Capítulo 3: El inicio de la pesadilla

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-Go to sleep preciosa.... Susurró la voz.-¡Hmp! ¡Hmp!. Hice ruidos desesperadamente.

-Sh...Tranquila, no queremos que te tranquilice por las malas ¿o si?. Dijo. Negué con la cabeza rápidamente.

El chico me tomo de los brazos e hizo que me diera vuelta para si quedar frente a su cara, lo que vi me heló la sangre..... Su piel era de un blanco casi irreal, parecía como si se la hubieran blanqueado a base de químicos, en donde deberían estar sus párpados solo estaban unos círculos negros, también parecían quemados, y por último su.......sonrisa de oreja a oreja, literalmente, la carne de sus mejillas estaba abierta en una raja bastante profunda, dejando expuesta la roja carne del interior de su boca. Al verme, el chico soltó una carcajada bastante siniestra.-Soy hermoso, ¿no crees?. Preguntó sonriéndome de forma maniática.

Me quede callada, no por que no supiera que responderle, sino por que, dijera lo que le dijera el resultado sería el mismo. En vez de eso me límite a mirar sus ojos, me había sorprendido tanto por sus faltantes párpados que no había notado sus ojos, eran azules, y me observaban con una mezcla de burla y cinismo.

En realidad eran bellos, de un azul oscuro, vibrante y profundo, como el océano embravecido, e igual de peligrosos. Me imagino que, si el portador no emanara violencia, esos ojos podrían ser juguetones, con un brillo coqueto capaz de hacer suspirar a más de una, o serían parte de un rostro igualmente bello. . . .si no fuera porque lo que tenía frente a mi era lo más horroroso que había visto, su apariencia, más que repugnante, parecía dolorosa, el blanco de su piel no era natural y cuando la veías de cerca, estaba reseca, maltratada, como si se fuera a abrir al mínimo contacto. La piel que rodeaba sus párpados estaba oscura, no sabía si por el sol, por quemaduras o si simplemente se caía de pudrición, pero eso también se veía extremadamente doloroso, estaban negros y no se veía lo que antaño fueran sus pestañas, me pregunté si podría cerrar los ojos. Seguramente no.

En el rostro frente a mi no había belleza, pero la expresión de orgullo con la que me sonreía denotaba que el estaba bastante cómodo con su apariencia, aún si pareciera la mar de dolorosa. Así que sólo me encogí de hombros disimulando realmente mal el terror que me invadía, total, terminaría igual fuera como fuera.

-Tus ojos son muy lindos. Señalé cuando vi la mueca de insatisfacción que me dio segundos después de mi escueta respuesta corporal.

-¿Qué?. Preguntó, más incrédulo que sorprendido.-Tus ojos...Son muy bellos. Volví a decir con una sensación de vergüenza cada vez más grande.

El sólo me miro confundido un momento para después explotar en carcajadas. Lo que hizo que mis mejillas se pintaran de un fuerte carmesí. ¿Alguna vez habías estado en una situación tan bochornosa que lo único que salía de tus labios eran frases el doble de vergonzosas  que te hacían sentir peor que antes? Pues era uno de esos momentos el que estaba teniendo.-Gracias, supongo. Dijo cuando terminó de reírse.

El chico se me acerco hasta quedar a sólo unos centímetros de mi cara, escudriñándome con la mirada, yo, por instinto intente retroceder, pero mi pie tropezó y caí de trasero al piso.-¡Demonios!. Exclamé.

-Así que....¿Te doy miedo?. Preguntó con una ceja levantada.

-¿Qué no es obvio?, en cualquier caso, ¿Quien mierda eres y por que estas en mi habitación?. Respondí con una mezcla de molestia y miedo. 

-He estado observando este lugar durante un buen tiempo, y me he dado cuenta de que sea lo que sea aquí, tu no sales, me dio curiosidad y vine, tal vez pueda divertirme un rato. Respondió encogiéndose de hombros en una expresión casual.

