palabras en la web

Un todo mudo (¿O más bien sordo?)

Hace un largo tiempo me senté a las afueras de mi vanidad, en la intemperie de las emociones que acarrea mi transitar corpóreo. Pude ver en la lejanía de todo este pesar, que mis palabras muy bien no estoy logrando expresar.
¿Qué dije? ¿Qué dijo? ¿Mi culpa?
Mi culpa.
¿Serán mis miedos tan atroces para no permitirme avanzar? ¿O es acaso que mis lágrimas son invisibles a los demás?
Lo que escurridizo sale de mi boca se desploma en el choque contra esta cruel realidad.
No importa tanto.
No importa ni un poco.
Me pregunté entonces por qué todas esas miradas crueles me apuñalaban de manera tan particular, casi sin dejarme respirar; aún más me sorprendió saber que frente a ese reflejo quien más arremetía el daño en mis entrañas era, para mi sorpresa un tanto descompuesta, mi propia imagen.
Detrás del llanto de mi madre .
Detrás del odio de mi padre.
Detrás del miedo de mis pares.
Estoy yo, ocasionando un regocijo de dolor que repercute en este ser que poco a poco carece cada vez más de la vitalidad que el resto, al fin y al cabo, sí parece gozar.
¡Qué injusto este todo mudo acorralador de los más grandes puñales en mí!
¿Acaso es tan complejo aprender a discernir?
Extremadamente violento; en el límite de la cordura, de lo impuesto, de lo que resurge y lo que mata. Ahí me encuentro.
Con el anhelo más latente por entender lo que atenúa el valor en mi cansado corazón.
Que no me hace sentir, que me roba el aliento sin compasión.
De veras cuestiono a mis ideas si es en tal magnitud aterrador mi grito por ayuda, porque frente a él hasta los lazos más  presentes se anulan. Me enfrentan, me asfixian.
Y una vez más golpea en estos hombros la incertidumbre de las penas un tanto abstractas; traen consigo la duda que todavía no puede comprender, de qué tan profundo puedo caer.
(Pero quiero creer a esta neblina como la causante de una sordera en quienes no me desean concretar como dispuesta a hundirme en la amargura de esta soledad).

Lourdes. 19 de Julio de 2018. Córdoba, Argentina.