Había pasado un mes exactamente desde que cierta esgrimista se marchó a Inglaterra, y para la diseñadora le era imposible no hecharla de menos, realmente se habían vuelto muy unidas desde que decidieron hacer las pases y olvidar aquel amor imposible, apoyándose mutuamente para lograrlo.
Todo con tal de olvidar ese sentimiento que tantos problemas les había traído.
—¡Vamos! No estarás hablando enserio.— exclamó. —En verdad quiero creerte, pero me es imposible, tu siempre estuviste obse... Perdón, enamorada de él, dudo que sea enserio eso de que lo olvidaste de un día para otro.
La de coletas suspiró a la vez que se alzaba de hombros.
—No fue de un día para otro... Sin embargo, hay algo que no es igual desde que Kagami...
Inevitablemente la morena soltó un pequeño bufido, acción que no pasó desapercibida para la franco-china.
—Mari.— interrumpió. —Se que tu y ella mejoraron mucho su relación, en especial cuando pasaron de ser rivales a ser amigas, pero... Cambiaste mucho desde que comenzase a estar más tiempo con ella.
La de ojos azules miró incrédula a su mejor amiga, la cual negó al imaginar lo que podría estar pensando.
—No, definitivamente no estoy celosa, solo digo lo que veo.— explicó cruzándose de brazos, provocando que la azabache riera levemente.
—Si, te creo, Alya.— murmuró con ironía, siendo la de lentes quien hiciera un puchero de inconformidad.
La joven sabía que seguía resentida con ella, pues desde que hizo las pases con su rival, solía pasar más tiempo con la esgrimista que con la reportera, por lo que era entendible que siguiera molesta a pesar de haberse disculpado ya tiempo atrás, desde que la morena le dijo como se sentía.
Debía darle tiempo para que todo volviera a ser como antes.
—Buenos días, Alya, Marinette.
Al escuchar aquella voz, la de lentes sonrió con picardía, mientras que la diseñadora sonrió con normalidad al rubio frente a ellas.
—Buenos días, Adrien, ¿qué tal tu fin de semana?— preguntó sin titubear, dejando sorprendida a su amiga.
—Estuvo genial.— respondió. —Gracias por preguntar.— sonrió para luego retirarse a su lugar, dejando solas a ambas féminas.
La de ojos azules miró a la joven frente a ella, quien parecía seguir impreisonada por lo que acababa de presenciar.
—Te lo dije... Ya no vale la pena.— repitió como si nada.
Juraba que no era posible el que su amiga hubiese olvidado lo que sentía por el modeno, pero ahora que lo veía con sus propios ojos no había duda.
El mundo si que estaba de cabeza.
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°[Lυкαηєттє/Lυкαмι]° ▪ Lip2Lip ▪
FanfictionDesde lo ocurrido en la pista de hielo, la rivalidad entre Kagami y Marinette creció, ambas comenzaron una absurda pelea para destacar ante Adrien, su objetivo, sin embargo, por más que intentaban, el rubio no lograba ver de lo que eran capaces, así...