Solo Tú

8

— Oliver, Thomas por fin bajan... ¿Qué pasa Olí, aun te duele?— pregunto Andrew al ver al joven omega en brazos de su hijo.

— Sí papá aun le duele— respondió Thomas al ver que Oliver mantenía mirada baja, parecía en otro mundo.

— ¡Oh cariño!, llamare al médico de la manada y vendrá a revisarte, pero recuerda que él recomendó movimiento será mejor que comiences a caminar por tu cuenta — la sonrisa nunca abandono los labios de Andy mientras hablaba — Thomas bájalo— ordeno su padre.

Thomas sin rechistar bajo al omega a apenas unos escalones del final de las escaleras, el chico se aferró al brazo del lobo con la respiración un tanto agitada, se negaba a soltarlo.

— Thomas no— susurro el omega, Matt gracias a su afinado oído lo escucho apretando con más fuerza un trozo de chamarra que su tío portaba ese día, Ian no estaba mejor que el omega, el vampiro mayor buscaba con su mirada la del chico pero este se negaba manteniéndola baja.

— Vamos cariño vayamos a la mesa— Andrew tomo de la mano al chico separándolo de su hijo e hizo lo mismo con el vampiro mayor — Vamos Ian que Paul quiere verte dice que quiere hablar de algo importante contigo... mientras ustedes chicos podrían hacerme el favor de bajar a la bodega y traer un par de botellas de vino.

Ambos chicos se miraron a los ojos para apartar la mirada al instante segundo después, Matthew sujeto con fuerza su brazo casi al punto de hacerse daño cosa que Thomas noto en el momento.

— Vamos Matthew — hablo el lobo al mismo tiempo que colocaba con suavidad la palma de su mano en la espalda baja del vampiro provocando un nada discreto escalofrió, escalofrió que tanto padre como hijo notaron, el otro par estaba demasiado entretenido en sus cosas como para notar a un elefante en la sala.

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— Ya lo hable con el consejo y hemos decidió destituir a Víctor como alfa de BloodWolf, el único problema es que esta se quedara sin uno y todos aquello que no lo quieran seguir quedaran sin protección — Paul le había contado lo sucedió al vampiro mayor, Ian era conocido como uno de los más fuertes vampiros de la era, y por supuesto al pertenecer a la familia Taylor heredo consigo sus creencias y enseñanzas, un vampiro fuerte y despiadado con sus enemigos, pero con un gran corazón para sus amigos y familia.

Ian de la conversación con Paul lo único que le intereso fue lo sucedió con el chico que permanecía al lado de la pareja del alfa, no sabía ni entendía porque pero una fuerte ira lleno su ser al escuchar cómo fue encontrado el pequeño que parecía temblar cada vez que lo volteaba a ver.

— Estaré aquí un tiempo... puedo proteger la manada mientras ustedes encuentran un alfa digno para el puesto— sugirió el vampiro.

— De hecho eso era lo que pensaba pedirte, eres un vampiro reconocido y se sabe de sobra tu fuerza y valores, sé que contigo nada le pasara a la manada— alago el lobo mientras estrechaba la mano del vampiro cerrando así el acuerdo entre ellos, acuerdo del cual cierto vampiro pensaba aprovecharse para acercarse a cierta personita.

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Matthew y Thomas buscaban en silencio cada uno un vino en específico que Andrew mando a pedir, el travieso mate de BlueMoon sabía de ante mano lo difícil que les resultaría encontrarlos.

— ¡Lo encontré!— festejo el lobo alzando la botella de vino tino Merlot.

Por otro lado Matthew seguía buscando el que le encomendaron a él, unSauvignon blanc, vino blanco. Le estaba resultando insufrible la tarea por más que buscaba con desespero entre todos los vinos expuestos en sus compartimientos no lo encontraba, además de que la constante mirada de Thomas sobre de él no lo dejaban hacer mucho.

— Podrías dejar de mirarme — pido el vampiro cansado y exasperado del constante acoso.

— No quiero — fue la escueta respuesta del lobo quien se acercó a paso lento por la espalda del vampiro sin que este lo notara.

— Si has encontrado tu vino vete, yo me iré en cuento encuentre el mío — recalco Matt dándose la vuelta con el ceño fruncido solo para toparse de frente con la penetrante mirada azul del lobo — ¡Thomas!— no pudo evitar que un jadeo de sorpresa escapara de sus labios mientras chocaba su espalda con el estante repleto de vinos tras de él.

Thomas no se alejó ni hablo, solo se mantuvo en silencio observando fijo cada mínima facción del rostro de Matthew clavando su mirada por varios segundos en los rosado y húmedos labios del vampiro, labios heredados de su padre Sam, unos labios sensualmente llamativos.

De un momento a otro Thomas dejo caer su cabeza en el hombro del vampiro a la vez que dejaba la botella de vino tinto en una de las mesas para después sujetar de los hombros a Matthew y así impedir que quisiera escapar de nuevo.

— Thomas déjame, yate dije que nosotros no somos amigos no somos nada... déjame... vete con tu mate —el vampiro intento apartarlo pero el lobo afianzo su agarre bajando las manos ala cintura y envolviendo sus brazos alrededor pegando más sus cuerpos.

— ¿Por qué sigues repitiendo eso?, me duele sabes, me duele Matt y más viniendo de ti — el lobo escondió el rostro en el cuello del vampiro aspirando profundo el embriagante aroma. 

— Yo ya no puedo Thomas... ya no puedo más con esto... por favor déjame — la voz de Matt tembló y unas cuantas lágrimas rodaron por sus mejillas mientras trataba de contener los sollozos tapándose la boca con una mano, la enigmática esencia de Thomas lo llenaba pero al mismo tiempo lo hacía sentir tan vacío, porque no lo creía suyo.

— Yo tampoco... ya no puedo con esto Matthew... sabes por qué me duele... me duele porque en este momento estoy abrazando a mi mate y el solo quiere alejarme, me rechaza y eso me duele en el alma — la respiración de Matthew se cortó unos segundos tras escuchar la reveladora confesión de Thomas quien aun escondía su rostro en el cuello del vampiro.

— ¡No juegues con eso Thomas, esto no es graciosos!— el vampiro enfureció al sentirse burlado,empujo con verdadera fuerza al lobo apartándolo y salió de la bodega corriendo.

— ¡Demonios Matt! ¿Porqué no me crees? — preguntó a la nada mientras se levantaba de entre el montón de botellas destruidas por el choque con el estante — Anhgg — un quejido salió de sus labios al notar unos cuantos cortes en sus manos, cortes que no paraban de gotera sangre. 

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— ¿Por qué juegas así conmigo Thomas? ¿Por qué te burlas de esa manera de mí?— las lágrimas no dejaban de fluir al recordar las palabras de Thomas, caminaba a paso lento por entre el bosque ahora tenuemente iluminado por el sol que se filtraba entre las ramas de los pinos, por un segundo se lo creyó y lloro de felicidad para después caer en la realidad, ellos no podían ser pareja, si lo fueran lo hubieran notado mucho antes.

Matthew recordaba la historia de sus padres como ellos se sentían al estar juntos y el cómo no se podían imaginar con nadie más y Thomas ya había tenido una novia a la cual él había visto varias veces besar, si ellos fueran pareja el no habría podido hacer eso.

Una secuela más delas malas decisiones de Thomas.

  ❣❣ bye bye ❣❣