ᴍysᴛᴇʀʏ ᴛᴇᴀᴍ {sᴛᴀɴᴄᴇsᴛ]

•Familia•

Es largo esté capítulo así que a disfrutar ;)

Los días en Oregón pasaron rápido, las investigaciones de Stanford se basaban en tantas cosas que Lee ni podía esforzarse a entender, solo a defenderlo cuando el peligro tocaba la puerta o entraba de golpe a sus vidas.

— ¿Tenías que hacer esto? —pregunto Stan tomando el diario de su hermano— no quiero estar en este lugar veinticuatro horas... Debe haber otra forma de matarlos.

—Lo haya o no debes quedarte aquí en el bunker conmigo, recuerda que deje la hoja del hechizo en la habitación y no pienso regresar ahora.

— ¿Que pasará con el pueblo? —pregunto aún alterado, la idea de que al salir y todos fueran zombies de alguna manera le hacia sentir culpable.

Ford suspiro pasando una mano por su cabello frustrado, dejó caer su cuerpo en la silla y dió una vuelta con ella. —Lo más probable es que no llegue ni a acercarse... Es más puede que solo vallan a rondar por la cabaña ya que el pueblo está bastante lejos para ir sin razón alguna. Ojalá y nadie este afuera en estas horas.

( . . . )

Ambos con muecas de asombro miraban las cosas que habían hecho los zombies, la cabaña estaba semidestruida por afuera y la sala como una que otra habitación de la planta estaban destruida. — Estos imbéciles me costarán una semana de reparaciones.

—Y varios Miles pero al menos estamos bien, estás bien y eso es lo que importa —explico dejando el diario sobre la mesa y comenzando a hacer anotaciones sobre lo que habían vivido.

Stan sonrió ante el último comentario de su hermano, se acercó rodeando su cintura y dándole un delicado besado en el cuello. Ford seguía haciendo varios escritos con una sonrisa tratando de ignorar las cosas que hacia su hermano. —Dejame terminar esto y en un rato te acompaño —susurro mirándole de reojo haciendo que Stan soltara un quejido. Se tiró al suelo y comenzó a moverse como si el diera un infarto.

— ¡Voy a morir si no vienes conmigo! —grito en un burrinche mientras rodeaba la pierna de Ford.

—Stan el suelo está lleno de baba, mejor párate y ayúdame a limpiar mientras termino.

— Bien —susurro enojado dando un golpe a la mesa— pero acabando iremos a dormir.

—Dormiras tu, tengo cosas que hacer.

— ¿Es enserio? Casi nos devoran Stanford y ¿no piensas tomarte un descanso? Solo este fin de semana... Ya investigamos desde el mes que llevamos aquí.

Ford se resgino diciéndole que si iría a dormir con algo de pesadez. Un par de horas después cerro el diario pasando una mano por el, su trabajo comenzaba a tomar forma.

— ¿Terminaste? —pregunto Stan dejándole una taza de café sobre la mesa con una sonrisa mientras sostenía la suya.

—Algo así —susurro caminando con el hacia el sofá tomando la taza— hice el retrato y la explicación aún que ya se acalambro mi mano —sonrio mostrando su mano con burla.

— Deberías tomar un descanso, apenas te graduaste.

—Tu deberías hacerlo.

— Solo me gradué de la única carrera que necesito mientras tú lo hiciste de... ¿Quince?

—Despues de la numero veinte perdí la cuenta —se recargo en el hombro de Ford con la mirada perdida, estos momentos eran tan suyos ya que su vida comenzaba a formarse— Stan... Somos una familia ¿Verdad?