POV Isabela
Corrí y abracé a mi amigo. Hace un año que no lo veía y apuesto que él también me extrañaba.Alex: ¡Qué alegría volver a verte! ¿Dónde está Chiara? ¿Y Lili? – bajé la mirada.
Isabela: ellas…
Alex: no me digas que… el ataque de fuego – me abrazó –. Es un milagro que sigas viva.
Isabela: lo sé…
Alex: ¿Y ellos? – señaló a los cuatro elementos.
Jonh: nosotros somos sus amigos. La encontramos y la hemos ayudado.
Isabela: son realmente unas buenas personas.
Alex: les agradezco el haberla ayudado. ¿Te quedarás acá?
Isabela: por un tiempo, debo hacer algo con ellos.
Alex: ¿Qué?
Manuel: algo que no es de tu incumbencia.
Alex: ¡Uy, qué genio!
Celeste: ya déjalo.
Isabela: ¿Crees que podamos quedarnos por un tiempo?
Alex: ¿Tienes dinero? Sabes cómo es mi papá.
Isabela: sé que los hará un descuento.
Alex: además, hay una oferta. De pareja, así que les recomiendo compartir habitación.
Celeste: ¡Perfecto! Las chicas y los chicos.
Alex: creo que no me entendiste, dije pareja, hombre y mujer.
Isabela: ¿No puedes…?
Alex: lo siento.
Manuel: no importa. Isabela y yo, Celeste y Jonh.
Jonh: por mí está bien.
Celeste: no tengo opción.
Manuel: ¿Y tú Isabela?
¿Compartir habitación con el príncipe Manuel? Eso nunca me había pasado por la cabeza. Pero, ¿Qué de malo podría pasar?
POV Celeste
¡Claro! ¿Qué podía esperar? Era obvio que Manuel escogería a Isabela como su compañera.Isabela: eh… yo… está bien.
Alex: bueno, vamos que tenemos que hacer la reservación antes de que se llene.
Continuamos caminando. Jonh y Alex platicaban, yo iba con Isabela, y Manuel iba solo.
Isabela: el príncipe Manuel siempre es pensativo ¿Verdad?
Celeste: desde lo de Bia – agachó la mirada –. ¿Qué piensas de que dormirás con Manuel?
Isabela: la verdad nunca imaginé que dormiría con el príncipe Manuel.
Celeste: ¿Estás emocionada?
Isabela: más bien estoy nerviosa.
Celeste: ¿Cómo que vas a pasar la noche con Manuel?
Bia: si, ya está decidido.
Celeste: ¿Qué dirá tu mamá cuando descubra que no pasaste la noche en tu casa?
Bia: tú me ayudarás con eso – sonrió.
Celeste: estás emocionada, supongo.
Bia: más bien estoy nerviosa.
Celeste: imposible…
Isabela: ¿Qué?
Celeste: nada.
Continué el camino en silencio. Todas sus actitudes y reacciones son idénticas a las de Bia. Los sucesos que he pasado con ella y que son similares a los que pasé con Bia, actúa igual que ella.
Llegamos a la aldea. Había demasiada gente y por lo visto era día de mercado. Hace mucho que no estoy en un lugar con tanta la gente, la última vez fue en el cumpleaños de Bia precisamente.
Jonh: cuánta gente ¿No?
Celeste: si, me hace recordar la última vez que estuve en un ambiente así.
Jonh: ¿Cuando fue?
Celeste: en el cumpleaños de Bia.
Alex: vamos, les ayudaré a registrarse.
Jonh: vamos Celeste.
Asentí y me acerqué a donde Alex nos indicó.
POV Jonh
Un señor con un gran parecido al amigo de Isabela. Debo admitir que me cayó muy bien ese señor, creyó que Celeste y yo éramos pareja. Qué lástima que no es de verdad.Jonh: ¿Todo bien Celeste?
Celeste: no, Isabela dormirá con Manuel – y yo que estaba feliz por dormir con ella. A ella sólo le interesa Manuel.
Jonh: ¿Y por qué no pediste con él?
Celeste: él la eligió a ella. Además, dijo que la protegería de todo. Activó su poder por ella, sabemos perfectamente que él no puede activar su poder otra vez.
Jonh: perdió mucha práctica y ahora no sabe cómo controlarlo.
Celeste: exacto. Y eso no está bien.
Jonh: aunque lo niegue, sabemos que él ve la viva imagen de Bia ahí. Y no creo que sea capaz de notar la diferencia.
Celeste: me gustaría estar de acuerdo, pero no tienen ninguna diferencia más que ella es humana y no tiene poder. El físico, la personalidad, la mentalidad. Es la misma que la de Bia.
Jonh: ¿Cómo puede alguien ser así de parecido?
Celeste: algo me dice que detrás del accidente de Isabela, hay algo más.
Jonh: ¿Y qué puede ser?
Celeste: lo voy a averiguar.
Entramos a la habitación y quedamos sorprendidos al verla.
Celeste: hay UNA sola cama.
Nos miramos a ver. Esto no puede estar mejor.
POV Manuel
Esto no puede estar peor. ¿Una sola cama? Eso significa que debo compartirla con ella. Vamos Manuel, no tiene nada de malo si se dan la espalda.Isabela: usted duerma en la cama, yo me acomodo perfectamente en el suelo.
Manuel: ¿Qué dices? No dejaré que duermas en el piso.
Isabela: ¿Va a dormir en el suelo? No puedo dejar que usted duerma en el suelo.
Manuel: ya sé – tomé una de las cajas que había y saqué las sábanas que tenía dentro. Pinté las letras "I" y "M" de forma que haya tres de cada una –. Ya veremos qué sale. Y quien gane duerme en la cama.
Isabela: está bien.
La aventé y cayó recargada en la pared con una punta en el suelo.
Isabela: ¿Otra vez?
Manuel: si, otra vez – cayó igual. Lo intenté tres veces más y seguía lo mismo.
Isabela: creo que… tendremos que compartir cama.