Sus palabras hicieron eco en mi cabeza lo suficiente para poner a mi cerebro a trabajar, ¿Había estado observando el internado por un tiempo? ¿Cuanto?. Entonces fue cuando caí en cuenta. No había estado loca, no había alucinado, no me había equivocado, si había alguien vigilándome.

Lo miré, llevaba un polerón blanco, un pantalón entubado y una mata de pelo negro le caía desordenada por los hombros. Lo reconocí de inmediato, lo había visto en la calle cuando estaba en clases y el me había visto a mi, incluso podría decir que. . .el me había estado viendo todo el tiempo, el que estuviera en la calle no era casualidad, me había estado vigilando.

-Me has estado siguiendo. No era una pregunta. El, me miro unos segundos mientras su ya macabra sonrisa tomaba un matiz amenazador y cínico.-Denle un premio a la ganadora de hoy, no eres muy lista ¿verdad, preciosa?. Se burló. -Soy Jeff. Dijo antes de que yo pudiera hablar.

¿Jeff? Ese nombre me sonaba...

*Flashback*

-Oye ¿Has escuchado las noticias?. Preguntó a su amiga una chica del internado.-¿La del asesino?. Respondió indiferente la otra.

-Si, esa donde encontraron el cadáver de una niña con las mejillas cortadas en forma de sonrisa, y con el mensaje "Go to sleep" escrito con sangre en la pared. Expresó la chica con los ojos como platos.-Al parecer, es el mismo asesino de siempre, ya sabes, el que nunca pudieron atrapar. Dijo encogiéndose de hombros.

-Si, incluso dijeron su nombre en la televisión, Jeff the Killer creo que se llamaba, ¡que miedo me dio cuando escuché esa noticia!. Respondió la chica con un notable temor en sus palabras.-Creo que mientras cierres con seguro tu ventana todo va a estar bien, vamos apúrate que llegamos tarde a la clase. Contestó la chica apurando a su amiga.

*Fin del Flashback*

Ahora lo recuerdo, yo estaba guardando mis libros en el casillero cuando escuche a esas dos hablando del asesino de las noticias, personalmente no me interesaba su conversación, pero hablaban en un tono tan alto que era imposible no entenderlas.-T-tu........ ¿Eres el asesino de las noticias?. Pregunté sintiendo el miedo subir por mi garganta.-¡Vaya! Si que te tardaste, pues si soy yo. Se acercó hasta quedar en mi oído y susurró:

-Jeff The Killer....

Mis ojos se abrieron tanto que pensé que se me iban a caer. El era el asesino más buscado de Estados Unidos..... El que se había cobrado más de mil vidas, el que mataba de una manera de lo más tortuosa y sangrienta, al que todo el mundo le tiene miedo.... Jeff The Killer.

-¿Te ha comido la lengua el gato, preciosa?. Preguntó sonriendo burlonamente.-¿V-vas a matarme?. Dije.

El, sólo me miró de arriba a abajo, frunció el ceño un segundo y luego sonrió.-Admito que ese era mi plan original, pero por el momento no, voy a jugar un poco contigo antes, cuando te maté, voy a disfrutarlo más. Me dijo ensanchando su perturbadora sonrisa.

"¿Va a torturarme?". Pensé, abriendo la boca para protestar, cuando un agudo dolor en la cabeza nubló mis pensamientos, no entendía que pasaba, hasta que vi a Jeff sonriendo, con el mango del cuchillo apuntando hacia mi, ¿me había golpeado?.-Me encantaría quedarme a charlar contigo, pero tengo cosas que hacer, lindura. Volveré pronto, cuando estés más...dispuesta, buenas noches. Canturreó antes de que yo me sumiera en la inconsciencia.

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Bueno, capítulo 3, no esta taaaan diferente del original pero sentía que tenía que cambiarlo si o si, ojalá les guste y lo disfruten, nos leemos en el siguiente capi, Lauren fuera, bai :v

                                     Lauren.B

My dear Killer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora