Prologo

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_Me llamo Amy Evelyn McCartnell, tengo un doctorado en medicina en la universidad principal de California, actualmente no tengo ningún empleo, tampoco he trabajado antes en una empresa como esta, por lo que no tengo mucha experiencia, pero aprendo rápido, no salgo en las noches, de fiesta quiero decir, no bebo ni fumo, de verdad necesito este trabajo, mi marido no trabaja, y le debemos mucho dinero al banco, hace unos días que perdí mi trabajo, necesitamos el dinero, necesito el... necesitamos el trabajo_ la chica miro atentamente a los dos hombre frente a ella.

_¿No es usted demasiado joven como para estar casada?¿cuantos años tiene?_ pregunto el hombre rubio ojeando las hojas de su currículo.

_Veinticinco, ¿por que?, ¿es que soy muy joven?, de verdad que puedo trabajar como una persona con experiencia, ya les he dicho que aprendo muy rápido, solo denme una oportunidad_ la chica se veía realmente desesperada.

_¿Tiene hijos?¿O tiene pensado tenerlos?_ volvió a preguntar el mismo hombre, el otro parecía no escucharla,era un hombre mayor que no que no apartaba la mirada de su titulo de medicina.

_Si, tengo... tengo tres hijos, el mayor tiene 10 años, se llama David, es muy maduro para su edad, la mediana tiene 5, se llama Lucy, siempre a mostrado mucha afición por los animales, sobretodo los domestico, me gustaría que estudiara mucho y se hiciera veterinaria, se que sería muy feliz de esa manera, solo quiero que sean felices , después esta la pequeña, mi bebita, la pequeña Lily, tiene 5 meses, a todos les encantan las cosas dulces... _ la chica miraba algún punto por la ventana, con la mirada perdida y una tierna sonrisa en el rostro.

_¿Por que está en tan mala condición económica si tiene un doctorado en medicina?_ volvió a preguntar el hombre rubio.

La chica no sabía como decirle que su marido, con el que tubo que casarse por obligación de sus padres por falta de recursos a sus dieciocho años, era un alcholico y drogadicto que volvía todas las noches a casa borracho, habiéndose gastado todo el dinero que ella ganaba en su anterior trabajo, el cual había perdido por las amenazas de su marido hacia su jefe, al este haberle negado mas dinero del que ya me pagaba.Que se desahogaba con ella golpeándola hasta dejarla inconsciente y forzarla a tener relaciones con el todas las noches sin ninguna protección salvo las pastillas que de vez en cuando ella conseguía comprar a escondidas, y en las cuales solo disfrutaba su marido, que se dejaba golpear todo lo que podía con tal de que sus hijos no sufrieran daño alguno, pero no podía evitar los insultos, los insultos hacía ella y sus hijos, la pasa de hambre y muchas cosas mas.

El hombre que se había mantenido en silenció hasta ahora habló.

_Ya te llamaremos_  le devolvió a la todos sus documentos y esperaron para hablar a que ella saliera de la sala. Amy sabía lo que eso significaba, no la habían aceptado para el trabajo.

Cuando salió a la fría calle, soltó un suspiro de vaho, cargado de toda la desesperación que la carcomía por dentro. Sus hijos llevaban sin comer nada desde ayer, y dudaba que la leche le bajara, ella también llevaba nada desde ayer, su bebita tendría que esperar, solo esperaba que su marido hubiera comido algo en el bar con invitación de alguno de sus asquerosos amigos, no quería enfrentarse a un hombre como lo era su marido si ademas tenía hambre.

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Esta es Amy.

Laura  ;V


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