Ruthless [ EDITANDO ]

Capítulo 73

Alexander

Al escuchar esas tres simples palabras que salen de los labios de Kate, mi cuerpo se relaja inmediatamente, suelto el aire que tenía retenido desde que hace unas horas Kate me dijo que podía llegar a estar embarazada.

Envuelvo a Kate entre mis brazos apretujándola fuertemente. 

-A-alex –Dice entrecortadamente –N-no puedo r-respirar.

La suelto inmediatamente al escuchar esa última palabra.

-Lo siento.

-No te preocupes –Dice secando con el dorso de su mano algunos restos de lágrimas.

-Esto mejoro mi día –Digo sentándome a su lado en el borde de la cama.

-Y el mío –Dice riendo –Pero esto no cambia nada –Dice cambiando su fase graciosa en un segundo a una seria.

-Si entiendo –Digo bajando la mirada –Creo que deberías dormir un poco ya es tarde –Digo nuevamente, parándome y caminando hasta la puerta.

-Alex.

-Si –Digo con una pisca de esperanza en que me diga que quiere que volveremos juntos.

-Mañana iré a sacar un boleto para volver a casa, puedes venir conmigo o quedarte aquí –Dice en un tono seco.

-Emm... está bien, yo te llevare –Digo desilusionado.

-Gracias –Dice antes de que salga de la habitación.

Camino hasta mi habitación y me recuesto en mi cama para pensar un rato.

Con todo lo que ha estado pasando estos días había olvidado el consejo que me había dado Ethan el otro día.

Tal vez tenga que ponerlo en marcha, no tengo mucho tiempo ya que Kate quiere irse lo antes posible y no la culpo ella no tendría que pasar ni un segundo más a mi lado.

Pero hare todo lo posible para que ella me perdone, o por lo menos que seamos amigos y que el hermoso tiempo que pasamos juntos no se valla a la basura.

(...)
Despierto gracias a unos ruidos de golpes y cosas rotas. No sé cuándo me dormí lo único que recuerdo es que estaba pensando en Kate y caí en un profundo sueño.

-¡Kate! –Digo en un susurro al percatarme que alguien podría haber entrado a la casa  hacerle daño a Kate.

Me levanto rápidamente de la cama y corro hasta la puerta. Fuera de la habitación esta todo normal, como si nada hubiese pasado, pero la luz de la habitación de Kate está encendida.

¿Qué hace despierta a estas horas de la madrugada?

Corro hasta la puerta de su habitación y la abro rápidamente sin tocar, Kate no está en su habitación pero la puerta del baño esta entreabierta.

Camino hasta allí y asomo un poco la cabeza para ver a Kate dándome la espalda tumbada en el piso hecha volita.

-Kate –Digo entrando completamente al baño -¿Qué pasa?

Ella voltea a verme y veo parte de su rostro y toda su ropa llena de sangre, está sentada sobre un charco de sangre.

-Kate por dios ¿Qué tienes? –Digo tomándola en mis brazos rápidamente.

-Necesito ir a casa –Dice llorando.

-Si claro, pero primero te llevare al hospital –Digo poniéndola de pie.

-M-me prometiste que no mas h-hospital –Dice cayendo desmayada en mis brazos.

-Kate, KATE –Grito bastante nervioso.

Rápidamente cargo a Kate en mis brazos y salgo de la habitación con ella, tomo las llaves del auto y salgo de la casa.

Subo a Kate a la parte trasera del auto para que viaje más cómoda y subo delante, conduzco a toda velocidad por las oscuras y vacías calles de Roma.

Al cabo de unos minutos llegamos al hospital, bajo con Kate en brazos por la entrada de emergencias.

-ALGUIEN QUE ME AYUDE –Grito al entrar al hospital.

Unas enfermeras llegan rápidamente con una camilla en donde recuesto a Kate, comienzan a revisar sus ojos y su respiración a mitad del pasillo.

-Su presión es muy baja, ha perdido mucha sangre –Le dice una enfermera a otra sin percatarse de mi presencia.

Ambas asienten y comienzan a empujar la camilla rápidamente, corro tras ellas hasta que entran en una habitación donde otras dos enfermeras me detienen diciéndome que no puedo pasar.

-SOY SU NOVIO –Grito asustando a las enfermeras.

-Tranquilícese ella estará bien, solo la revisaran le informaremos por cualquier noticia –Dice una de las enfermeras dejándome a mitad del pasillo solo.

-Vamos Kate, tu puedes salir de esto linda –Digo en un susurro tomando mi pelo frustrado.