a Italia, específicamente a Venecia. Porque me amas y yo te amo-
Levantó levemente sus hombros con una sonrisita en sus labios, extrañaba esas sonrisas que isma le causaba.
-¿Venecia? Eso queda muy lejos ¿Acaso escapas de alguien? -
El menor empezó a reir ante lo que a él le parecía una buena broma, risas que pararon al ver la expresión completamente seria del mayor... Casi parecía que lo estaba asesinando con la mirada.
Se congeló en su lugar al sentir como el hambiente se volvía pesado.
La fuerte mano de Raúl apretó el brazo del menor acercandolo abruptamente hacia él, su mirada seria causó una mirada temerosa en ismael...nuca había visto a su chico de esa manera.
-Ra-Raúl basta...me lastimas-
Se quejó.
-Escuchame bien, Ismael, si vas conmigo el camino va a ser un poco peligroso-
Su mirada seguía clavada en los bellos ojos de Isma que parecía estar más confundido, Raúl susurraba como si le estuviera confesando el mayor secreto de su vida.
-pero si te quedas va a ser peor, ellos sa...-
Un fuerte ruido, un ligero tambaleo en el coche seguido de un calor feroz a causa de una explosión a sólo un par de calles cortó la "charla" que mantenían.
-¡mierda! ¡ismael, cubrete!-
Aceleró el coche todo lo que pudo mientras empujaba un poco al chico para que se inclinara y cubriera su cabeza quedando con su cabeza entre las rodillas sin entender bien que sucedía.
-esos idiotas-
Gruñia Raúl doblando en unas calles para huir lo más pronto le fuera posible de la escena, huir era lo más bajo que podía hacer según Raúl pero no en ese momento, en ese momento lo único que le importa era mantener a isma a salvo.
No se perdonaría si algo le pasaba al menor
El sonido de disparos y el rechillar de las llantas de un coche hicieron que el cuerpo de isma temblara dejando escapar un chillido completamente atemorizado.
-tranquilo...vas a estar bien. Lo juro-
Raúl le dio una mirada fugaz mientras buscaba algo en la secreta del coche sin dejar de avanzar a toda velocidad, un arma algo pequeña relucia entre las manos del castaño.
Isma lo miraba aún más asustado que antes temeroso de lo que iba a pasar.
-¿Ra-Raúl? No les dispares ¡Po-por favor!-
Raúl lo ignoró por completo al ver como una bala transpasaba por el parabrisas trasero hasta salir por el parabrisas delantero creando una lluvia de pequeños cristales dentro del coche.
-esos hijos de Puta tienen una puntería de mierda-
Gruño mirándolos por el retrovisor y luego al frente, una callejón que llevaba a un atajo hasta una carretera casi oculta le dio una idea.
Mirándolos po el retrovisor disparó su arma dando justo en una de las llantas del coche contrario que empezó a derrapar sin control, aprovechó para su última jugada con una sonrisa socarrona en los labios disparo a unos barriles de gasolina arrojando posteriormente una botella con casi un centímetro de la fórmula del napalm de unicel seguido de un puño de cerillas encendidas, esa cosa casi se enciende en su mano.
Aceleró fuerte siendo consiente del tamaño de la explosión que causaba esa mezcla
El auto de los desafortunados hombres que perseguían al castaño y su pelinegro pasó justo por encima de todo lo que había arrojado Raúl, la gran explosión estalló justo debajo del coche prendiendo en llamas feroces y vivas todo a su alrededor, almacenes vacíos, casas abandonadas y los cuerpos de los dos hombres que se encontraban en llamas literalmente.
Raúl miró por el retrovisor cuando ya estuvo lo suficientemente lejos para observar la explosión con una pequeña mueca en su rostro.
Ismael lo miraba más confundido que en un principio, ese no era el chico dulce que él conoció, no era el chico que resolvía los problemas sin usar violencia.
-¿Ra-Raúl?-
Jadeo sorprendido mirando el coche en llamas, el castaño lo miró poniendo toda su atención en él.
-¿es...están muertos? -
Realmente no se lo creía, la mirada de Raúl parecía haber tomado un brillo algo distinto.
-se lo merecían-
Bufo empezando a conducir ya más calmado por la carretera mirando a ismael que parecía estar congelado.
-¿te lastimaron los cristales?
Le retiró con cuidado algunos trozos que había entre sus cabellos rebeldes
-y-yo no pero...¿en verdad los mataste?-
Murmuraba sin poder creerlo todavía.
-¿¡que querías que hiciera!? No iba a dejar que te lastimaran mucho menos por mi estúpida culpa-
Apretó el volante entre sus manos descargando su frustración.
Ismael guardo silencio sintiendo todavía a su corazón ir a mil.
La noche empezaba a llegar y con ella la oscuridad en la carretera.
Raúl estacionó el coche a un costado de la carretera desolada para poder deshacerse de los restos de cristales para que isma fuera más cómodo.
Volvieron a entrar al coche y el silencio que envolvía a ambos era algo tedioso.
Al empezar a conducir Álvarez no podía evitar mirar al joven Prego quien iba llevaba la cara recargada contra la venta mirando las nubes en el cielo nocturno.
-perdoname, isma...lo siento mucho en verdad-
Suspiró el mayor tomando un pequeño atajo a lo que parecía volver a la ciudad.
-tienes razón me pasé un poco al terminar con su vida pero...-
Frunció ligeramente el ceño tomando aire para continuar, ismael lo miraba curioso, curioso de sus pequeños detalles y reacciones.
-sólo quería protegerte...estaba asustado...asustado de perderte...de nuevo-
Susurró lo último girando su cabeza para mirar al de ojos claros.
Una de las manitos de ismael reposo sobre la mano grande e imponente de Raúl.
-te perdono...entiendo que quieras protegerme pero...no me gustó nada ver eso-
Suspiró apoyando su cabeza en el hombro del mayor quien sonrió de forma tímida al instante.
-Disculpame prometo que no volverás a presenciar algo así-
[°°°]
-Bien ¿entonces cuál cama quieres?-
Habían llegado a un hotel lujoso a las afueras de la ciudad para descansar esa noche.
A la mañana siguiente partirian lo antes posible.
-la de la izquierda-
Pidió lanzándose a la suavidad de la cama, largo un suspiro al poder estar tranquilo en ese momento.
-bien, buenas noches-
Le sonrió y cada quien fue a su cama.
Isma se hizo bolita ente las suaves mantas.
°°°
Se removia inquieto con la respiración irregular por la pesadilla que se daba lugar, despertó de un salto jadeando asustado.
-joder...-
Murmuró frustrado por no poder dormir, se acercó a la cama de Raúl tocando con cuidado su cara
-¿puedo dormir contigo? -
Raúl asintió vagamente haciéndose a un lado para que isma se acomode.
El menor cerró sus ojos dispuesto a dormir cuándo sintió las manos de Raúl en su cintura aferrándose a él.
_______________________
Estoy pensando hacer un libro solo para esto xd.
Hoy vi un maratón de películas de acción ¿eso lo explica? XD.
Adiós 🐧 💕