-Me gustas, sé que quizás sea tonto para ti, pero aunque no te conozca bien ni tú a mí, me gustas... -Dijo la chica mientras se sonrojaba cada vez más.
-Yo... -
Melina gusta de un chico al cual ni
si quiera le habla y sólo lo ve sábados y domingos...
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«¿Está mal no disfrutar un beso que sabías que quizás algún día pasaría?»
—Paola yo, no quiero confundirte yo quiero... —trataba de aclarar todo pero desvío su mirada cuando la chica que sería su cita de hoy pasaba a su lado, como si nada —Yo no quiero a nadie ahora lo siento debo irme. —Tomó su mochila y la rosa que antes traía en su saco, corrió detrás de ella, tratando de alcanzar Melina quien había pasado rápido —Te vas sin mí —dijo sin respuesta —Hey, chica arácnida —
Melina giró para enfrentarlo.
—Yo, me iba, pensé que saldrías con tu amiga y por eso decidí no molestarte —
Dada una respuesta clara entre comillas Ángel tomó el brazo de la chica y caminó con ella, a su lado.
—No, Contigo, yo quiero salir contigo, vámonos. —sugirió el de gemas oscuras.
Por otro lado Mery estaba en su puesto ,junto con otras chicas del mismo taller, lugar donde se encontraban sus amigos Christian y Mateo conversando sin notar a Mery.
—Pues pudiste llevarla a casa bro, te gusta y ella sabe que eres buena persona podría darte una oportunidad. —comentaba Mateo.
«Christian está enamorado y no nos dijo» pensó Mery.
—Es Melina, no te diría que no, sólo tratala con amor o no sé —le susurró.
«¡¿Qué?!»
Melina aun no sabía que decir, estaba confundida.
—Me gustas, Ángel me gustas —soltó con la mirada en el suelo.
«¿Qué tontería dije?»
—Yo, Melina... No... Sé... —dijo confundido.
«¿Qué hago?»
—Melina ¿no crees que es muy pronto? —
«¿Muy pronto? ¿Por qué me lo dices con tu mirada de despreocupado?»
—Mmm sí, tal vez tienes razón —Terminó por contestar la chica con una sonrisa forzada.
«¡Rayos!, me lo dijo Mery, no corras y Declares tu amor»
—¿Aún quieres salir? —dijo el de cortos rizos.
—Sí, sólo ¿podemos olvidar lo sucedido? —suplicó Melina.
