa y me invitó a ir de paseo al día siguiente, la pasé maravillosamente. Y una vez aquí en el departamento me besó y la besé —Alex se quedó pensativa, recordando.
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La dueña de tu mirada
Fanfiction¿Cómo un episodio puede afectar tu vida? Te invito a leer y darte cuenta por ti mism@ de que se trata. De seguro te gustará. No se permiten copias o adaptaciones de esta obra, bajo ningún motivo.
Capítulo 13
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