Y si algún día vuelves 💔 (kookmin)

Capítulo 24

Tenia un dolor de cabeza terrible, es como si mi mente estuviera siendo  reparada y no quisiera saber de nueva información.

Después del encuentro con el señor Jung, bueno Hoseok, me quedé pensando, y era justo lo que no quería, tener algo más en que pensar.

Mi padre seguía sin aparecer, ya estaba hartandome de tanto secreto, él nunca me ocultaba nada y que ahora estuviera tanto tiempo sin saber de él me daba muy mal presentimiento.

Decidí salir a tomar aire, faltaba media hora para el encuentro con Taeyang y la verdad que con este dolor de cabeza lo que menos quería era más malas noticias, porque de alguna manera tenía la idea de que no seria algo agradable, tal vez sea un pesimista, pero algo me decía que no sería nada favorable.

Ahora que tomaba nota, había  pasado más de una semana y no me había topado con Chanyeol, según tenía entendido el estaría a cargo de verificar unos problemas que habían surgido en un hotel que su padre abrió hace como seis meses, y estaba insistiendo para que se uniera al círculo de hoteles de mi padre, sabía que, chanyeol al igual que su padre eran como buitres, buscando la oportunidad de ganar fama, y mi padre dejaba que se colgarán de él.

Estaba en desacuerdo, y mi padre lo sabía, pero insistía que era importante perdonar y apoyar a la familia, espero que no se esté equivocando, otra vez.

Como no lograba despejarme, decidí ir por mis cosas a mi oficina e ir al encuentro con Taeyang, quería descansar
pero por ahora no era posible.

Faltaban diez minutos aún para las cinco, pero me sorprendió ver a Taeyang ahí, esperando impaciente y moviendo sus pies de manera frenética, se encontraba nervioso y miraba a cada rato su reloj, espere que diera la hora y me acerque hacia donde se encontraba sentado, cuando se dio cuenta de mi presencia me miró.

–Hola, me da gusto que hayas llegado – saludo en cuanto me vio.

–Hola, si por lo visto tienes tiempo esperando – me miro y desvío su mirada a su taza de café, estaba vacía.

–Un poco – se rascó la nuca, tome asiento frente a él – que te gustaría tomar?

–Un capuchino esta
bien – mientras tomaban nuestro  pedido lo estudiaba con la mirada, el silencio que se formó después de que se fue la mesera fue abrumador, solo quería que hablará de una vez, no sabía como comenzar la conversación.

–Como has estado? – preguntó rompiendo el silencio.

–Pues tranquilo, el trabajo está disminuyendo  poco a poco, y tu? como estuvo la conferencia?.

–Bastante bien, aunque aburrida en unas ocasiones –se relajó un poco y hablamos sobre el tema, me contó todo lo relacionado a esta y escuché atento, cuando terminamos nuestro café y uno que otro postre quiso acompañarme, no había tocado otro tema que no fuera trabajo, es obvio que no estaba aún seguro de lo  que quisiera decirme.

Llegamos a mi departamento, paso dudoso a la sala, ya había esperado mucho, y si él no decía nada no sabía si preguntarle o esperar hasta que él creyera conveniente.

–Jimin, lo que tengo que decirte es algo que no tenía planeado, no sé cómo te tomes esto – bajo la mirada.

–Tan complicado es? – pregunté con cautela.

–Teniendo en cuenta nuestro futuro como pareja si.

–Que sucede? – era mejor terminar esto de una vez.

–Mira, antes de que regresara a tomar el lugar de mi padre en la empresa, hubo una convención de pequeños empresarios en Japón – dijo mientras se pasaba las manos por el cabello – asistí porque mi padre dijo que me sería útil, duro una semana, en esa convención estuvo Rose también, por que? no lo se, en la última reunión muchos conocidos nos reunimos y decidimos ir a una cena de despedida,en ella estuvo Rose incluida, tomamos de más – bajo la mirada otra vez – ella y yo amanecimos  juntos – me quedé callado, se que había algo más, estaba estático, no mencioné nada, después de un rato continuo – hace tres días me dijo que esta embarazada, esta esperando un hijo mío.

No sabía como reaccionar, no sabía que decir, era tan malditamente frustrante, el me miró esperando una respuesta y mi mente estaba en blanco , nadie dijo nada en más de diez minutos.

–Por favor Jimin di algo? – me miró triste.

–No tengo nada que decir, eso fue antes de que empezáramos una relación – miré mis manos – estas seguro que es tuyo?

–Pensaba que solo quería engañarme con eso, pero la prueba de paternidad dio positivo.

–No tengo más que decir, es tu hijo – la verdad es que si estaba enojado y mucho, pero no era algo que mereciera mi opinión.

–Me imagino que ya no quieres saber nada de esto – comentó resignado.

–Imaginas bien, lo que paso entre Rose y yo lo sabías, pero sinceramente yo no quiero saber nada qué tenga que ver con ella.

Espere que dijera algo más, pero solo se levantó derrotado y me miró.

–Lamento a ver traicionado tu confianza, espero que me perdones algún día.

No conteste, no podía, salió del departamento y me quedé sentado, por primera vez sin saber como reaccionar, camine hasta mi habitación y me acosté, necesitaba dormir porque mi cerebro parecía que no estaba funcionando.