Emma: Necesito hablar contigo urgentemente. O si no, creo que enloqueceré.
Ese fue el mensaje que le envié a Alicia hace unos cuantos minutos atrás, y la condenada aún no ha llegado a mi casa, ella quedó en venir dentro de quince minutos y ya han pasado veinte. No pude contenerme más de veinticuatro horas.
Necesito ir y contarle que Ethan ya siente lo mismo que ella, y también le quiero decir que vaya y se declare para que ambos empiecen una relación y mi corazón termine de romperse. Sé que dije que yo ya no sentía nada por Ethan; pero, oír decir eso de Ethan puede que haya hecho que de alguna u otra forma, mis sentimientos salieran a flote en mi corazón. Me siento como una chismosa total.
Y ahora yo estoy en un conflicto interno. Uno armado.
El timbre suena desde abajo, por lo que corro hasta la puerta y la abro con torpeza sólo para encontrarme con Ethan. Una mala expresión pasa con rapidez por mi mente al verle ahí parado con un semblante preocupado.
— ¿Qué se supone que haces aquí? —Las palabras salen directamente de mi boca, sin pasar a ser analizadas por mi cerebro ni siquiera un mísero segundo. Esto es malo, muy malo; si ve a Alice sabrá que le dije a ella sobre sus sentimientos hacia su persona —. Digo, ¿qué te trae por aquí, amigo?
La palabra «amigo» sale de mis labios tan..., Tan falsa y llena de amargura. Tan yo.
— Alice me llamó, dijo que quieres hablar con los dos —Dice Ethan —. Por favor dime no le dijiste lo que te conté, Emma. Dime que no lo hiciste.
Emma. No me ha dicho E, ni siquiera Ems, si no Emma. Sólo hace falta que me llame por mi apellido. Ya no veo preocupación en su cara, ahora veo coraje y enojo. Lo entiendo, de hecho, yo también me molestaría si mi mejor amigo le dijera al chico que me gusta, pues, eso, que me gusta; lo entiendo y me duele, como no creí que me dolería mentirle a mi mejor amigo.
Cruzo los dedos antes de responderle mirando su nariz, lo más cerca a sus ojos posible para no levantar sus sospechas.
— ¿Cómo crees, Ethan? Yo soy incapaz de hacer eso.
Ethan parece estar conforme con mi respuesta así que asiente para después entrar a mi hogar como, pues como Ethan por mi casa. Cierto la puerta y abro el Whatsapp desde mi celular.
Emma: Sabes que no soy de usar malas expresiones. Pero...
Emma: Mierda, ¿dónde jodidos estás, Alice?
Bien, me deja en recibido la muy Alicia. ¿Dónde rayos está mi mejor amiga? ¿Por qué rayos no me contesta, por qué le dijo a Ethan que quería hablar con ellos dos? ¿Por qué siento que es traición?
— Entonces... ¿Por qué estoy aquí, si no le dijiste nada?
— No tengo idea, pero puedes irte si quieres, Ethan —Le sonrío con inocencia, lo cual le hace arquear una ceja en mi dirección —. Es... es broma, ¿quieres algo de tomar, Ethan?
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Soy Emma Dupain, no Agreste
FanfictionEmma Dupain es hija de una de las mayores diseñadoras. Es modelo y secretaria, casualmente del rival número uno de su madre, Adrien Agreste. El heredero Agreste muestra interés en ella, pero a Emma solo le interesa jugar. Adrien sabe que Emma es un...