Ha pasado un mes desde que el gran empresario de Ellie —Byun Baekhyun— decidió poner como portada en una de las revistas más importantes del mundo del modelaje la cara de un pelinaranja llamado Oh Sehun, adolescente cuyo es el problema del retraso infernal de los diseños de nueva temporada. Haberle elegido siendo menor de edad le hace tener varias dificultades para firmar el contrato y empezar con las sesiones de fotos. Sehun; aparte, necesita una serie de entrenamientos faciales para practicar el tipo de expresiones que debe gesticular junto a las posturas que le hagan sentir cómodo y natural en cada fotografía. También deberá acostumbrase a maquillarse, a sufrir retoques fotográficos, tener constantemente a mujeres u hombres arreglando cualquier imperfección de su ropaje, cabello y más... por lo que Baekhyun entiende que todo se reduce a una sola cosa, tiempo, el cual no hay porque primavera está a la vuelta de la esquina.
De nuevo, en su despacho de lujo y moderno el rubio golpea la punta de su lapiz 3B—para sombreados perfectos—sobre la mesa de cristal. Le ha dedicado suaves trazos, empeño e imaginación a un boceto del adolescente llevando una pieza que él mismo ha diseñado para estrenarla ese año junto a la nueva estrella de Ellie. Pero ha sido demasiado tiempo desde que el ahora gran empresario diseñó algo. Cuando asumió dirigir su empresa multinacional y lanzó su propia marca...no contó con perder horas de libertad, no esperó que no tuviera tiempo de centrarse en lo que verdaderamente le gustaba y gusta hacer, diseñar; de hecho, recuerda que la última pieza de ropa que dibujó sobre una lámina fue un magnífico vestido de estilo vintage, falda cola sirena, color azul marino y muy occidental para Kim Taeyeon en 2011. Bosteza y arruga el papel con el boceto de Sehun para perderlo de vista en un rincón de la mesa y empezar con otro. Sabe que lo único que importa es la ropa pero le molesta, realmente le molesta no pintar al mencionado como le vio en la tienda o cuando lo volvió a hacer desde el interior de su limusina. El lápiz delinea los hombros anchos del joven y baja reafirmando unas caderas rectas de hombre. El alto ha llamado la atención del más bajo, su atractivo ha conseguido mantener la mente de Byun severamente atrapada en cada rincón de lo que es Oh; sin embargo, dos golpes suaves de nudillos sobre la puerta la cual da acceso a la estancia, le hacen bajar rápido de las nubes. Es Minseok con varios de los papeles que Baekhyun pidió hace unos días que le trajera. El rubio tapa disimuladamente su boceto con otra lámina en blanco que tiene por ahí.
—La residencia de la señora Oh...—menciona Minseok dejando caer los papeles sobre la mesa los cuales no se desordenan del todo pero sí lo suficiente para dejar los diferentes bordes a la vista del rubio—Realmente está muy lejos de casa.—una foto que el departamento de policía les ha dejado, adorna el lado izquierdo del primer papel.
Baekhyun arquea la ceja. Lo único que necesita es la firma de esa mujer para tener a su nuevo modelo.
—Eso no es problema siempre que firme...—coge el primer folio y lee— Es preciosa...—espeta de repente rompiendo el silencio que se había formado hace poco. Es cierto, la señora Oh es hermosa para la edad que tiene, justo del gusto de Byun Baekhyun—sí, a este le gustan las mayores—. Apoya la espalda sobre el respaldo de su cómoda silla provocando una leve inclinación hacia atrás— Iremos a Canadá pasado mañana mismo... —agarra los papeles entre sus cuidadas manos a base de manicuras y ordena los folios golpeando la base de estos sobre la mesa— Infórmale a la aerolínea de siempre, quiero que mi avión privado esté listo.
El otro hombre asiente ante las palabras del empresario y propietario de Ellie. Haciendo una reverencia tradicional coreana deja la estancia cerrando la puerta que hace tan solo unos minutos había abierto. El ahora solitario Byun apoya los codos sobre el cristal de la mesa y la barbilla sobre los nudillos de las manos que ha entrelazado.
