¿QUÉ? ¿NO SOY TU TIPO?©

Jase se va

Una hora más tarde estábamos Trish y yo en la sala de espera del departamento de la respetada directora, juro que me pensaré seriamente si Trish seguirá siendo mi mejor amiga...nad ella siempre lo será aunque me meta en problemas, ¿no sé qué le paso? ¡No corrió!... ahora estuviéramos en la cafetería, o en cualquier otra parte menos aquí, pero no, a ella le tuvo que dar un ataque de nervios en ese preciado momento que teníamos para correr del asesino con ca… digo inspector creo que tengo que dejar de leer tanta novela de acción, lo único que sé, es que el inspector me odia, le dijo a la directora que casi le hago dar una ataque al corazón ¡¿Pueden creerlo?!

Cuando llegó la mama de Trish le dio una mirada de -hablamos luego- que si yo fuera Trish hubiera metido mi cabeza en la tierra como una avestruz ¿esos son los que meten la cabeza en el piso? Porque sino estoy algo confundida…la cosa es que no sé cómo hace Trish para contentar a su madre porque siempre la termina premiando en vez de castigarla pero en cambio yo, ponía las cosas peor con las discusiones con mis padres, soy algo así como que un imán de problemas, pobre de mí, sabía que mi madre me iba a matar, no eso no, a estrangular…

Bueno Mixi deja de exagerar deja de leer tanta novela.

Eh cállate nadie te ha llamado a ti.

Cállate soy tu idiota...

El inconfundible sonido de la puerta interrumpió mi pelea internamente, me sorprendí un poco cuando vi pasar a mi hermano a la oficina de la directora, oh oh, esto no pinta bien él siempre se cobraba los favores que me hacía.

-¿Por qué habrá venido tu hermano y no tus padres?- preguntó Trish

-No lo sé y eso no me gusta- respondí un poco preocupada, mi hermano podía ser muy lindo y tierno pero también podría ser la persona más frustrante del planeta Tierra, ahora me tocaba esperar a que saliera de la oficina de la directora, ¿ya les dije que odio esperar?

Media hora después salió Jase de ahí, no sé pero sentí un gran alivio, me gire hacia Trish y dije:

-¿Trish estarás bien?- le pregunte.

-Si tranqui, sabes que contento a mamá como sea-dijo y me guiño el ojo, puse los ojos en blanco.

-Bueno nos vemos mañana, al parecer ya perdimos las clases de hoy- puse una mano en mi corazón melancólicamente y me dirigí hacia donde estaba Jase bueno le digo Jase por Jason.

Todo el camino me la pasé pensando en la excusa que le pondría a mamá pero ya había pasado una hora que íbamos en el coche, algo inusual si solo tardo 15 minutos en llegar a la escuela, me percaté de que algo no iba bien.

-¿A dónde me llevas Jase?- le pregunté con el ceño fruncido.

-Espera ya verás- me contestó él.

-Hey no seas así, dime- canturreé con voz de pito.

-Mira ya llegamos- musitó señalándome algún lugar.

Seguí la dirección de su dedo y ahí estaba, era nuestro lugar secreto,  nuestro parque preferido, donde los dos siempre nos escondíamos y hablábamos de nuestros miedos, nuestras inseguridades y eran las pocas veces que le decía cuánto lo quería, salimos del coche y no me pude creer lo que vi, todo estaba en ruinas, a unos metros de ahí vi nuestro pequeño refugio o bueno la entrada que estaba cubierto por arbustos, Jase y yo lo habíamos cubierto de estos para así poder escondernos ahí cuando quisiéramos, pero estaban marchitos, recuerdo las tarde que lloraba en los brazos de mi hermano porque mamá se iba a sus conferencias , veíamos las puestas de sol que hacia el lugar mágico, como extraño tanto eso.