I Knew You Were Trouble

Capítulo 1

Después de un largo periodo de almuerzayunos, playa, juegos, amanecidas, entre otras cosas que hacemos los adolescentes en vacaciones llegó el momento de volver a la cárcel, si, o a lo que muchos llaman "colegio".

Mi rostro apático y mis pequeños pies balanceándose al borde de la cama lo decían todo.

--¡Alessia! ¡Alessia!-- Era mi madre desde el otro lado de la casa. Su voz se escuchaba grave.

Tallé mis ojos, salté a mi cama y desprendí el sujetador en el cual colgaba mi uniforme. No me gustaba ponermelo, me quedaba holgado y nunca lo llevé al sastre para que lo perfeccionara. Pero no me importaba, al fin y al cabo el chico que tanto me había gustado desde que entré al colegio pasaba de mi turno.

Pan con mermelada, chocolate con leche y avena con manzana sobre la mesa, todo se veía delicioso. No era de las personas que suelen comer mucho, pero terminé todo en un tik tak. Acomodé mi mochila y mi blusa correctamente, antes de salir mi mamá me detuvo, me sonrió y me dió un beso en la mejilla: "Hoy será un grán día, te quiero mucho" 

Okay, no era mi primera vez en la escuela, pero me sentía nueva, veía a todos como personas gigantes y yo alguien frágil. Era muy insegura. Seguí caminando como si nada pasara, aunque en mi mente todo explotaba. Remojé mis labios y respiré profundo. Caminé más y más, no era popular, por lo tanto no conocía a muchas personas, mi único refugio era mi mejor amiga, y yo no la veía por ningún rincón.

Uno de los auxiliares nos mandó a sentar. Entonces la ví de lejos, estaba muy emocionada, corrí hacia ella y la abracé, nos estábamos viendo de MUCHO tiempo. Entonces el director y profesores comenzaron a hablar y a desarrollar la ceremonia de bienvenida.

Al terminar todo el evento, turno tarde había sido informado y advertido de volver para el medio día. Así sucedió.

--Gonzales Sánchez, Segundo A. --

Así continuó la grán lista de aburridos nombres, hasta que por fin llamaron el mío... Segundo C, oh vaya, la misma sección otra vez.

El primer día de clases era practicamente como un día más de vacaciones, los profesores no asistían, y si lo hacían solo nos dictaban los materiales que utilizaríamos durante todo el año, luego desaparecían. Me gustaba.

Marcaban las 5:50 PM y estaba ansiosa por la salida, POR FIN. Entre risas y jugueteos salía del brazo con mi mejor amiga. Y pasó algo que nunca debió haber pasado, mis preciosos ojos brillaron, pues habían visto al chico más bello del mundo.