¿Qué clase de educación puede mostrarle a la madre de Sehun sí se presenta así como así?
[...]
Aquella noche Sehun dejó que Ga Young llorara apoyada sobre su pecho por el abrupto rechazo de su mejor amigo. Después, la acompañó a casa y adivinad... Consiguió su número! Bendice el día en el que se le ocurrió salir a correr y espera impaciente algún mensaje o llamada de ella; no obstante, ese domingo su futuro jefe le ha llamado para decirle—o mejor dicho exigirle—que se vista para salir. Justo a la 9:00 A.M el pelinaranja se está cepillando los dientes con todavía el sueño en los ojos. No tiene nada planeado para ese día excepto sentarse a ver la televisión y comer helado pero Byun le ha desencajado los planes. No opta por un ropaje formal, más bien escoge uno simple, supone que no será por mucho tiempo la salida. Tampoco se preocupa por darle una imagen decente a la estrella que cambia la vida de muchas personas. Cierra el armario de baño y se observa la cabellera anaranjada, parece más rebelde de lo normal y eso que está corta. Hunde los dedos de la mano acariciando su cuero cabelludo y separa hebras arqueando una ceja, provocando leves arrugas en la frente. Peina el cabello hacia un lado dejándose una leve cresta que junto a las pecas de su rostro lo hacen lucir como un occidental muy atractivo. Ya está listo. Ha sido muy pronto así que se sienta en el sofá del comedor a esperar. Lo cierto es que también ha invitado a Hoseok pero parece ser que algo más urgente le ha surgido y no puede acompañarles.
¿Qué es lo que ahora busca Byun Baekhyun de él?
El contrato todavía no está firmado y tampoco han empezado con las sesiones de fotos… A Sehun le duele la cabeza de tanto pensar y masajeándose ambas sienes llega a la conclusión de que su jefe es un pesado.
Unos treinta minutos más tarde recibe un mensaje.
"Ven dónde suelo dejarte"
Aunque ya hubieran mantenido un poco más de cercanía Byun no sabe dónde está la casa del pelinaranja, tampoco el mencionado está dispuesto a decírselo. A Sehun le gusta mantener su vida privada en eso… privada; sin embargo sabe que algún día deberá decírselo. Algún día cuando sea su jefe.
El alto sale de la vivienda y cerrando la puerta se dirige a la zona donde sabe que le esperan. Al llegar ojea desde la otra cera un Toyota-CHR —un todo terreno— de color blanco con las ventanas polarizadas. Es un coche diferente pero sabe que es Baekhyun. Nadie en el lugar tiene un vehículo tan caro. Además, llama la atención; de hecho, los coreanos y coreanas que pasan por ahí se paran a mirarlo.
El de cabellera anaranjada cruza la calle para abrir la puerta delantera del coche y subirse. Una vez cerrada observa al rubio, el cual porta una mascarita y una gorra que le cubren casi todo el rostro. Probablemente para no ser reconocido y que los fans no les den problemas.
—¿ A dónde vamos?—pregunta Sehun descansando la espalda en el respaldo del asiento.
El mayor arranca comenzando a conducir y manteniendo una mano sobre el volante—seguro de su conducción— se baja la mascarilla para hablar.
—Vamos a comprar ropa.
Sehun frunce el entrecejo. No es tan pobre para que le compren ropa, él ya tiene la suya. La mueca de inconformidad que se le ha dibujado en la cara hace que Byun le explique.
—Será la ropa con la que iremos a visitar a tu madre…
El joven se sorprende.
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🄻🄰 🅅🄸🄳🄰 🄳🄴 🅄🄽 🄼🄴🄼🄾 {🄱🄰🄴🄺🄷🅄🄽/🅂🄴🄱🄰🄴🄺}
FanfictionReseña de un joven con 18 años llamado Oh Sehun que cuenta su vida, su persona y qué es lo que le sucede al adaptarse a un mundo que no es para él. ✓¿Te aburres?¿Quieres leer una historia BaekHun/SeBaek que no sea muy larga? Te invito a leer esta E...