El sueño del hada

El Proceso.

Dalia nos alojó en una habitación para las tres. Justo había tres camitas para dormir. Un armario para nuestra ropa. Había otras cosas en la habitación como lámparas, libreros. Un mueble cerrado con llave. Teniendo una única ventana al exterior. Cubierta por una rendija y una cortina blanca.

La primera noche no pude dormir, Dalia me dio varios libros y escritos para leer sobre hadas o la naturaleza. Una sola novela corta que habla sobre las relaciones entre humanos y hadas. Otra novela muy detallada de cómo un hada debe vivir entre humanos escondiendo su verdad.
Todos han sido muy interesantes, las noches han sido igual de increíbles. Su esposo hace fogatas. Mientras observamos el fuego, su esposo toca la flauta o tambores. Dalia nos da platicas donde explica tantas cosas sobre hadas. Cosas que jamás había leído en otro libro.
Ha sido todo muy informativo pero no hemos empezado nada. Según mañana por la noche hará el ritual. Para que me convierta en un hada.
Ay momentos donde siento arrepentimiento sobre lo que estoy haciendo o haré mejor dicho.

I
Después de una serie de sueños
Extravagantes sobre hadas desperté.
Hice las actividades que Dalia me ordenó. Un baño de rosas rojas en una tina de baño con varios aceites de frutas. Una oración al sol.

Después tuve que ir al bosque sola. Y hacer un tipo ritual. Frente un árbol hice un círculo me metí en el, al rededor coloque hojas secas, un tazón de agua a mis pies, lleno de pétalos de rosas. Tuve que vestir de blanco. Alzar el tazón y decir:

"OH NATURALEZA, OH ÁRBOLES GUARDIANES DE LAS HADAS, OH ANIMALES HABITANTES DEL BOSQUE ESCUCHARME"

Tome el tazón y lentamente lo tire sobre mí, desde mi cabeza.

Y pedir el permiso a la naturaleza.

"QUERIDA NATURALEZA TE PIDO QUE ME OTORGUES EL PERMISO A TU ENTRADA, A TU MUNDO. YO HADA DE CORAZÓN NECESITO VOLVERME SIERVA DE LOS ÁRBOLES MÁS ANTIGUOS, SEGUIR CON MI CAMINO"

Me quite el vestido poniéndome de rodillas rociando me una fragancia que Dalia me dio.

En la tarde comí todo tipo de frutas que me dio Dalia.
Volví a darme otro baño antes de la noche.

II

Ahora estamos aquí detrás de la cabaña. El esposo de Dalia hizo la fogata ellos pidieron al fuego permiso para tener protección. Hicieron un círculo con pétalos de rosa. En el centro de este pusieron todo tipo de flores, rosas, plantas y hojas de árboles. Velas blancas, ocho para ser exacta. En una sola fila, entren te del cubículo de Dalia donde ella estará.
El esposo de Dalia se coloco en un lugar lejano junto mis primas el dándonos la espalda. Dalia dijo que todo esto será muy doloroso. Sinceramente tengo miedo pero no puedo echarme para atrás.

-Todo esta listo Nataly, entra al círculo justo en medio despojate de toda la ropa colócate en cuclillas. Con tus brazos cubre tus senos.
Yo haré todo el proceso. Dijo Dalia.

Estoy asustada, camine hasta el centro del círculo. Me quite la ropa. Poniéndome en cuclillas. Cubrí mis senos. Tengo miedo.

Dalia saco el libro y dijo una oración muy extraña. Saco un ave muerta. La partió en dos.
De cada ala sacó plumas las remojo en un tazón de agua y otros ingredientes. Las puso en  otro tazón. Se acercó a mí. A mis espaldas.
Volvió a decir otras palabras que no entendía. Tomó mi cabello, lo amarro.
Me echo alcohol. Cuando menos sentí hizo dos aperturas en mi espalda. Con una navaja. Comencé a gritar de manera desesperada. La herida la sentía profunda. Tomé el vestido y lo presione con todas mis fuerzas. Ella metió las plumas en cada apertura. Me ardía dolía demasiado. No aguanto dolor. Siento que moriré.
La sangre corría por todas partes de mi cuerpo, Dalia comenzó a coser las dos heridas. Me caí, me estoy desvaneciendo los truenos en el cielo me espantan. Comenzó una tormenta. Dalia me cubrió con una sabana. El fuego de la fogata y de las velas se apago de inmediato. Dalia me cargo, siento que pierdo el conocimiento. Dalia me lleva hasta la habitación. Solo puedo escuchar los gritos de mis primas. Su esposo de Dalia aventó a mis primas a la habitación. Dalia me aventó a la cama me echo un bálsamo en la cabeza. El dolor de la inyección no duele a comparación del dolor de mi espalda. Veo que Dalia prende velas por todas partes, Antonia le reclama pero no puedo entender nada de lo que dicen.

Dalia salió, y yo voy muriendo.

III

Comienzo a ver la luz del sol. Trato de levantarme, siento demasiado dolor en todo el cuerpo en especial en mi espalda. Oh por Dios todo mi cabello está en la almohada. Estoy calva.
No se que es lo que ocurre.