MERLIA: LA CHICA DEL HIELO| JOEL PIMENTEL| CNCO. [COMPLETA]

C26: Una visita.

Merlia apoyaba su cabeza en el hombro de Daniela mientras un montón de lágrimas caían por sus mejillas, la pelinegra acariciaba su hombro en un acto de hacerla sentir un poco mejor pero todos sabían que no lo iba a hacer. Camila la observaba muy confundida porque hace una hora atrás todo estaba perfectamente bien y ahora tenía a su mejor amiga a punto del colapso.

-¿Cómo que Joel te terminó? Estaba demasiado enamorado de ti, definitivamente hay algo que anda mal aquí porque todo esto no tiene nada de sentido, Merlia.-Inquirió Camila con el ceño fruncido.

La chica rubia simplemente se quedó callada, no sabía cómo explicar lo que sentía en ese momento, era un montón de sentimientos que no podía comprender. Todo lo que había sucedió con Joel la había hecho caer en un par de segundos.

-Merlia, no puedes dejarte decaer de esa manera. Es sólo un chico, hay miles en el mundo y si te dejó cómo lo hizo es porque simplemente no vale la pena así que no pierdas tus lágrimas con personas como él...-Dijo Daniela mediante un murmullo.

-¿Con personas cómo él? Con la única persona con la que me he sentido feliz de verdad, con el único chico que me comprende y me escucha, con el único con que tengo cosas en común... De verdad no sé si me comprenden pero... No lo sé, no es fácil.-Estalló Merlia dejando que otra lágrimas cayera por su mejilla.

-Lo sabemos, amiga. Sabemos lo mucho que amas a Joel y no es sencillo dejarlo ir, pero mira lo que te hizo, te terminó por teléfono sin razón alguna, eso muestra que no vale la pena... Sin importar lo que haya pasado para que él reaccionara de esa manera, tú no te mereces eso y lo sabes más que nadie...-Acotó Camila tomando las manos de su mejor amiga.

La chica de ojos color chocolate negó un poco con la cabeza y se dejó caer en los brazos de su amiga- Me dijo que lo engañé, Camila... Pero yo nunca lo hice, siempre le conté todo y nunca le mentí...-Dijo Merlia en un hilo de voz.

Era obvio, la chica del hielo se había quebrado de una manera terrible.

-Oye Mer, sé que todo lo que te está sucediendo es algo... Que uno sufre cuándo tiene su primer amor, a mí también me pasó lo mismo hace unos años atrás y te comprendo enormemente pero algo aprendí de eso es que... Nadie puede hacerte sentir así más que tú misma...-Musitó Daniela observando fijamente a la chica.

Merlia soltó un pequeño suspiro, procesaba las palabras de Daniela poco a poco hasta que se dio cuenta de que tenía toda la razón, observó a la pelinegra y se limpió sus mejillas apartando las lágrimas rebeldes que estaban en ellas.

-Tienes razón, Dan... No me voy a dejar decaer por... Un simple chico. Y lo primero que voy a hacer es... -Sintió su corazón estremecerse de una manera inimaginable- Quitarme este collar...-Murmuró.

La rubia tomó el collar y lo desabrochó haciendo que éste cayera en su mano, lo observó un poco y se levantó para llevarlo a un pequeño cofre color celeste que estaba en su escritorio, lo abrió y colocó de manera delicada el collar en él. Con el mayor dolor de su corazón cerró el cofre para que esos recuerdos se quedaran allí para siempre y no volvieran jamás.