Capítulo 4: Ashndy.

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Me desperté en aquel salón unas horas después, al parecer se había hecho tarde. Alguien aporreaba la puerta de mi apartamento con fuerza, así que me dispuse a levantarme. Cuando me acerqué por completo a esta, la abrí aún con los ojos cerrados por el efecto de aquella larga siesta. Sí, estaba completamente dormido. Froté mis ojos con fuerza, haciendo un esfuerzo por poder abrirlos, hasta poder ver a Katherine, Anna, Vivian y Wendy, sonriéndome.

—    ¿Qué pasa? — Pregunté, dejándoles paso para que entraran en casa.

—    Por favor, mis ojos. Ponte algo. — Dijo Vivian entre dientes, lanzándome una camiseta que había dejado en el sofá. Me puse esta con una risilla, oyendo las carcajadas de Katherine. Sin duda, volvía a estar drogada.

—    Te vamos a llevar a una tienda de ropa. — Comentó Anna, sentándose en el sofá.

—    Pero…a mi no me gustan las compras. — Contesté poniendo una mueca rara.

—    Tampoco pretendíamos comprarte nada. Simplemente nos acompañarás, por si se nos acerca algún viejo verde. — Katherine soltó una gran carcajada, que luego contagió a Anna.

Media hora después salimos en dirección a aquella tienda. Al parecer, estaba bastante cerca de nuestro apartamento, así que solo nos llevo un par de minutos. Cuando llegamos allí, Anna, Katherine y Vivian, corrieron por toda la tienda. Obsesivas de las compras. Mientras tanto, Wendy admitió que odiaba las compras al igual que yo. Segundos después, mi teléfono comenzó a sonar.

—    Ash. — Reconocí esa voz desde el primer segundo, algo que me hizo sobresaltarme, y salir de aquella tienda rápidamente.

—    ¿Nat? — Estúpido. Pues claro que es Nat.

—    Te echo de menos.

—    Y yo a ti… 

—    Te lo explicaré todo cuando tenga más tiempo, bueno. Te quiero. — Nat colgó el teléfono antes de que pudiera contestarle nada.

    Me giré guardando mi teléfono, viendo como Wendy arrastraba a Anna hasta la salida de la tienda, ayudada por Vivian, Katherine y una de las dependientas de la tienda. Sí, seguramente estaría apunto de robar algún bolso de Channel y una funda de Zac Efron para su móvil.

Al cabo de un rato, consiguieron hacer que Anna devolviera el bolso. Así que, Vivian, propuso la idea de ir a una de las discotecas más famosas de Roma para calmar el cabreo de Anna por no conseguir robar aquel bolso. Todas asintieron, así que como no, yo no iba a ser menos. Supuse que sería buena idea olvidarme de todo por unas horas, aunque para ser exactos, solo quería olvidarme de Nat aunque solo fuera por un tiempo.

Cuando llegamos a aquel sitio, Wendy me arrastró hasta la barra dejando que Viv, Kath y Anna se pusieran a bailar con el primer tío que encontraran.

Genial, 1 hora después ya estaba borracho. Aunque Wendy no andaba muy descaminada, ella aún era consciente de las cosas que decía o hacía, o al menos, eso me estaba pareciendo. Por muy normal que me hubiera parecido el día que la conocí, borracha era igual que sus tres amigas, o incluso peor. Vivian estaba desaparecida mientras tanto, Anna y Katherine estaban tiradas en el suelo besándose. Wendy volvió a arrastrarme, esta vez hasta la pista, perdiendo de vista a Katherine, que esta vez estaba revolcándose por el suelo con Anna.

Wendy se abrazó a mi, apoyando su cabeza en mi pecho, obligándome a dar vueltas lentamente sobre la pista. Y sí, definitivamente, estaba mucho más borracha, ya que levantó la cabeza, depositando un pequeño y dulce beso sobre mis labios. Ella, esbozó una amplia sonrisa, soltando una leve risilla y susurrando.

—    Te quiero. — Antes de que esta pudiera seguir hablando, la interrumpí, depositando otro pequeño beso en sus labios. Sentí como alguien aporreaba mi espalda a puñetazos, me dí la vuelta, y si, efectivamente, allí estaban, las 3 divinas de nuevo. Kath nos miraba sorprendida, mientras que Anna esbozó una sonrisa de oreja a oreja. Vivian, como siempre, no estaba de acuerdo, y miró a Wendy enfadada.

  

—    No…¡Tú no puedes tener novio antes que yo! —Gritó saliendo de la discoteca rápidamente después. Kath nos hizo varias señales para que salieramos todos juntos detrás de Vivian, aunque ella ya estaba llegando a casa.

    Cuando llegamos, Wendy me invitó a entrar en su apartamento, mientras que Anna y Katherine se metieron en varias habitaciones buscando a Viv. El efecto del acohol no había desaparecido aún en Wen, ya que iba mareada, así que se apoyo en mí, pidiéndome que la llevara en brazos hasta su cama. Obviamente, no la iba a dejar allí tirada, así que, efectivamente, la lleve en brazos hasta su cama.

— Quédate conmigo. — Murmuró, extendiendo sus brazos hasta llegar a agarrar mi mano con fuerza. Tiró de esta, haciendo que quedara a su lado, acurrucándose de nuevo en mi pecho. — Buenas noches, bebé. — Susurró. ‘Bebé’, genial. Natalie. 

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⏰ Última actualización: Aug 16, 2014 ⏰

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